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Como todos los días desde el incidente, el pequeño Jeon llegaba a su instituto y era mal visto por todos los estudiantes, incluyendo profesores. Algunos lo veían con temor y otros con desaprobación, la verdad es que desde el día en que Taehyung fue puesto en un ataúd no volvió a tener amigos y mucho menos conocidos, todo aquello que se suponía era cercano a el ya no estaba. Era muy injusto. Puesto que no fue su culpa del todo, y aún así todos lo veían mal solo a el. Decidió no tomarle importancia, después de todo, antes de conocer a Taehyung, el no tenía amigos, no tenerlos ahora no debería romperlo en lo absoluto...

-Muy bien jóvenes, van a formar parejas para hacer un proyecto, será el proyecto final de este semestre, elijan bien con quien trabajaran.-Dijo el nuevo profesor de idiomas mientras se acomodaba los lentes en la nariz.

Todos comenzaron a buscar sus parejas, era un salón de 40 alumnos, se suponía que todos debían tener pareja, pero nuevamente Jungkook se quedaba solo, el alumno que sobraba hacía siempre solo su trabajo, y no era precisamente por que no quisiera trabajar con el, pero prefería hacer las cosas solo.

-¿Otra vez trabajarás solo, Jungkook?.-El menor asintió.-Bien, ¿quieres que te parta el trabajo a la mitad, o puedes hacerlo todo tu solo?

-Puedo hacerlo solo, profesor Kim.-Sonrió.

-Ya hablamos de esto pequeño, puedes llamarme por mi nombre.

-No, no quiero que los demás me vean peor de lo que ya me ven.-Ante este comentario, el profesor sonrió apenado y bajó un poco la mirada.

-Yo no te veo como los demás, dime profesor Nam. No está a discusión. Ahora toma.-Dice mientras le da un libro.-Has un resumen de cada tema que veas en este libro, ese será tu trabajo, tienes 2 semanas.-Dijo sonriendo mientras volteaba a ver a sus alumnos con seriedad.-Para los demás, deben hacerme un escrito de por lo menos 50 páginas en inglés, chino y japonés. Háganlo como gusten, pero deben ser 50 hojas de los 3 idiomas, pueden escribir lo que quieran, poemas, canciones, un libro, no me interesa.-El timbre suena.-Pueden salir.

Todos tomaron sus cosas y salieron del aula. Pasaron 2 clases de 1 hora y por fin vino el esperado receso. Como siempre, Jungkook iba al patio trasero, siempre estaba desierto así que podía tener cierta paz y tranquilidad. A menos que los chicos tuvieran planeado algo para ese día...

-¿Te sientes cómodo?.-Dijo uno de los bravucones.

A pesar de que Jeon sabía muy bien lo que le avecinaba no se movió, sabía que lo dejarían hecho trisas en el suelo, pero no le importaba, lo merecía, desde el día que le dieron la noticia de que Taehyung estaba oficialmente muerto supo que merecía todo lo que le estaba pasando, quería sufrir, pero nada le dolía tanto como el saber que por su culpa el había muerto. Su único amigo...

-No puedo comprender como hay forma de que puedas dormir por las noches.-Dijo uno de los chicos del séquito del bravucón mayor.

-No lo hago, quizá por eso tengo estas malditas bolsas negras llamadas ojeras en mis ojos, imbécil.-Dijo sarcásticamente logrando sacar de quicio a los tres chicos.

Comenzaron tomándolo de la camisa y tirándolo al suelo. Fueron tres rondas de golpes en el rostro y 4 de patadas en el cuerpo. Como si todavía faltara "la cereza en el pastel", tomaron cartones de huevos podridos que traían en alguna bolsa dentro de su mochila, seguramente sus cosas olían a podrido, pero les importaba muy poco con tal de ver sufrir a aquel chico de cabellos castaños. Tomaron los huevos y los estrellaron contra el cuerpo del menor, el cual, se encontraba hecho un ovillo en el suelo recibiendo aquellas apestosas bombas.

Apenas los bravucones terminaron con los huevos el menor se volteó a verlos con lágrimas en los ojos esbozando una sonrisa quebrada.-¿Eso es todo lo que tienen?

Nuevamente iban a ir contra el, pero el profesor de artes los detuvo.-¿Que creen que están haciendo?, váyanse ahora mismo si no quieren que los encierre en la sala de detención.

El trío de chicos se fue y Jungkook fue ayudado por el profesor para poder sentarse nuevamente en la banca.

-¿Estás bien, Jungkook?.

-Si. No tenía por que ayudarme. Al fin y a cabo todo esto me lo gané...

-Pero, ya pasaron 2 meses desde el funeral de Taehyung. No es justo que te sigan haciendo esto...-Dijo mientras dirigía una mirada llena de lástima hacia el menor, y este recogía sus cosas.

-Profesor Kim, no es necesario que se preocupe tanto por mi, hay una razón por la que no me defiendo, no tiene caso que gaste su tiempo conmigo. Ahora, si me disculpa, iré al baño para poder limpiarme.

No agregó nada, Jungkook realmente no quería nada más que ir a casa, según todos, el no merecía vivir normalmente, y gracias a ese tipo de comentarios el tampoco quería seguir viviendo. Creía que tenían razón, pero, ¿la tenían?

Llegó al baño y cerró la puerta con seguro, lanzó su mochila a su suerte y se posicionó frente al espejo, apenas tomó un poco de jabón y se lavó la cara y manos volteó al espejo y vio a quien más extrañaba, eso le hizo dar un pequeño salto, se volteó para ver si era realidad lo que estaba viendo, y efectivamente, ahí estaba el parado viéndolo con seriedad.

-T-Taehyung, ¿eres tú?.-Se acerca para tocarlo y su mano traspasa su rostro.-¿Eres un producto de mi imaginación?

-No, idiota. Por si no lo recuerdas, yo estoy muerto.-Dijo aquel chico de cabellos rubios.

-Cierto, pero, ¿cómo es que puedo verte?

-Solo te puedo decir que tenemos una cuenta pendiente y no pude irme en paz.

Jungkook no podía creer lo que veía. Taehyung estaba de regreso, al menos de forma espiritual. Pero aunque quisiera poder abrazarlo y pedirle perdón de rodillas no podía, era todo culpa suya, eso comenzaba a doler en su pecho. Lágrimas comenzaron a salir involuntariamente de sus ojos y resbalaron rápidamente por sus mejillas, sus piernas comenzaron a temblar y poco a poco fue hincándose en el suelo sin dejar de ver el rostro de aquella persona a la que le debía tantas cosas...este iba a ser un comienzo duro...













Ojalá te duela...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora