El segundo mes trato mejor a Luka.
Su plan de no ver a la rubia funcionaba, ya que al no tener a la tentación cerca y verla cada semana era más fácil olvidarse de ella, pronto su mente volvió a llenarse de la franco-china, aunque no pensaba en ella de la misma manera en la que pensaba en Chloe.
Con Marinette sus pensamientos eran puros, él quería protegerla, tratarla bien, enseñarle como el amor de verdad se siente, que no es solo suspirar por tu crush cada vez que pasa.
Las maripositas que él siente cada vez que la ve, quería que ella las sintiera cuando ella lo mira a él.
Si la azabache no estuviera tan obsesionada con el modelo, Luka estaba más que seguro que ya sería su novia, pero él no se rendía, no era el tipo de chico que lo hacía fácilmente.
Él lo intentaría hasta conseguirla...
... O ese era el plan principal.
Pero como si el destino estuviera en su contra,decidió acabar con la paz mental de Luka justo cuando el joven sentía que por fin ya había sanado del veneno de Chloe bourgeois.
Un sábado a las 3 de la mañana recibió una llamada de su hermana, pidiendo que por favor la fuera a buscar a casa de Nino, el metro había cerrado y tenía ganas de irse.
A Luka no le sorprendió, su hermana no era muy de fiestas, pero como era el cumpleaños de Nino y le caía muy bien, decidió ir a la fiesta con sus amigas.
Con cuidado de no despertar a su madre, Luka salió del barco y, después de que su hermana le enviará la dirección por texto, se dirigió a casa del moreno. Cuando estuvo cerca ya se notaba el ambiente de fiesta, luces de varios colores salían de la casa y la música se escuchaba alta. Pura musica comercial, no del tipo que a Luka le gustaba, aunque debía admitir que el ambiente le pareció divertido, a él no le molestaba una buena fiesta.
El pelinegro le escribió a su hermana para avisarle que ya estaba fuera, pero al ver que la segunda palomita en whatsapp no aparecia, refunfuño, seguramente a su hermana se le había acabado la batería mientras el llegaba.
- Joder, mira que siempre se lo digo, Juleka carga tu maldito celular - se quejo él mientras se quitaba el casco. Se bajó de la moto y con desgana camino hasta la puerta, no le quedaba otra que buscar a su hermana dentro.
Llamó al timbre varias veces hasta que al fin le abrieron la puerta, un Nino algo borracho lo reconoció ya que lo había visto por la escuela.
- Hombreeeeeeeeeee -
- Hola Nino -
- Luk... ¿Luka no? -
- Si ¿No sois un poco jovencitos para andar bebiendo? -
- Jajaja amigo esto es Francia -
- Aquí la edad legal de beber son los 18, pero se empieza a los 13 - dijo una Alya, que estaba abrazada a su novio. Los dos se rieron del comentario de ella.
- Touché, bueno vengo a por Juleka -
- Pasa, pasa, estara por aqui o en la piscina - dijo Nino, dandole paso al mayor - Te ayudaria a buscarla pero estoy algo ocupado - añadió con una sonrisa coqueta antes de rodear su novia con un brazo y irse a dios sabe dónde con ella.
Luka negó con la cabeza, pero no podía decir nada, a su edad él era incluso peor. Cerró la puerta y empezó a buscar a su hermana o alguien que le ayudará.
No sabia que Nino era tan popular, no conocía a la mitad de la gente ahí.
Busco en la cocina, en el salón, en los baños y nada, su hermana no estaba en la casa, así que solo le quedaba mirar en el patio de atrás, estaba más vacío que la casa, lo que Luka agradeció porque así pudo tomar un poco el aire, con los ojos cerrados.
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Hellfire! || Lukloe. || +15
FanfictionLuka no estaba bien. No lo había estado durante los últimos tres meses. Y sus problemas tenían nombre y apellido: Chloe Bourgeois. No me pertenecen ninguno de los personajes de Miracolous Ladybug. Sin animo de lucro, simplemente un fanfic. Esto iba...