7. Desencadenante.

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Lucy lleva llorando como una hora, no deja de abrazarne y de decirme lo fuerte que soy. Alberto me mira de vez en cuando y me trae pañuelos. Cuando llevaba una caja entera llamaron a la puerta.

Era Gabi.

Entra en el salón corriendo y me ve.

_¡Tesssa!!_viene corriendo y me separa de Lucy que se queda abrazando un cojin. Me agarra y me eleva en el aire,  abrazándome muy fuerte._Mi mechicana...._se sorbe los mocos_, mi gorda mechicana... _unas lágrimillas se resbalan por sus mejillas.

_Gabi..._le abrazo más fuerte aún, y al cabo de un rato, me deja en el suelo.

Nos sentamos. Gabi enfrente mía,  Lucy a la izquierda de Gabi y Alberto y yo enfrente de ellos. Gabi se retuerce un poco hasta que encuentra la postura adecuada en el sofá. Lucy hace lo mismo. Gabi me mira.

_Para empezar,  ¿como te encuentras? _me mira de arriba a abajo._¿qué pasó? ¿como ocurrió? ¿que viste? ¿como llevaste el hecho de desmayarte? ¿sabes que te quedan aquí unos 3 días? ¿qué tal con Alberto? ¿estas bien?

_¡Dios, para! ¡Cerrar la boca todos ya! Dejadme contarlo a mi_no tenía que nentirles, nunca tuve por qué. Son mi familia,  mi mejor amiga y mi... Mi... ¿Novio?_ Os lo contaré desde el principio. Así que callaos todos. Las preguntas al final, ¿ok?_les amenazo.

Asienten todos a la vez. Alberto me coge de la mano y aunque Gabi le mira extrañado, sonríe al ver las manos unidas. Lucy me mira. Le digo que luego,  que esto luego. Primero lo importante.

Se lo cuento todo. Todo.

* * *

Al final de la historia están todos con la boca abierta. No se si se lo han creído o no, pero yo he contado la verdad. Lucy me mira y no le veo cariño, solo asombro. No se que significa eso. Miro a Gabi. Él mira al suelo. Alberto me tiene agarrada la mano, pero ya no la masajea. No se que pensar. <¿Creerán que me he vuelto loca?> pienso.

Gabi levanta la cabeza y me mira a los ojos.

_Iruthiel. _vuelve a mirar al suelo y niega con la cabeza. Se pone a llorar. Muy fuerte. No soy capaz de moverme. _ ¿SABES ACASO QUÉ SIGNIFICA ESO?_me grita entre lloros.

No se que responder. Lucy se levanta y me mira desde arriba.

_Ángel. Es la hora._lo dice con una voz muy grave y oscura. Cierra los ojos y cuando los vuelve a abrir son negros. No me aparta la mirada.

Grito. Alberto me agarra y sale corriendo conmigo del salón hacia su habitación. Cierra con llave y pone la cómoda para que no se pueda abrir la puerta.

_¡¿Qué está pasando?! _le exijo saber.

Viene hacia mi y me agarra de los hombros.

_Confía en mi. Solo en mí. Yo te conozco desde hace mucho... mucho tiempo. Confía en mi. _ me dice, no entiendo nada.

Me aparto de sus hombros e intento mover la cómoda para salir fuera con mi hermano. Pero hay algo que me hace parar. Alguien golpea la puerta con gran intensidad por el otro lado. Grita y da golpes,  cada vez son más fuertes. Esta rompiendo la puerta, ya se ha salido el pomo.

_¡ABRE!_grita una voz gutural y de inframundo desde el otro lado. Voy andando hacia atrás y me tropiezo con la alfombra. Caigo al suelo. Alberto se arrodilla a mi lado y me ayuda a levantarme.

Siguen arrancando la puerta. Esa cosa, que ya es definitivamente una "cosa" no para de gritar que abra.

_Tenemos que salir de aquí. Ya._mira la puerta, de la que se está haciendo un agujero en ella. Cada vez es más grande.

_No hay salida,  por si no lo sabes, ¡nos has encerrado aquí! _le grito frustrada y porque con los gritos de esa cosa no se oye nada.

Se oye un ruido enorme. La puerta ha cedido. De ella sale una enorme bestia de casi dos metros,  delgada, y de color negro. No tiene ojos, solo el líquido negruzco que le sale por los ojos.

Alberto me mira y sus ojos grises son verdes ahora. Le miro extrañada y al siguiente parpadeo vuelven a ser grises. Vuelvo a mirar a la bestia. Tenemos que salir de aquí o esa cosa nos va a matar.

Alberto me coge del suelo y me alza en brazos, ahora me coge cómo si fuese una princesa,  <pues vaya situación para cogerme así> pienso. No me estaba dando cuenta pero me estaba desmayando. Noto como todo se vuelve negro por los lados y que dejo de sentir cosas como los golpes o el oído.

Antes de dejarme arrastrar por completo veo como Alberto coge algo de su estantería y lo lanza a la pared . Esa cosa estaba cada vez más cerca. Alberto corre hacia la pared dónde había roto eso y toda esa zona se vuelve blanca, en relación al verde de la pintura.

Antes de perderme por completo noto cómo caemos.

Nunca dudes de ti mismaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora