Ecos de amor

Capitulo 3

Me levanto con la alarma canina que es Beto y después le siguen los demás, les doy su desayuno y los saco a pasear, al regresar  levanto a mi pequeña y la baño conmigo y la llevo a trabajar y me llevo esta vez a mis babes ya que Lian Ming no los podía cuidar, ni a ella ni a los perros  ya que estaba de vacaciones. Llego al trabajo  me saludan y a la niña también y me dice Sofía

Tienes visita – y eso me sorprendió ya que la única que me visitaba estaba lejos en un viaje por Korea –

¿Es Lilian? – le pregunto –
No es una señora mayor – me responde y me sorprende y salgo para ver quién era –

No lo podía creer era mi madre, ¿Qué hacia aquí?

¿Qué haces aquí? – le digo molesta –

Sol quería saber si lo que dijo

Kate es cierto – me dice y me mira de arriba hacia abajo y ve a mi hija  – y veo que es verdad  -

Mire le pido con todo el respeto que una persona mayor se merece – le digo con rabia  y agarro a mi hija con fuerza –

váyase de mi centro de trabajo y de mi vida –

No quiero ver lo que es mi hija ahora – me dice y se acerca a mi –

Mire señora – le digo alterada y mi hija la mira  – no tiene nada que hacer aquí y además no soy su hija –

Hija por favor – me dice en modo de suplica – déjame hablar contigo y conocer a mi nieta -

¡Ya basta márchese! – le grito y aparece mi mejor amigo Xiang Ming quien tenia a mi hija  - ¡¿Qué se vaya?! –

Márchese señora que esta interrumpiendo el trabajo de los demás – dice mi amigo y la saca de ahí –  y la altera a demás hay una menor presente –

Llore y llore, y abrace a mi hija ya que no sabía por qué ni como me había encontrado pero tenía que alejarse de mí  y de mi hija ya que no la consideraba mi madre y menos abuela de Lía. Después de la escena del trabajo tuve que irme ya que no tenia cabeza para nada después de la visita de mi pasado; llego a casa y mi hija me mira pero no me dice nada y se va con  mis bebes, a su cuarto y yo me tiro en el sofá, llamo a Kate 

Hola – me dice –

¿Por qué les dijiste? – le pregunto –

Lona – me dice – le siento mucho amiga , ello pedían encontrarte y además habían visto una foto tuya y de la niña que tenía en la sala –

Si ya veo – le digo, pero no me podía molestar con ella  – mi madre se presento en mi trabajo y me pidió conocer a Lía y por si fuera poco me encuentro en el viaje a roma al vejestorio  –

Si ya lo sé – me dice – tu madre me lo dijo pero aun quiere que te cases con alguien de esa familia -

Y eso no va a pasar y lo sabes – le digo molesta – tengo una hija es que no entienden ¿o qué?

Ya lo sé – me dice – pero ahora no es con el sino con su sobrino que tiene tu misma edad bueno solo te lleva dos años amiga y  esto un bombón –

Eso no me preocupa amiga yo estoy bien como estoy y no me casare con nadie si no es por mi propia voluntad – le digo – amiga nos vemos que mi bebe me llama –

Y la dejo escuchar los grito de Lía y ella ríe: 

Está bien te dejo – dice mi amiga – y cuida a la pulga -

Adiós loca – le digo y cuelga –
Siento que tocan la puerta y cuando abro veo a mis padres, en serio otra vez ya esto me está cansando.

¿Qué quieren? – les digo en la puerta –