✨ℒℴ𝓇𝒹✨ 𝔎𝔬𝔬𝔨𝔳✨ (𝑳𝒊𝒃𝒓𝒐 1)✨

<<δύο>>

Después de aquella celebración, siendo todo un éxito, y en la que no se le dió ni un pedazo de pan a las personas del Reino. Todas las personas importantes del Reino, habían sido invitados a una cena que se realizaría en el comedor real del Castillo de los Reyes Jung.

Todos habían aceptado gustosamente para poder conversar un poco más y para que los dos comprometidos se conocieran y no se llevasen mal en su matrimonio que sería realizado pronto, en donde solo las personas de mayor estatus social podrían asistir a la boda, incluidas personas de otros reinos.

— Se ven realmente bellos juntos. Esperamos herederos suyos pronto. — El Omega, hijo de los Kim, se sonroja y baja su mirada, ocasionando mucha ternura en las personas que lo rodean, incluyendo a su mejor amigo, Jungkook. Las duquesas ríen y mantienen una conversación entre ellas al otro extremo del comedor.

— Madre. — Interviene NamJoon. — No digas esas cosas. Aún somos un poco jóvenes como para tener herederos ahora.

— No importa, querido. MinHyuk y yo concebimos a SeokJin al muy poco tiempo de nuestra unión. Tiempo después, nació nuestro querido hijo. — Interviene la Reina de los Kim, sonriendo al recordar ese bello momento con su Alfa y su cachorro en brazos recién nacido.

—Por supuesto, los hijos son la mayor bendición. Esperamos que su primer heredero sea un varón, y un Alfa. — Opina un viejo Duque con su cabello totalmente blanco. Jungkook se siente fuera de lugar, pues es el Duque más joven que hay en la mesa.

—Por supuesto, Lord Chansellor. El primer hijo siempre debe ser un varón. — Le sigue uno de los Marqueses que se encuentran presentes en la cena.

Jungkook no presta atención a la plática que están teniendo todos en el comedor real. Esta perdido en sus pensamientos, sin olvidar el rostro de ese bello Omega que lo cautivo con solo una mirada.
El que le robó el aliento con sus hermosos ojos color esmeralda. El que se convirtió en el dueño de sus más profundos pensamientos en solo segundos de existencia frente al Alfa.

Jungkook no sabía que ocurría, pero su Alfa le gritaba en lo más profundo de su ser que por favor buscara al chico de cabello rubio. Pero el humano de Jeon era más fuerte y orgulloso como para hacer eso.

— ¿Y usted, Lord Jeon? — Jungkook sale de su trance al escuchar la voz del hermano de NamJoon llamarle. Era un Alfa de cabello rojo, alguien muy atractivo.

— ¿Yo qué? — El agradable chico sonríe, mostrando una dentadura perfecta. Jeon toma un cuchillo de plata fina y brillante, y con su otra mano un tenedor, y comienza a cortar la jugosa carne que una sirvienta había traído consigo para servir en la mesa real.

— ¿Como ha logrado mantener segura a su esposa e hijos? He oído que la seguridad en su reíno ya no es la misma. — Jeon se incómoda al instante que escucha las palabras del príncipe Hoseok. Todos en la mesa notan la tensión, menos la Reina Hwasa, la madre de NamJoon y Hoseok.

— Bueno... Yo no tengo esposa. — El Alfa pelirrojo hizo una mueca de tristeza por el Lord.

— Lo lamento mucho. — Dijo colocando su mano sobre la del Lord pelinegro. — Debió dolerte mucho su pérdida. No debí sacar ese tema. — Y Jeon escupió su pedazo de carne. Embarrando a SeokJin, quien solo rió a su amigo, y los Reyes Kim igual lo hicieron. Ellos dos desde pequeños se llevaban tan bien.

— No, príncipe Jung... — Intentó explicar el Lord siendo interrumpido.

— Llameme Hoseok. — Dijo este.

— Yo no tengo esposa porque nunca me he casado, y con menor razón tendría hijos. — Hoseok se sonrojó, que tonto.

— Oh, soy muy tonto. Lo siento. — Dijo soltando a él Lord. Todos siguieron hablando cómodamente. Pero Jungkook sintió ese aroma. Piña y coco. Ese aroma, lo había olido en algún la... Oh, ya recuerdo. Se interrumpió así mismo. Chocó con esos bellos ojos marrones, era él. Ese chico estaba ahí de nuevo.

TaeHyung le devolvía la mirada, caminando con una gran olla muy pesada sobre sus manos. El sirviente no miró el camino, y tropezó con la silla del príncipe NamJoon, tirando la olla con un caldo de verduras sobre SeokJin, quien no se molesto por eso, los accidentes pasaban.

— ¡Eres un tonto! — Gritó el Rey Jung. Levantándose de su asiento, tomando a TaeHyung del brazo y levantandolo del suelo con brusquedad. Un ruido seco sonó por todo el Salón donde el comedor real se encontraba. Jungkook gruñó, nadie tocaba a ese chico.

— Cariño. No le hagas daño. — Ruega Hwasa, que se había levantado de su asiento al escuchar la cachetada que le fué dada al Omega.

— Rey Jung. Realmente no hay problema. Fué un accidente. No lo hizó a propósito. — Dijo SeokJin sintiendo lastima por el sirviente. El Rey ignoró a el príncipe Kim.

— Guardias. — Llamó a los siete Alfas que protegían el Salón. Estos se acercaron al Rey con su rostro neutro. — Denle una lección. Y diviertanse con él si quieren. — Todos los que estaban sentados en la mesa habían sentido aquella incómoda tensión que seguramente no se iría por unas horas, pero Jungkook, estaba totalmente furioso, su lobo rasguñaba dentro suyo, pero había decidido ignorarlo y continuar comiendo como si nada.
Los guardias sonrieron, se divertirian un rato con el Omega. Ellos tomaron al chico y lo sacaron del Salón, este no puso resistencia. Hwasa intentó salir del Salón, pero el Rey lo impidió.

— Quédate aquí, mujer. No es tu problema ese chiquillo. — Dijo dando por terminado el tema del sirviente, regresando a su asiento en el centro de la mesa y limpiando restos de comida que se pudieran encontrar alrededor de sus labios con una servilleta de tela.

Después de eso. La cena no fué igual. El ambiente se había vuelto tétrico e incómodo.
Y Jungkook, quería asesinar a ese Rey.

°°Galeria°°

Yo solo dejó un poquito de drama por aquí...

Amo a Hwasa, es una Reyna. ❤

¡Espero que este capítulo haya sido de su agrado! Voten y comenten.

Este capítulo se lo dedicó a dark__doll que me pidió actualización la última vez que la ví 😢