LAZOS (HoMin)

Sentimientos confusos

Podría ser malo de mi parte, pero me alegraba ver a Boa caminar por los pasillos con la mirada baja, hace ya una semana que mi hermano la había dejado, y nuestra relación había  comenzado, cada día para mí era el mejor.

Era clase de educación física así que nos tocaba cambiarnos por el uniforme asignado, al ponerme la polera pude notar como mi amigo me miraba con curiosidad.

— ¿Qué pasa?

Pregunte esperando a que me diga algo, en lo que atacaba los cordones de mis calzados deportivos, el parecía  duditativo con lo que diría.

— Deberías decirle a tu novia que no te deje marcas tan notorias.

Dijo con algo de vergüenza antes de salir, entonces caí en cuenta las marcas que YunHo había dejado en mi la noche anterior, reí mientras negaba, después de todo yo adoraba que me marque de esa manera.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

— Te acompaño a casa...
—Lo siento, le dije a mi hermano que nos iríamos juntos, lo siento, JunSu.

Me despedí de él agitando mi mano, dirigiéndome al salón de mi hermano pues sus clases también habían terminado, antes de entrar pude escuchar como dos personas discutían, mi curiosidad pudo más por lo que abrí la puerta despacio, cuidando de no hacer ruido, viendo como Boa le pedía una segunda oportunidad a mi hermano, iba a dejarlo así pero ella le beso, por lo que entre azotando la puerta.

— Entiende que dijo no, eres una mujer detestable, aléjate de él. Si antes no me agradabas, ahora te odio.

Me acerque a ambos y ella trato de retroceder pero solo la sostuve del brazo para sacarla del salón. YunHo me miraba nada más así que me acerque a besarle.

— Vamos a casa, estoy enojado.

Le dije antes de salir y tal como esperaba él venía atrás, estaba furioso, él no la alejó, me pregunto si yo no hubiera entrado, él ¿la hubiera alejado? Y esa chica que era demasiado persistente.

Cuando llegamos a casa él me abrazó, pero me aleje de él, no dejaría que me convenza tan fácilmente, estaba molesto.

— Ahora no, YunHo, tengo tarea.

Lo empuje un poco antes de ir a mi habitación, suspirando cuando vi lo vacía que estaba, debía limpiar un poco al menos, por lo que comencé a acomodar los libros que tenía, y a sacar la ropa sucia para lavarla, mi día sería tranquilo.

En la cena, todo fue silencio, él no diría nada.

— Puedes ir con ella.

Le dije mirando en dirección a la puerta, estaba bien si él tomaba esa decisión, él merecía a una chica linda con la cual tener una familia en un futuro, encambio a nosotros nos señalarían de por vida.

Me puse de pie dispuesto a salir a dar una vuelta, necesitaba pensar pero tan pronto como mi mano tocó la perilla para salir, él me acercaba a su cuerpo buscando mis labios.

— Te quiero solo a ti, Minnie.

Y con esas palabras bastó, deje de resistirme a todo lo que él provocaba en mi, nuestros labios estaban unidos y nuestras manos buscaban acariciar el cuerpo del otro.

Un gemido escapó de mis labios cuando sus manos llegaron a mi trasero y comenzó a apretujarlo, de forma hábil desabrocho el pantalón que tenía, dejándolo caer al suelo y lo mismo pasó con mi ropa interior, ahora acariciaba directamente mi piel.

Mis manos estaban temblorosas pero eso no importó, quería dejarlo igual, al desabrochar su pantalón lo fui bajando a tirones y entonces su erección se alzó entre sus piernas, su miembro era grande en comparación al mío, y tan grueso.