una vida no tan sencilla

Cap #9

Volví a negar con la cabeza y mi cuerpo se inclinó hacia adelante porque Pether había frenado el auto de golpe.

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En ese momento un leve temor recorrió mi cuerpo, nunca había visto a Pether de esa manera,  el era alguien muy alegre y pacífico, no me atrevía a mirarlo ya que solo mi cuerpo reaccionaba para llorar y temblar.

- Tu he-hermano...  Es un bastardo...

Pronuncié con la voz quebrada y solo sentí la bofetada de Pether, mis pupilas se dilataron y llevé lentamente mi mano temblorosa a mi mejilla mientras dejaba de llorar y entraba en pánico.

P:: ¡Emily no permitiré que insultes a mi hermano, el no te ha hecho nada y se ha portado bien contigo no?!

Solo negué con la cabeza varias veces y trate de abrir la puerta del auto pero tenía seguro.

- no lo hi-hizo...

Pronuncié sin dejar de llorar, en eso noté como Pether se calmaba y me abrazaba arrepentido, yo solo lo aleje aun estando en pánico ya que nunca pensé que haría eso.

- Tu... E-Eres igual a e-ellos

P:: perdóname pequeña...  No debí reaccionar así sin escucharte...  Te juro que no lo volveré hacer pero cálmate si?

Acarició mi cabello como de costumbre mientras miraba mi estado preocupado,  mi respiración era agitada, mi cuerpo no dejaba de temblar, de mis ojos seguían cayendo lagrimas de terror y justo al momento de sentir la mano de Pether en mi cabeza no logré sentir la tranquilidad que me daba antes,  sentí las manos de esos hombres que tanto me hicieron daño e inmediatamente reaccioné quitándole la mano rápidamente.

- ¡¡No m-me to-toques!!

Grité mientras Pether me miraba con sus ojos llenos de lágrimas, en ese momento no podía notar que lo había lastimando de hecho no podía entender lo que estaba pasando ya que estaba inmersa en mis recuerdos mientras Pether se mantenía en completo silencio.

- Ma-Marco..

Mi ritmo cardíaco se aceleraba cada vez más al estar alterada, mi cuerpo no paraba de temblar y mi respiración seguía sin normalizarse, sentí como mi visión se distorsionaba hasta que todo de volvió completamente oscuro.

Cuando comencé a reaccionar estaba acostada sobre mi cama, miré a todas las direcciones notando que tenía un catéter pasando medicamentos y suero mediante una intravenosa en mi mano, también sentí un paño con agua fría en mi frente, estaba algo desubicada a pesar de saber que estaba en mi habitación y no tenía recuerdos muy claros de la discusión con Pether.

Escuché la puerta abrirse así que miré y era el, Pether con un ramo de rosas amarillas en la manos y una mirada de completo arrepentimiento yo solo extendí mis manos hacia el pidiendo un abrazo, el sabiendo que de verdad lo necesitaba se acercó a mi y me abrazó con cariño.

P:: Perdóname pequeña... Mi hermano ya se fue de la casa

Dijo en un tono bajo mientras me abrazaba y sentí un gran alivio cuando dijo eso,  sabía que Pether no iba a preguntar sobre el tema hasta que yo estuviera lista y la verdad no estaba preparada para contarle todo lo que había ocurrido

- No tengo nada que perdonarte...  Te amo papá

P:: Y yo a tí hijita

Nós abrazamos por unos minutos en los cuales logre aclarar muchas cosas dándome cuenta de que mis palabras durante la discusión también lo habían lastimado, sin más me apegue a el y le besé en la mejilla.

- Perdóname tu a mi...  No sabía lo que decía en ese momento...

Noté la sonrisa de Pether y como asentía con la cabeza yo también le sonreí, nós separamos del abrazo, el acaricio mi cabeza y luego me recostó suavemente para por último acobijarme y plantar un beso en mi frente.

P:: Descansa mi niña, aun sigues débil

Después de decirme eso se retiró a descansar el también ya que al otro día tendría más trabajo.