Hey Mex

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Chile

El enamorarse no es una emoción que se pueda definir como blanca o negra, es más parecida a una serie de síntomas de una enfermedad que aparenta el ser incurable; todo comienza cuando pierdes el aliento cada vez que esa persona entra en la habitación, tu corazón se acelera cuando caminan cerca del otro aunque sea un instante, cada palabra que creías conocer se vuelve más difícil de pronunciar en una plática casual en la que aquella persona y tú sean partícipes, tu piel cosquillea cuando están tan cerca que puedes sentir esa calidez que parece emanar del cuerpo ajeno...

Sí, el enamoramiento es una bella manera en la que comienzas a sentir algo más fuerte y profundo, que, sin embargo, también puede llegar a ser fatal.

El amor...

*****

México acababa de llegar a la junta en la sede de la ONU, caminaba con paso presuroso temiendo el regaño que muy seguramente la organización le tenía preparado por llegar tarde, como normalmente lo hacía.

Entró en la sala tratando de no llamar la atención. ¡Vaya que era una gran ventaja que la puerta de ingreso estuviera muy cerca de su lugar junto con sus otros dos compañeros norteamericanos.

Se sentó en su lugar asignado, aliviado porque ONU pareció no darse de cuenta de su llegada, saludó con un ligero gesto a sus compañeros de mesa y volvió su atención a lo que decía la organización.

–México, do you wish to explain us the reason you are arriving late today?– La voz profunda y demandante llegó a sus oídos y se transformó en un escalofrío que recorrió con premura su espina dorsal. Todos dirigieron sus miradas hacia el latino quien se trataba de enderezar para no verse intimidado por el emisor de la pregunta.

[México, ¿deseas explicarnos la razón por la que hoy llegaste tarde?]

–Wey, juro que venía a tiempo pero el pinche tráfico estaba mucho más pesado de lo que había pensado en un inicio.– Respondió con una sonrisa y un tono afable aunque no podía evitar hablar con sus ya característicos modismos. Eso tranquilizó un poco a la organización pues cuando México no sonreía, o hablaba formalmente algo serio había sucedido.

ONU soltó un suspiro que expresaba su alivio tanto como lo hacía con su frustración.

–Okay, I won't scold you today.– Por un momento, el alma del tricolor se sintió aliviada ante las palabras que recién se acababan de pronunciar. –But, if you arrive late to the next meeting, you will suffer the consequences.– Naciones Unidas siguió con su discurso sobre la paz mundial y el cuidado del ambiente sin notar que el latino norteamericano estaba pálido como nunca antes lo había estado.

[Okay, hoy no te regañaré] [Pero si llegas tarde a la siguiente junta, sufrirás las consecuencias]

*****

Momentos después, USA, quien estaba sentado a su lado le tocó con suavidad el hombro, llamando su atención que hasta ese momento parecía estar dedicada a la pluma que sostenía en sus manos.

–Mexico, are you alright?– A pesar de su difícil relación política, México y USA tenían una buena amistad por lo que no era raro escuchar la ligera consternación que llevaban consigo las palabras del estadounidense. Sí,  solían discutir mucho, pero ésto siempre se hacía cuando tocaban temas de índole gubernamental.

[México, ¿estás bien?]

–¿Eh? Ah, sí, sí. Estoy bien.– La respuesta del mexicano sonaba distraída aumentando la preocupación en el contrario. Esta reacción no pasó desapercibida por el latino quien formó una sonrisa en sus labios y miró al otro directo a los ojos. –Neta wey, estoy bien. No te preocupes tanto. Aunque, si te sirve de consuelo, estaba pensando en las palabras de ONU, la mera verdad es que da un chingo de miedo.– Esas palabras que tenían el típico tono humorístico mexicano callaron las dudas que su vecino del norte comenzaba a tener.