Era como si alguna maldicion nos siguiera. Corrí nuevamente a la habitación de Miller pero el ya no estaba ahí.
—Hey —escuché a mis espaldas. Me giré y vi los enormes ojos color marrón de Nickolas. —Hey estás bien, que te pasa? —preguntó.
—Miller, no esta —contesté. Nickolas comenzó a reír y señaló el pasillo. Miller caminaba hacía nosotros despacio. —Miller —dije suave cuando llego hasta nosotros.
Miller miro mis zapatos pero no dijo nada, luego miro mi cara como si no me reconociera. Me asusté y comencé a sentir calor. El no decía nada solo me miraba y a mi mente llegaron muchos recuerdos, recuerdos que yo no olvidaría jamás.
—Miller —volví a decir suave. Los ojos de Miller dieron esa especial intermitencia.
—Mía te vez muy pálida, estas bien? —preguntó en una mueca. Suspire profundo en alivio un alivio que estaba segura no duraría mucho tiempo.
—Si, estoy bien. Tu, como estas?—pregunte.
—Estoy bien—contesto.
Nickolas miro a Miller y me miro nuevamente. Estaba confundido al igual que yo.
—Creo que será mejor que descanse, aun me siento algo mareado —dijo Miller entrando en su habitación. Al cerrar la puerta Nickolas me tomo del brazo e hizo que caminara unos cuantos pasos.
—Que te sucede?—preguntó. Hice que me soltara de inmediato.
—Nada—conteste.
—No me mientas—. Escuché pasos a mis espaldas. Me giré y ahí se encontraban Brus y Kenai. Nickolas los miro y volvio a mirarme a mi. —Que está pasando,— pregunto.
—Creo que es mejor hablarlo en otra parte—dije comenzando a caminar. Me detuve cerca de la biblioteca y vi de lejos a Sirus. Ella sonrió y en su cara se reflejo la maldad. La maldad que al parecer solo yo veía.
—Creo que tendrá que esperar —dijo Nickolas mirando como Sirus sonreía.
—Esto no puede esperar Nickolas—contesté.
—Yo creo que si—dijo mientras caminaba lento hacia Sirus.
—Miller está perdiendo la memoria— dije casi ahogada. Nickolas se detuvo bruscamente. Pude escuchar a Kenai tragar saliva mientras Brus se quedaba inmóvil.
—Como lo sabes?—preguntó. No sabía como explicarle ya que no había pasado nada grave pero mi pecho se sentía arder como si la pérdida de memoria de Miller no fuera nada comparado con lo que pasaría.
—La verdad no se si la esta perdiendo es que—intente decir.
—No será una distracción para que no vaya con Sirus?—preguntó haciéndome desesperar. Mire a Sirus y reía satisfactoriamente.
—Es cierto lo que dice Mía Nickolas, Miller no reconoció a Kenai y olvidó porque mandó a buscar a Mía . Algo está pasando—contestó Brus.
—No puede ser, Axel—Nickolas salió corriendo ignorando a Sirus y a su paso a los demás estudiantes que paseaban por los pasillos.
—Nickolas—grite pero inútilmente se detuvo.
—Mía—escuché gritar. Jay trataba de alcanzarme mientras yo trataba de alcanzar a Nickolas.
Nickolas se detuvo frente a las escaleras principales. Se escuchaban gritos a fuera y algunos estudiantes entraban desesperados.
—Hey que está pasando afuera?—pregunté a uno de los estudiantes que entraba pero este desesperado corrió sin contestar.
