Como cada noche me acosté pensando en ti, y guardé en mi memoria aquella foto que te tomé en nuestra primera cita, lucías hermoso, y te soñé de nuevo, justo aquel día cuando tu mano sostenía la mía, cuando no había preocupaciones porque habíamos separado esa tarde para nosotros, en ese sueño todo se sentía igual, podía sentir como tu corazón latía fuerte al pegarme a tu pecho, podía sentir lo libre que éramos aquella tarde. Quiero que se repita ese sueño una y otra vez. Pero te confieso que no es el único sueño que he tenido junto a ti.
-PMGV