Tori lanzo unos cuchillos pero Amber los detuvo haciendo que estos quedarán colgando tres pasos adelante. Afuera se escucharon pasos y hojas crujiendo que nos obligaron a salir, algo estaba ocurriendo. Al salir nos percatamos que de las ramas de los árboles allí cerca cain hombres vestidos de negro y verde monte. Las manos de Miller estaban en fuego al igual que las de Kenai. En posición junto a Yúe esperando el momento en el que Tori saliera. Nickolas corrió hasta un chico de cabello gris dándole una patada en el estómago haciendo que este se arrodillara a buscar aire. Nicko tomó su cabeza y le partió el cuello. Axel tenía las garras fuera e hizo unos cuantos cortes en el pecho de uno de los chicos. El olor de la sangre de aquellos chicos me estaba volviendo loca, la nariz me picaba como si fuera a estornudar.
—Mía —Yúe grito señalando a Tori que salía de la cueva. Tire de la cuerda de mi arco pero fue desviada por una de las patadas de Derek y la flecha dio en una de las piernas de Tori. El comenzó a reír y saco la flecha de su pierna.
—No funcionó —grité para que Yúe que se encontraba peleando con un chico grande y fuerte me escuchara. Tori lanzo a Brus y este cayó a mi lado empujándome haciendo que mi arco cayera a seis pasos de mi.
—Cuidado Mía —grito Axel. Un hombre moreno venía con velocidad y un palo fino en la mano.
—Arco—grité haciendo que el arco apareciera en mi mano izquierda. Lo tome con las dos manos sirviendo de escudo para amortiguar el golpe del palo. El moreno cayó hacía un lado cuando Yúe lo golpeó.
—Rápido, levántate —. Yúe extendió su mano para que la tomará. Me levanté y mire alrededor.
Todos estaban peleando por su cuenta, ninguno se estaba ayudando y mucho menos protegiendo. Esta no es la familia que conozco. Estaba segura de que aunque acabáramos con Tori el bosque no se salvaría y nosotros tampoco. El bosque iba a dejar de secarse cuando hiciéramos algo como una familia, algo que nos uniera obligándonos a estar juntos. Yúe tomó uno de los frascos y lo tiro frente a Tori haciendo que las sangres tuvieran una explosión bañándolo de sangre a el.
—Ahora Mía, el hechizo—gritó Yúe corriendo a mi lado.
—Ahora que aquí estamos, el bosque salvamos y a ti té matamos mezclando las sangres de dos grandes guerreras—mire a Amber y ella se encogió de hombros. Tori reía mientras miraba el frasco roto en sus pies y con un pequeño pañuelo limpiaba un poco de la sangre que lo había tocado.
—No funcionó —grité. Mientras el se acercaba limpiando sus hombros. Pensaba que la razón por la que no había funcionado era porque no estábamos unidos. —Todos, creo que todos debemos decir el hechizo—dije mirando a Amber. Formando un grupo alrededor de mi y de Yúe , Jay lanzó otro frasco haciendo la misma explosión anterior.
—Estas poderosas sangres acabarán con tu maldad, haciendo que desaparezcas y dejes de existir—dije haciendo que los demás repitieran lo mismo al menos unas cuatro veces. No sabía si iba a funcionar porque nunca había hecho un hechizo, pero de donde había caído la poción antes salía humo y Tori dejo de moverse. Su mano derecha en el pecho como si tuviera dolor hasta cubrirse de humo. Dereck comenzó a toser seguido de Nickolas. Cuando el humo se disperso no quedaba nada de Tori solo un collar con una cruz y a lo lejos sus gritos en un susurro.
—Acabo?—preguntó Yúe. Amber tomó el collar y lo acerco a nosotros.
—Si, acabo— dijo Miller mirando a Yúe.
—Creo que esto a de llevarlo Yeska ahora—mencionó Amber. El bosque se seguía secando pero más lento. Volvimos al instituto para buscar a Yeska.
