Heavy Is The Head

38. El Lord de Los Ojos.

La inminente amenaza de guerra, el rey legítimo de los Ángeles en la puerta de su casa con una armada y la legítima reina en el exilio en Starfire Fort, ¿y qué hacía su adorable rey recién coronado?

Nada. No había habido una sola reunión del Alto Consejo desde que el rey había entrado en una rutina inducida por el estrés.

Masaomi Akashi apretó los dientes y miró las llamas crepitando en la chimenea gigante de la sala principal.

La revelación de Hanamiya e Imayoshi de que Nash II Gold era el hermano bastardo de Alexandra Garcia y su heredero no había empeorado particularmente la situación de Teiko , sino la de su aliado cercano de los Ángeles.

Alexandra Garcia fue creída muerta. Y a pesar de que aquí en Teiko sabían que estaba muy bien viva, no tenían forma de demostrarlo. Ella había perdido su anillo de sello y no se parecía en nada a la extravagante y brillante reina que había sido; ahora estaba amargada y su apariencia se había embotado. Se fueron los brillantes, llamativos y mostrando ropa. Nash II Gold era el rey de los Ángeles porque era el último pariente vivo de García y se creía que García había muerto. Podía negar a la reina de la viva argumentado que es sólo un parecido y probablemente nadie dudaría de él. 
La Angelessan siempre había preferido la solución más fácil y más rápida. Esta guerra no solo sería una guerra sobre Teiko, sino también sobre el trono de Angeles.

"No deberías pararte tan cerca del fuego. Estoy tentado de empujarte hacia él", sonó una voz grave y ronca desde la entrada del vestíbulo.

Masaomi se dio la vuelta y sonrió fríamente. "¿Qué te hace pensar que tendrías éxito, Aomine? Nunca en mi vida he probado la derrota".

Katashi Aomine resopló y se acercó a pie, de pie al otro extremo de la chimenea, con los brazos cruzados frente a su amplio pecho. "Deja de mentir. Haiboku Hill."

La mandíbula de Masaomi se apretó ligeramente ante la mención de dicha batalla. "Eso fue obra de Seijuurou, no la mía. Dejó que sus emociones lo superaran y fracasó. Nunca hubiera sido tan estúpido".

"¿Porque eres el absoluto? "

"Ahórrate la burla, Aomine. No obtendrás la reacción deseada de mí".

Katashi se burló y miró al otro Alfa con los ojos entornados. "¿Eso es? No pensé que te olvidarías de la vez que te follé en el baño y empezaste a ..."

"Lo que sea que sucedió en mis días de crianza en Blue Peak fue un acto irresponsable de tontería juvenil", Masaomi lo interrumpió, su voz aún era nítida y neutral. Sin embargo, sus ojos hablaban un lenguaje diferente al de su cara estoica: el dorado frío de ellos brillaba con una advertencia y una amenaza tácita. "No deseo desenterrar de esos recuerdos desagradables".

"Hah, en ese entonces no parecías cree que era desagr—"

La frase de Katashi terminó en un gruñido cuando fue golpeado contra la pared, un cuchillo en esta garganta y fríos ojos dorados que le hicieron un agujero en el cráneo.

"Aomine", dijo Masaomi en voz baja y presionó el frío acero contra la piel. "Termina esa frase y te derramaré la garganta en este piso".

La manzana de Adán de Katashi se agitó, pero su expresión permaneció oscura y aburrida. "lo dudo."

"¿Eso es un desafío?"