the secret dimension (Terminada)

Capitulo 3

Bueno así está la cosa, a veces los escritores o aspirantes a ello buscamos inspiración en casi todo lo que podamos ver o escuchar. Red Hot Chili Peppers resonaba en el parlante de mi reproductor de música, golpeaba con fuerza las cuatro paredes y yo trataba de buscar inspiración allí. Entendía, por supuesto, que un paisaje, un lugar especifico y demás también inspiraban, pero para mí la música funcionaba bastante bien. Escribí sobre aquella muchacha enamorada de un chico un poco más joven que ella, usualmente siempre son los chicos los mayores y me gusta escribir sobre algo diferente, ¿saben? Así que me anime a escribir sobre el punto de vista de una chica en problemas; yo estaba en problemas si no acababa esto ya.

Mi lápiz rasguñaba con fiereza el papel de mi cuaderno, tenía muchos de estos, mamá me comprobaba cada tanto una caja completa, ¡ella sí que tenía esperanzas en mí! Sin embargo nunca me presiono para que le enseñara lo mío, solo preguntaba y nada más. 

Aerosmith una de mis bandas favoritas en el mundo ocupo lugar en mis pensamientos ahora, bien, amo esa canción, podría utilizarla para un momento emotivo entre el chico y la chica de amor clandestino y deprimente. Agh, hice rayones en la hoja y la arroje a la papelera. El sonido de una bocina me sobresalto y créanme, realmente di un respingo. Me puse de pie apoyándome en el escritorio en mitad de mi habitación y mire por mi ventana, el novio de Jessica se encontraba apoyando en la puerta de su coche y sonrió hacia las escaleras de entrada. El solía venir cada fin de semana a cenar con la familia pero a veces, mi hermana cambiaba los planes y se iban de pinta juntos, el es apuesto y americano, eso le gusta mucho a Jess, yo lo sé. 

Mi hermana salió minutos después, se veía preciosa como de costumbre, beso en los labios a su novio y él le abrió la puerta para que subiera. Algo que Jess siempre presumía, su novio es todo un caballero, bah, que envidia, nunca tuve un novio porque me tachaban de traga libros y no salgo a fiestas muy seguido; solo tengo una mejor amiga. ¿Cómo ocurre eso? Bien, es algo deprimente de contar. Asistía al colegio secundario y estaba enamorada por primera vez, tenía muchas amigas, ni siquiera puedo contarlas todas, cuando les confesé quien me gustaba a varias de ellas repentinamente les empezó a gustar, me enoje tanto que me pelee con ellas. Lo sé, es estúpido pelear por un chico, ¿pero qué clase de amiga hacia eso? Otras dejaron de hablarme porque pese a ser la hija de Jo Rowling, era aburrida.

Puff, ¿Quién las necesitaba? Al fin y al cabo, luego de peleas y desilusiones, Danielle Blackburn era siempre quien quedaba al final; eso si era amistad pura y verdadera, la persona más leal y buena en el mundo estaba a mi lado, lo demás sobraba. 

Dani es bajita pero solo unos centímetros más baja que yo, tiene un cuerpo muy bonito, ojos enormes color castaño, cejas gruesas que sinceramente envidio y cabello pelirrojo oscuro, ella es preciosa y la adoro. Es la única que ha leído alguna de mis historias y es tan sincera que se lo agradezco de corazón, si no le gusta me lo dice y si le gusta también, la mejor amiga que alguien pueda desear, esa es ella.

El punto es que volviendo a la parte de los novios, no tengo, Dani va a fiestas y trata de llevarme pero me niego, mamá también quiere que salga y no entiendo que tiene de genial, ¿conocería a alguien tan estúpido como mi padre? No quería, tenía miedo de enamorarme de alguien que luego no vería jamás, si conocía a chicos en discotecas, lo más probable era eso y soy algo –bastante- enamoradiza. 

Me preguntaba que se sentiría besar a alguien de verdad, ya saben, no el beso en donde presionas tus labios con los de alguien más y eso es todo, sino un verdadero beso de telenovela, algo donde puedes sentir sus labios con los tuyos, donde tu interior cosquillea y tu corazón se acelera demasiado y tu respiración es entrecortada, pienso que esos besos que son largos son los que con mas deseo se dan, quiero un beso así, es por eso que escribo besos perfectos y románticos en mis historias.