un amor amargo

al fin!

-cuanto te debo de los cuatro cafés?- le pregunte
-aun no lo logro así que nada, yo te lo dije solo me pagarás el día que logre hacer tu café!- me contesto tiernamente.
-Pues espero que sea pronto o si no me llevaras a la ruina exclamó James regresando al almacén
El solo hizo una pequeña sonrisa y gritó -"pronto"-
Salí de la cafetería un poco decepcionado ya que no tomaría café por un tiempo.
Y así pasaron los días con un intento fallido para ser exactos 23 días. Al 24 día entre a la cafetería con ganas de que James me preparara mi café pero no fue así ya que el chico de los grandes colmillos me atendió, le repetí el como iba mi café mientras lo hacía.
El me entrego mi café con una enorme sonrisa a decir verdad era muy rara esa sonrisa ya que en el tiempo que llevaba en la cafetería no lo había visto hacer una igual. Pero no le di importancia y tome el café ya no tenía muchas esperanzas así que le di un sorbo normal.
Mis ojos se abrieron de la sorpresa el sabor era perfecto la consistencia el aroma todo mi café perfecto estaba en mis manos.
-Supongo que ahora si me quedo- exclamó el chico de los grandes colmillos
-Asi es es perfecto y delicioso, ahora lo pagare- saque mi billetera.
El extendio su brazo derecho a través de la barra. -Mi pago por haberte servido tu café perfecto es que me digas tu nombre- tomo mi mano que sujetaba la billetera y la bajó
Yo lo mire y le respondí- eso no debe ser ya te debo demasiado-
-Solo dime tu nombre porfavor- se enderezó y me miró de una manera un poco desesperada y una sonrisa peculiar la cual dejaba a la vista sus enormes colmillos
-Bien mi nombre es Kunpimook Bhuwakul pero mejor dime BamBam ya que mi verdadero nombre es muy difícil- le respondí tranquilamente aunque mis mejillas se pusieron  un poco rojas.
-Mucho gusto Bambam mi nombre es Mark y desde ahora yo seré quien te prepare tu café especial.