Jeongguk no sabe a qué juego está jugando Taehyung, pero su frustración está creciendo, porque él no puede responder a las imágenes que Taehyung envía.
Vienen en el peor momento. No es que Jeongguk realmente se esté quejando, pero hay algo incómodo en el hecho de tener su polla sacudiéndose bajo sus bóxeres mientras se encuentra en medio de una reunión de negocios, o mientras está tumbado en el sofá de Yoongi.
A pesar de las fotos y los deseos de que Jeongguk juegue con él, Taehyung no se le acerca cuando visita el club. Demonios, él parece desaparecer en el momento en que Jeongguk intenta buscarlo. Él no pide las fotos, pero éstas siempre vienen después de un pago.
A veces, sin razón alguna. Esas son las peores.
"¿Estás escuchando, Jeongguk?"
Jeongguk definitivamente no está escuchando. Él está mirando fijamente hacia abajo al teléfono en su regazo, donde una imagen de Taehyung desplegado, está expuesta. Parte de él, está celoso de quienquiera que tomó la foto, pero el resto de él está demasiado concentrado en la forma en que el culo de Taehyung se curva, y en el grosor de sus muslos.
Él se frota la boca, observando la pendiente de la espalda de Taehyung y los moretones que le marcan el hombro. Los celos se intensifican, y Jeongguk apaga rápidamente su teléfono.
"Jeongguk".
Con un profundo suspiro, Jeongguk finalmente mira al hombre sentado frente a él. Él ha estado trabajando en Jeon Tabaco desde mucho antes de que Jeongguk estuviera a cargo, pero como agente de servicio al cliente. No pasó mucho tiempo después dentro del reinado de Jeongguk, para que él llevara a Jin a las oficinas principales, impresionado por su trabajo, y en una desesperada necesidad de alguien que entendiera la compañía tanto como Jin lo hace.
"Lo siento, ¿qué?"
Jin resopla con fuerza antes de deslizar unas cuantas carpetas sobre su escritorio. Él hace mucho más que su último asistente, y solo se necesitó de un aumento en la paga. No es que a Jeongguk le importe, él piensa que Jin merece un salario considerable por lidiar con él.
"Aplicaciones para niñera. Necesitas mirarlas alguna vez."
Jeongguk suspira, mirando las carpetas con fuerza, pero eso no borra las imágenes de Taehyung de su mente. Hay algo en el tono de Jin que le dice a Jeongguk que él está consciente de que él lo ha estado haciendo a un lado a propósito, pero él lo ignora.
"Odio a todas".
Jin hace un ruido de queja, antes de abrir la carpeta y empujar los papeles más cerca de Jeongguk. "Esta mujer aquí, con mucha experiencia. La entrevisté yo mismo porque sabía que nunca lo harías. Ella es una buena anciana".
Jeongguk mira fijamente la foto de la mujer, donde ésta está sujetada con un clip en la parte superior. Ella se ve bastante amable, pero eso no significa nada. Todas las niñeras hasta ahora han sido un desastre, excepto la última, y ella renunció.
"¿No puedes ser la niñera de Ji-hu? Te duplicaré el salario".
"Tendrías que triplicarlo", dice Jin seriamente mientras se hunde de nuevo en la silla. Él es el único en la oficina principal que no usa traje, pero se ve igual de profesional en sus cuellos de tortuga -a pesar del clima- y en los lentes redondos que abrazan el puente de su nariz. "Y ya tengo mis propios niños, no necesito otro más".
Jeongguk suspira. A las únicas personas a las que realmente les confía a Ji-hu, son Yoongi y Hoseok. Pero él confía en Jin con todas sus finanzas, y básicamente en todo lo que tiene que ver con las cosas importantes de su vida, por lo que también se siente cómodo al confiar en él con Ji-hu. Además, Ji-hu ama al hermano de Jin como si fuera suyo.