Piercing

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Shorter bostezaba paseando por los suburbios mientras miraba vidrieras al pasar, dejando que el calor del sol acariciara su piel.

Pequeñas piedras y metales brillaban reflejando la luz matutina en el aparador de una tienda. Se quedó mirando para matar el tiempo, además de que resaltaba el hecho de que ése era el único local escuchando música. Ojeó las formas, colores y tamaños de aretes y piercings de todo tipo, hasta que algo mas allá la vitrina lo cautivó.

Adentro, una chica ordenaba el lugar; parecía estar sola dada la hora.

Irguiéndose, el moreno atravesó el umbral golpeando la puerta suavemente para hacerle saber que estaba ahí. Era un sitio agradable de estilo industrial, típico de matriculas de autos sobre paredes de ladrillos, tuberías negras sobresaliendo de por los techos y toscas luces amarillas; una imagen demasiado ruda para ella.-Señorita, ¿está abierto?

Enderezándose mientras dejaba algunas cosas detrás del mostrador, la chica asintió, acercándose a él-¡Claro! Pasa, pasa. ¿Que puedo hacer por ti?

El joven sintió como si su cerebro lo hubiese dejado sólo.-¡Qué idiota...!-pensó entrando en pánico; se metió al local sin ni siquiera pensarlo. -¡U-un piercing! Quisiera perforarme, en realidad.-tartamudeó, intentando salir del aprieto. No tenía muchas opciones tampoco, si sólo compraba un arete todo terminaría demasiado rápido para su gusto.

Asintiendo con una sonrisa amable, la chica lo llevó a otra habitación después de que él eligiera casi sin ver el dichoso piercing.

-Entonces, ¿dónde quieres que lo hagamos?

-¡¿Qué?!

-Al piercing, ¿en dónde lo quieres?

-... Ah-y por poco entendió otra cosa gracias a su mente picara-, justo aquí.-dejó que su mano se moviera sola hacia su ceja, aunque tampoco le pareció un mal lugar. Tomando asiento, Shorter observó alrededor mientras ella comenzaba por desinfectar su piel.-¿Dolerá?

-Nah, tranquilo. Ni lo sentirás.-dijo entre risas mientras le sacaba cuidadosamente sus gafas-... lindos ojos.-le guiñó, dejándolo boquiabierto, aunque el morocho logró recomponerse rápidamente con una sonrisa satisfecha- Normalmente, en otros lugares lo hacen a carne viva o entumeciendo la piel con hielo, pero yo te pondré un poco de anestesia local en aerosol para estar seguros, sólo tenemos que esperar un par de minutos hasta que haga efecto.

-Hmmm...-canturreó sumiéndose en sus pensamientos- No te gusta hacerle doler a la gente -dijo, girándose hacia ella- ¿Verdad?

-Así es.- admitió después de un momento en silencio, encogiéndose de hombros- Sé que es tonto, pero me hace sentir culpable.

-Lo sabía... qué tierna.

Después de un par de minutos hablando de nada en particular mientras la chica marcaba los puntos precisos en donde perforaría y preparaba a sus instrumentos, ella volvió a tocar su piel-¿Sientes esto?

-Ojalá pudiera.- ya tranquilo y en confianza no pensaba ser tan discreto. Por lo menos consiguió sacarle una pequeña risa con su intento de coqueteo, aunque ella prácticamente le hizo perder su cordura cuando se le acercó una vez mas, y no por la aguja que tenía en mano, sino por su tentador escote; definitivamente no esperaba una vista tan atrapante. Estando a la altura perfecta, sus ojos estaban clavados en el nacimiento de su busto que se movía al compás de su respiración. El moreno relamió sus labios inconscientemente, apretando su agarre en el apoya brazos, casi pudiendo sentir en la palma de sus manos la suavidad de su piel, pero su suerte terminó en cuanto la chica volvió a alejarse de él.

-Eso es todo, grandulón. ¿Dolió?

Algo desconcertado, Shorter llevó su mano hacia su frente, palpando el puntiagudo piercing ya en su lugar.


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Pagando en el mostrador, la chica le estaba dando algunos consejos que debía tener en cuenta, como la manera en que tenía de cuidar la perforación, cuánto tardaría en cicatrizar, o-... y cuando te pongas y saques camisetas o sudaderas, hazlo con cuidado para no tirar del piercing.

-De acuerdo- dijo, tentado a hacer un último coqueteo, más si podía disfrutar ponerla en aprietos- ¿Qué tal, me veo sexy?-pregunto moviendo sus cejas sugestivamente.

- Muy.- contestó sin dudarlo, flechándolo.

El moreno sólo rió, aceptando su derrota-Diablos...


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Poniéndose nuevamente sus gafas mientras salia contento de la tienda, vió a una conocida melena rubia cerca de la esquina-¡Ash!

Bajando su bebida para ver quien le hablaba, el lince notó de inmediato el nuevo cambio en su amigo.-¿Cómo estas, Shorter?

-Qué raro verte tan temprano, ¿pasó algo...?


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Y eso es todo! Quería engancharlo en la primera escena en que Ash y Shorter salen juntos ( 'w' ) Por cierto, sé que normalmente se perfora a carne viva. pero lo hice así más que nada por el coqueteo asdajdhhakdjka Gracias por leer, linduritas <3

Piercing [Shorter Wong ONE-SHOT] ESP ver.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora