CAP.2

32 3 0
                                    

- Si no pasas tú, pasare yo- reaccione y comencé a caminar fuera de la sala.

- Gracias- hice una pequeña reverencia.

- No agradezcas, siempre y cuando sea por chicas bonitas como tú- mis mejillas ardían, sentí como se ponían de un tono carmesí, agache la mirada y asentí.

Di media vuelta y seguí caminando hasta donde el doctor se encontraba.

- Puedes pasar- camine hacia estar dentro del consultorio.

- Bien doctor, dígame qué tiene Yeon.

Mi madre estaba a mi lado, no me había fijado en que Beomgyu y Yoongi no estaban con nosotras. Mi madre sostuvo mi mano con fuerza esperando la respuesta del doctor.

La cara del doctor se transformó, dejándonos ver que había algo mal.

- La verdad, lo siento mucho- se acomodó en su silla frente a nosotras mientras tomaba unos papeles que supuse eran los resultados.- Yeon, está muy enferma.

Mi corazón se rompió ante aquellas palabras, mi madre sostuvo con mayor fuerza mis manos intentando no soltar las lágrimas que amenazaban con salir.

-¿Qué enfermedad es doctor?

- Lleva una pequeña inflamación en el hígado, la vesícula de alguna manera tiene una piedra de aproximadamente 2 cm.- hizo una pausa enseñándole los papeles a mi madre.- Lo que más llamó mi atención fue..- señaló una parte de la hoja por lo que mi madre comenzó a llorar.

- Cáncer- sollozo.

Mi mundo se vino a bajo con tan solo una palabra cáncer.

- No es cualquier tipo de cáncer, es cáncer óseo- en los huesos, mi padre había muerto por el mismo tipo de cáncer, lo vi morir, vi como su vida acabo, vi como luchaba para seguir adelante.

Mi vista se nublo, pensé en Beomgyu y en Yoongi, en mi madre, en todos estos años, en mis pocos amigos, en mi padre y en mi. No podía creerlo, no quería, no me sentía mal, no quería estar mal.

Las lágrimas brotaron de mis ojos, mi respiración se volvió cada vez más pesada y mi cuerpo se debilitó, no quería estar así, quería pensar en que era un sueño y despertar junto a Beomgyu en su habitación.

Pero no fue así, solo me lastime más, seguía sin entender el porque de mi enfermedad.

-¿No hay algo que podamos hacer doctor?- pregunto mi madre entre sollozos.

- Lo siento mucho, no solo tendría que ser una operación- cruzó sus manos.- La más peligrosa es la vesícula, al reventar podría morir, al igual que el hígado.

Negué cubriendo mi rostro con mis manos.- Puedo salir.

- Adelante, sería todo por hoy, aunque me gustaría hablar con tu madre por un momento... lo lamento mucho.

Salí del consultorio casi corriendo, y me dirigí al jardín, escuché a Yoongi y a  Beomgyu llamarme pero no podía verlos, me sentía mal, realmente no quería morir de esta manera.

Me senté en una banca cerca de una jardinera, tape mi rostro y llore de vuelta, lágrimas salían con cada recuerdo que había pasado con mis hermanos, con mis amigos y mis padres.

Cuando mi llanto ceso, levanté el rostro mirando al cielo el cual se había tornado de un azul celeste. Sentí una mano posarse en mi hombro, pensé que era Yoongi ya que era quien más me apollaba y me consolaba.

- No eres la única que ha llorado en este lugar- esa voz masculina, mi piel se puso de gallina al verlo frente a mi, el chico de la sala de espera estaba sentado a mi lado mirando al cielo.

-¿Por qué lo dices?- pregunté casi en susurro.

Soltó una risa y me miro.- Yo también llore, no solo una, no solo dos ni tres veces en este lugar.

-¿Perdiste a alguien?

- Me perdí a mi mismo- la manera tan tranquila en la que hablaba me hizo sentir de la misma manera.

-¿A qué te refieres?

- Soy residente desde hace unos meses.

Mis ojos se abrieron como platos al escuchar aquello, el se miraba en mejores condiciones que yo, cómo era posible.

- No se ve que estuvieras enfermo.

- Intento ocultarlo, no me gustaría que los demás vieran lo mal que estoy, quiero que vean lo mejor de mi- miro al cielo y sonrió.- Aunque sé que moriré.

- Yo también morire- respondí mirando al suelo.-¿Tu de qué morirás?

- Hace ya 5 años que tengo un transplante de riñón, uno de ellos dejó de funcionar, mi hermana lo donó era la única que podía donarlo- sonrió.- Durante 5 años no había ningún problema- suspiro mirándome nuevamente.- Pensé que ya estaba bien, gran error, el año pasado me dijeron que mi único riñón funcionaba al 92%- la sonrisa desapareció de sus labios.- Salí a tomar, no le hice caso a mi madre ni a mi padre, mucho menos a mi hermana solo fueron 7 salidas, lo suficiente como para que esté año viniera con los estudios y me dijera mi doctor que ahora mi riñón funciona al 40% en menos de un año eso disminuyó hasta menos de la mitad- tome su mano y me miro con tristeza.- Además de eso, tengo algo llamado diabetes, juntando ambos, no puedo hacer nada, o me cuido o muero, y por el momento quiero concervar mi 40%.

- Lo siento mucho.

- No hay nada que sentir, fue culpa mía, no de nadie más, solo mía- sonrió nuevamente como si no hubiese dicho nada.- Y, bueno.. ¿Qué te sucede a ti?

Contuve mis lágrimas, por un momento me olvidé de mí.- Tengo una "pequeña" inflamación en el higado- tome una bocanada de aire mientras sentía como mis ojos se llenaban de lágrimas.- En la vesicula tengo un piedra de aproximadamente 2  centímetros- mire hacia el frente evitando su mirada.- Y cáncer óseo.

Termine de decir aquello casi en sollozo, el chico no lo pensó más y me abrazo, no me importaba si lo había conocido hace unas horas, era lo que necesitaba, a alguien que sintiera lo mismo que yo y por fin lo había encontrado.

- Yeon, por fin te encuentro- la voz de Beomgyu hizo que me soltará del abrazo con el chico.- Veo que tienes compañía.

- O si, Beomgyu el es..- me quedé callada al darme cuenta que no sabía su nombre, el solo sonrió.

- Park Jimin- se levantó extendiéndole la mano a mi hermano.- Un placer.

- Beomgyu- hizo una reverencia en manera de respeto.- Igualmente.

- Sabes Beomgyu, tengo una hermana de tu edad, ¿Cuántos años tienes?.

Mi hermano se sonrojo.- 18 años.

- O bueno ella tiene 19, no hay mucha diferencia.

Lo mire incrédula, era como si la pequeña conversación que tuvimos nunca hubiera pasado.

- Los dejo, un gusto hablar contigo Yeon, y contigo también Beomgyu.

- Gracias Jimin- respondimos al unísono Beomgyu y yo por lo que Jimin río.

Empezó a caminar tranquilo hacia el edificio. Las apariencias siempre engañan.

VORES FARVEL   _†Park Jimin†_Donde viven las historias. Descúbrelo ahora