the secret dimension (Terminada)

Capitulo 28

Fue un impulso, solo un simple y muy apresurado impulso. Chloe y Harry, en sus respectivas camas y hogares, se pusieron de pie, buscaron zapatos que ponerse y se calzaron el abrigo sobre los pijamas, tanteando en la fría oscuridad.

Ambos bajaron las escaleras, con prisa pero procurando no despertar a alguien y luego, simplemente salieron a la noche nevada, en aquella calle solitaria; claro, era de madrugada.

Fue ahí en donde se encontraron, en medio de la calle. Chloe corrió al verle y se camuflo en sus brazos, hundiéndose en su pecho, mientras su respiración aún era dificultosa. ¿Habría de alguna forma, soñado lo mismo que ella? El corazón le golpeaba con fuerza, sin poderlo controlar, sentía que su cuerpo temblaba, más que solo por el frío. Era miedo.

—Chloe… –comenzó su novio pero ella le detuvo.

—Harry, la misión. 

—Lo sé, acabo de soñar lo mismo –murmuro, con voz entrecortada.

—¿Pero cómo?

—Fue obra de la mujer en el sueño, ella es poderosa pero muy pocas veces ha podido lograr que más de una persona, esté presente en sus premoniciones mediante sueños.

—¿Y siempre que lo hace es para dar malas noticias? –trato de soltar una risa, pero el sonido no salía, el nudo en la garganta era demasiado grande–. ¿Qué vamos a hacer?

—No podemos perder más tiempo, mañana deberemos contarles a los demás y lo más rápido que podamos, marcharnos.

—¿Pero a dónde?

—Nos dejara pistas, podre verlas al volverme a dormir, así que no te preocupes.

Pero era difícil no estarlo, de hecho, era más sencillo perder la calma y echarse a llorar como un crío pequeño, que sentirse a salvo. Trago lentamente y miro a su chico, el niño que vivió o al menos, lo hizo en los libros de su madre, ¿podía Harry tener esa suerte de vencer siempre, como el de los libros? Él se percató de su mirada e intento sonreírle un poco.

—Todo saldrá bien, Chloe, no te preocupes –la apretó más entre sus brazos–. Iré contigo y no dejare que nada malo suceda. Lo prometo.

Y aunque eso la hizo sentir un tanto más segura, se preguntó silenciosamente hasta cuándo podría mantener aquellas palabras, ¿hasta cuándo duran las promesas? Cerró sus ojos, mientras apoyaba la mejilla en su pecho y trato de calmarse, mañana sería un caos tremendo y necesitaba ahorrar energías y emociones. 

Sabía que tarde o temprano se iría, solo que jamás pensó en cómo se sentiría al respecto y duele, duele mucho saber que deberá decir adiós. ¿Podrá decir adiós a este mundo? 

Lo siguiente que supo, fue que Harry la acompaño a su casa pero le pidió que se quedase hasta que se durmiera, por lo que luego de que su respiración se apaciguara, Potter se fue a casa. Debía soñar si quería saber por dónde comenzaba la misión.

Chloe despertó horas más tarde más ojerosa y cansada que nunca, casi no concilio bien el sueño y se sentía nerviosa, inquieta, mientras veía al resto de su familia desayunar, ¿Cuándo vendría Harry? Quedaron en que el traería a los suyos, para que juntos dieran la noticia y luego, fueran a la madriguera por Danielle y despedirse de los Weasley.

Despedidas. ¿Era eso realmente lo que haría? Se sentía tan triste de solo imaginarlo, saber que se iría para no volver, que no vería aquellos rostros nunca más y que volvería a su vida normal. Eso sí cumplían la misión, claro.

Termino de hacer su bolso, llevando cada cosa que trajo consigo del futuro y lo que consiguió en este pasado y luego, se detuvo al pie de las escaleras cuando el timbre de la casa sonó.