El viejo viejo amor:
Es increíble como a pesar del tiempo, puedes con solo dar un vistazo extrañar algo o a alguien tanto.
A pesar de que no hay nada físico aún vive en mi un gran recuerdo y un querer intenso.
El pasa por mi lado, el sonríe, el saluda a todo el mundo, él es social.
El a mí no me mira...
Es increíble como puedes pasar de decirle Te Quiero a alguien, de verlo todos los días y alegrarte y ahora... Solo ruegas porque sea menos doloroso el verlo y sentirlo cerca.
¿Cómo evitar cruzar miradas? es como si me llamara.
Pero esos ojos miel que hipnotizan podrían engañarme.
Tan difícil fingir, pasar tiempo con nuestros amigos pero sin toparnos.
Escuchar como mi mejor amigo y luego el amor de mi vida habla tan fascinado de la que podría llegar hacer el próximo amor de su vida.
Antes, cuando todo se iban y nos tocaba a el y a mi solos tomar un largo camino era perfecto. Podíamos jugar, charlar, ser felices. De alguna manera ya eso no puede ser posible.
Todos nos vamos, lejos. El camino es largo pero siempre es aún más largo y tedioso cuando nos acompaña un terrible silencio y señoras gordas de por medio.
Volteo siempre a los lados por inspiración divina cuando se acerca el momento de ir a casa.
El solo busca correr de allí, como si todo lo que quería en ese lugar desapareció y solo importa terminar rápido.
Yo por mi parte a pesar de todo tengo aun cosas que me importan.
Él es una...
Aunque ya no pueda.
Las tardes lluviosas como hoy, con fuertes truenos, y nubes negras siempre eran divertidas, con él. Contar hasta diez nunca había sido tan genial.
Pero ahora solo no puedo...
Hoy no hubo señoras gordas de por medio, pero eso no impidió que quisiera alejarse, de echo lo hizo. Se fue al otro extremo.
Todo es tan complicado pero a la vez tan fácil.
Él puede tenerlo todo sin importarle ni dolerle lo que yo haga, yo aún temo por su bienestar y felicidad.
Aun le quiero.
Pero esta tarde estoy sola, en una tarde lluviosa de Octubre.
-B