—No creen que fue algo fácil? —preguntó Kenai.
—No, no lo fue. No pienses cosas negativas Kenai no necesitamos más de esos pensamientos—dijo Jay. Kenai lo miro y encogió los hombros. Esperamos a Yeska un par de minutos en la biblioteca.
—Crees que a tu hermano le guste Yúe?—preguntó Derek justo en el momento que llego Yeska.
—Están vivos—dijo Yeska sonriendo. Una sonrisa muy tonta.
—Si idiota que creías?—preguntó Nickolas.
—No estés seguro de que será por mucho tiempo—mencionó señalando a una de las ventanas. El bosque seguía secándose y era preocupante.
—Pero ya matamos a Tori como pediste—murmuró en enojo Axel.
—Si es cierto, pero les dije que esto no depende de mi sino de ustedes. Si ustedes no vuelven a ser la familia que eran, morirán y no serán más —dijo volviendo a sonreír.
—Somos una familia—dijo acercándose Amber.
—Ella no piensa así —dijo señalándome. Miller me miraba sin expresión en el rostro. Kenai tragaba saliva constantemente como si supiera que lo que venía no sería fácil.
—Que?—preguntó Amber.
—Su corazón esta dolido y ella herida—comentó Yeska.
—La familia no abandona en momentos difíciles, no huye y no hiere. Esta familia murió junto con Catalina, que no lo ven?—dije sentida. —Basta, no lo hagas. No funcionará —dije mirando y señalando a Jay que desde la mesa de al lado trataba de reprimir lo que yo sentía.
—No es así Mia—dijo Amber.
—Por que me evitabas, y dónde estaban ustedes esa noche que no pude dormir?. Dónde estuvieron el día que mi hermano quizo despojarse de sus poderes?—. Ryan miro a Nickolas mientras este se levantaba de la silla.
—Ya Mía Yaret—. Su voz fue suave. Pero yo tenía coraje.
—No estuvieron cuando los necesitamos —dije.
—Basta Mía Yaret Rubert Coronado—se escucho esta vez fuerte. Como un trueno que hizo retumbar un poco las ventanas. Miller tuvo esa intermitencia que solía tener cuando estaba molesto y comprendí que era suficiente.
—Para nosotros también fue difícil —dijo Axel.
—Suficiente, creo que lo mejor será comenzar de cero—dije poniéndome de pie. Yúe parecía incómoda pero aún así no se fue.
—Cuando los conoci no pensé que pudiera encajar en todo esto, yo sólo estudiaba para ser alguien y controlar mis poderes. Pero entendí que somos elegidos para hacer el bien, para salvar a los que nos necesitan—dijo Kenai haciendo énfasis a la palabra "nos". —Fuimos elegidos para estar unidos y hacer esto como una familia enseñándole a otros. Hay personas que nos necesitan pero nosotros también nos necesitamos los unos a los otros—Jay sonrío al igual que Amber. Las palabras de Kenai habían tocado una parte de mi corazón la cual llame pasado. No debe dolernos mirar al pasado, porque ahí encontramos recuerdos gratos que nos recalcan muchas cosas.
Han pasado 84 años. Siendo sincera se me había olvidado que era escribir, que rica era la sensación de imaginar y crear. Esa satisfacción que siento al publicar mi pedazo de pensamiento y que a ustedes les guste. Les cuento rapidísimo, hace como dos meses creo comencé a tomar un taller junto a mi hermana de descubrimiento, perdón y liderazgo. Son tres talleres Básico son tres días, Avanzado son cuatro días y liderazgo que son tres meses ( estoy en liderazgo) me disculpo por no haber publicado antes, los talleres me están quitando mucho tiempo pero están haciendo de mi una mujer poderosa, libre y líder. Más adelante les cuento y enseño fotos. Espero este Cap les halla gustado y recuerden las ama su complice Carylis ♥️♥️♥️♥️
