† Secrets|| TG †

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𝑃𝑒𝑙𝑖𝑟𝑟𝑜𝑗𝑎𝑠

8 de diciembre del 2023

Durante su adolescencia mi padre salio con muchas chicas, incluidas las madres de algunos de mis amigos. Pansy Potter, Astoria Diggory y Tracey Weasley fueron algunas de las novias que mi padre tuvo durante su época de Hogwarts. 

Todas ellas tenían una característica en común, eran castañas.

Cuando era pequeño, mi padre me relataba sus historias del colegio, y a escondidas lo hacía también el abuelo. De ahí supe que la debilidad de Lucius Malfoy eran las rubias.

Así que me obsesione por saber cual era la mía, ¿Pelinegras? ¿Azabaches? No lo sabía, realmente veía a las chicas y no me provocaban nada. Comenzaba a preocuparme y pensaba que me podrían gustar los chicos, pero tampoco ellos me llamaban la atención. Nadie tenía esa chispa que yo buscaba.

No fue hasta que estuve en la estación King's Cross, apuntó de empezar mi primer año en Hogwarts, que la vi. A mis ojos era la niña más linda del mundo y sus increíbles ojos verdes cual esmeraldas me hipnotisaron.

Ella daba pequeños saltos en su lugar mientras veía maravillada el tren que nos llevaría a Hogwarts, me emocione ante la idea de que ella fuera mi compañera, no importaba si iba a la misma casa que yo o no, solo la quería conocer y ver todos los días la hermosa sonrisa que ella portaba.

Me decepcione demasiado al ver que no subía al tren, pero los dos chicos que estaban con ella si. Entre a un compartimento vacío (el primero que encontré) y acomode mi baúl. Estaba dispuesto a leer un libro que mi abuela me había regalado ese verano pero el ruido de la puerta abriéndose me sobresalto.

—Lo siento, no quería asustarte— negué con la cabeza, era el chico que estaba con la linda pelirroja. La primera que me había hecho sentir algo.

—No hay problema, ¿quieres pasar o te quedaras en la puerta todo el viaje? —pregunte riendo.

El sacudió la cabeza y se rio también. Aquel día no sólo vi a la chica que pondría mi mundo de cabeza, sino que también conocí al chico que sería mi confidente, mi mejor amigo, Albus Potter.

Recuerdo que pasamos todo el viaje bromeando y comiendo dulces, esperaba que sacara el tema de su familia para ver si aquella chica que estaba con el era su hermana o me había confundido y ella en realidad sólo estaba cerca, pero no lo hizo.

Al llegar a Hogwarts todo fue tan mágico como lo había contado mamá, fue la mejor experiencia que había tenido en mi vida, pero la selección fue otra cosa, estaba tan nervioso por lo que dirían de mi, todos conocían a mis padres, todos sabían su historia.

Cuando pronunciaron mi nombre camine hacia el sombrero y al sentarme encontré a mi hermano en la mesa de Gryffindor, si, contra todo pronóstico mi hermano mayor, Abraxas Malfoy había sido un león, pero no por eso mi familia lo quería menos, solo sabía que no tenía muchos amigos en esa casa.

Slytherin, había quedado en la casa esmeralda, y para mí felicidad, mi nuevo amigo también había quedado en esa casa. Durante todo el curso Albus no hizo otra cosa más que contarme de su hermana, la niña más dulce del planeta, y de mostrarme las fotos que tenía con ella. Así supe su nombre, Lily Potter era mi pelirroja.

No la conocí formalmente las vacaciones de invierno, donde al bajar del tren Albus me presento a toda su familia. A James, quien junto a sus amigos no paraba de hacer bromas lo había conocido en Hogwarts, y a sus padres, Harry y Pansy Potter los conocía por Historia de las Magia y por que eran antiguos amigos de mis padres.

Ese Hola que ella me dio hizo que mi corazón latiera más rápido de lo normal, su voz era tan suave y ella era tan delicada que parecía un ángel, un ángel de fuego.

El año terminó aburrido, y no vi a Lily en la estación, solo la otra hermana de Albus, Pandora, que no era muy amigable que digamos.

Espere con ansias el regreso al colegio, pues Albus me había dicho que ese años Lily entraba al colegio, al igual que mi hermana Narcissa, esperaba que ellas dos se llevarán bien y fueran amigas, así algún día la pelirroja podría venir a mi casa con esa excusa.

Pero cuando estaba en el tren ocurrió algo que no esperaba, aparte de Lily había otra pelirroja que llamó mi atención, parecía tan perdida y decidí ayudarla, me dijo que junto a su hermano seria la primera vez en Hogwarts. Me sorprendió que dijera que entraria a segundo. Su nombre era Rose, Rose Weasley.

En la selección sufrí mucha ver que Lily iba a Gryffindor al igual que Rose.

Pero nada se comparaba con el dolor que sentí en ese curso. En el tren Lily había sido la mejor chica que en mi corta vida conocí, era divertida, tierna y muy inteligente. Creí que seríamos buenos amigos, ella había prometido hablarme sin importar la casa a la que fuera seleccionada.

Pero ella rompió su promesa.

Albus y yo tratamos de hablar con ella un sinfín de veces, pero nos evitaba a toda costa. Al final, mi amigo se rindió, y yo con el. Pase meses consolando al azabache pues su tristeza fue tanto que no quería comer, a pesar de que se lo dije a Lily ella siguió ignorandonos.

Comencé a odiarme por ser quien era, eso había alejado a mí pelirroja, pero llegó alguien para sacarme del posó en el que estaba.

Rose fue una gran amiga, tanto para mí como para Albus y no pude evitar empezar a sentir cosas por ella.

Ahora ella y yo llevamos 1 año saliendo, pero no puedo evitar pensar en ella, en el dolor de estómago que tengo cada vez que la veo de la mano con Lorcan Scamander. No puedo evitar envidiarlo, él tiene lo que una vez quise.

Albus me dijo que ella era feliz con él, y sólo eso me importa. Trataré de hacer feliz a mi novia y trataré de ser feliz yo.

Scorpius Malfoy.