WinterFrost One Shots

I like me Better- Lauv

No es fácil estar borracho y estar enamorado. No saber quién soy pero estar seguro de que estoy bien mientras tus ojos verdes me vigilen. Tú tomas a media noche el café que suele ser de las mañanas.
-¿No crees que estás tomando demasiado Barnes?- Dijiste antes de dar otro sorbo.
-No lo sé - dije arrastrando un poco las palabras, bueno, entonces sí lo sabía.
-Relájate, si sigues así no recordarás mi presencia aquí por la mañana. - Sonreiste sutilmente, la luz de luna le daba un brillo encantador a tu sonrisa, a tus ojos, a tu rostro.
-Maldita sea. - Dije en un susurro.
-¿Perdón? - Me miraste divertido.
-Me gusta más cuando estoy contigo. - Dije recargandome en la silla de jardín, la noche era hermosa y me ayudaba a que las palabras fluyeran.
-Estás ebrio Bucky. - Reiste ligeramente.
-No, Loki. Bueno, sí Loki. Pero de verdad me gusto más cuándo estoy contigo.
-¿Te gustas?  - Tomaste otro sorbo de tu café divertido por lo mal que estaba mi gramática gracias al alcohol.
Y es que noches como estas, sustancias como las que ingresaban en mi sistema sin parar sacaban otro lado de mi, uno que me daba vergüenza mostrar ciertas veces.
-¡Put your head on my shoulder!- canté gritando.
-Shhh- cubriste mi boca riendo. -Tus vecinos duermen, controlate. - Tratabas de ocultar tu sonrisa lo que sólo provocó que tu rostro se volviera ligeramente rojo, notorio en tu blanca piel. Separaste tu mano de mi cara.
- Eres hermoso. - El sonrojo era evidente
-Cállate anciano.
-Supe desde el primer momento en que te vi que me gustaría quedarme para siempre a tu lado, me gusta mucho estar contigo. - Dije perdido en tus manos que buscaban desesperadas la taza para aferrarse a algo. Pero tu rostro seguía estoico.
-La primera vez que me viste me golpeaste en el rostro. - Dijiste mirando a la luna
-Y tú te clavaste en mi corazón.
-Te apuñalé en el estómago.
-Es lo mismo.
-Estás demasiado borracho James, dame eso.- me quitaste la lata de mi mano y apartaste la hielera de mi. Aproveché para torpemente tomar tu mano, me miraste entre burlesco y sorprendido.
-No sé qué es pero tengo ese sentimiento de querer quedarme acostado a tu lado aunque mi habitación ya ni tenga techo. - Dije lo más fluido que pude, en mi mente yo era todo un Romeo.
-Estamos en un patio, obviamente no hay techo, bruto. - Soltaste tu mano de la mía y acabaste tu café. Te paraste con la intención de ir por más pero con la velocidad de un rayo, si se tambalearan, me puse en frente de ti.
Debido al poco equilibrio en mi sistema terminaste por sostenerme para evitar mi cómica caída.
-Loki, cariño, dejemos que el día transcurra a su ritmo.
-Es de noche Barnes.
-Perdón, soy un borracho que habla demasiado, pero entre tanto sin sentido tengo algo importante que decir.- tome aire como si esperara que me extrangularas al terminar de hablar.- me gusta más mi forma de ser cuando estoy contigo, me gusta mucho cómo el mundo parece desmoronarse cuando escucho tu voz. Me gustas tú, tu forma de ser, me enamoran tus ojos, tu sonrisa, tu sarcasmo, tu fuerza. Me gustas mucho.

No me soltaste, tampoco me extrangulaste, simplemente desviaste la vista, tu extremadamente rojo rostro te delataba, pero no tanto como esa sonrisa que reprimías al morderte el labio.
-Creo que sería mejor que marche. - Me soltaste suavemente, y sin un soporte nada evitó que cayera al pasto sentado. Inmediatamente reaccionaste. -Perdón, ¿te hiciste daño?
Sólo atiné a darte la mano y sonreír como el estúpido borracho que era.
-Quédate un rato más, aquí a mi lado, acuestate conmigo un rato, admiremos el firmamento. La noche es casi tan bonita como tus ojos.

Sonreíste y te sentaste a mi lado.
-Supongo que alguien te tendrá que cuidar de la resaca de mañana. - Apoyé mi cabeza en tus piernas, me perdí en tu precioso perfil.
-Creo que te amo.
-Se ve.
-¿Me quieres?
-No vomites sobre mis botas, por favor.
-Loki ¿Me quieres? - Me mirabas con ojos súplicantes.
-Sí,  Barnes, te quiero, pero no le digas nada a Bucky
-Yo mantendré tu secreto, él nunca se enterará.- sonreí victorioso. - te quiero mucho me tienes Loki-to - reí a mi propio chiste y besé tu mano.
Me quedé allí, dormido en tu mirada, soñando con tus caricias en mi cabello por un buen rato hasta perder la poca noción de mí mismo que quedaba.

-También me gustan más los días cuando estoy contigo James.