— ¿Como haz estado Ángela? — me pregunta la señora Nohemí y me siento a su lado; empiezo ah hablar con ella, mientras que mis padres hablan con Thiago y Eros.
— Espero que te lleves con Thiago así como antes, el entrara en la misma universidad que la tuya. — sonríe mientras pega un chillido de alegría y en mi mente quede en shock (acaso dijo lo que acabas de escuchar ¡Dios! No, no por favor no ) le devuelvo la sonrisa y trago grueso.
— Bueno pasemos al comedor. — dice el señor Emiliano. Empieza a caminar hacia el comedor y mis padres y yo lo seguimos, en verdad la casa es inmensa, hermosa y también espaciosa.
— Tienen una casa hermosa. — le digo a ellos y me sonríen.
— La elegimos entre todos, aunque a quien más le gusto fue a Thiago. — sonríe y lo mira; mi mirada se posa en el por unos minutos, su sonrisa aparece mientras se arregla un poco el pelo ¡Dios Santo! Es demasiado hermoso (okey deberías calmarte un poco) respiro y separo la mira, me siento a lado de mis padres.
— Gracias por invitarnos; lo apreciamos mucho. — dice mi madre y sonríe. Nos empiezan a servir, no demoramos en comer en silencio, siento que me miran levanto mi mirada y me encuentro con la profunda mirada de Thiago; una mirada de curiosidad por parte de su hermano.
— Perdonen que me tenga que ir, pero tengo que hacer algo arriba. — dice Thiago y se levanta, sus padres lo miran con desaprobación pero aún así el desaparece de nuestra vista; seguimos con la cena normal hasta que tenía ganas de ir al baño.
— Ehm me pueden decir a donde es el baño. — pregunto y la señora me sonríe; me empieza a decir que tengo que subir, doblar a la derecha y ahí se encuentra el baño en mi mente me decía (qué difícil podría ser aparte no creo que te encuentres a Thiago) agradecí y empecé a subir, me sentía nerviosa no se por qué; tal vez locuras mías, subí las escaleras hasta que llegue a una puerta frente a mi (mierda Ángela donde te dijo que era) maldecí y para inspeccionar si tal vez era el baño o no, abrí la puerta y lo encontré a Thiago fumando mientras tenía un libro en sus manos. Su cuarto a oscuras solo se veía el color de su piel por la luz de la luna se lo veía tan pacifico y hermoso; me pregunto ¿desde cuando fuma?, veo que prende una lámpara y sus ojos me ven mierda di algo y vete ya.
— Yo lo siento, no sabía a donde era el baño. — le digo mientras iba a cerrar la puerta, pero escuchó su voz ronca.
— Tranquila, está bien. — escuchó y veo cómo se acerca a mi; mi corazón empieza a latir desenfrenado.
— Ehm...... o-okey. — dije un poco nerviosa, su mirada se posa en mi y quedamos frente a frente.
— ¿por qué? — me dice y frunzo el ceño mientras lo miro.
— Por que ¿que? — le digo y me cruzo de brazos, el sonrie y niega (Dios que hermoso AH YA CÁLMATE).
— Te fuiste, pensé qué tal vez seguiríamos siendo amigos pero nunca supe de ti; por supuesto hasta ahora que nos tendremos que ver más a menudo. — termina de decir y me mira con sus ojos negros, veo que su mirada se volvió un poco fría.
— Yo........ — iba a seguir hablando hasta que escuchó que me llaman.
— Ángela, baja ya nos vamos. — escuchó a mi mamá y veo como Thiago se gira dándome la espalda, me muerdo el labio (tal vez sea mejor no hablar de esto con el) me giro para bajar pero siento como me agarran del brazo y me giran.
— Al menos espero que después me respondas la pregunta. — escuchó su voz ronca y vi su mirada fría en mi.
— Espero poder respondértela después. — me suelto y salgo rápido del cuarto, siento como mi corazón late tan rápido; a pesar de todo el tiempo qué pasó me sigue poniendo nerviosa.
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Atados al destino
Roman pour AdolescentsPOV DE THIAGO Hay momentos en la vida donde encuentras personas que pensabas que nunca ibas a volver a ver. Siempre he sido amigable con la gente, y aún recuerdo la primera amiga y mi primer amor que tuve hace mucho tiempo atrás y a pesar de los añ...