Jessika esta un poco aturdida, quiere entender que es lo que está pasando, tal vez debió entregarlo a la policía cuando tuvo la oportunidad, muchas cosas pasan por su cabeza, y justo en ese momento evans aparece y le dice que por favor no se asuste, todo tiene una explicación.
Él sabe que es difícil de creer en este momento pero le dice que lo hace por su propio bien, sabe que la está exponiendo, y dice que no se perdonaría que por su culpa, ella salga perjudicada.
Le cuenta sobre la visita de su amigo, de la gran posibilidad de que en cualquier momento de aviso a la policía, Jessika dice no entender por que la volvió a amarrar, que piensa hacer.
Él le dice que piensa escapar sin su ayuda, y si la policía aparece, quiere que no la vayan a relacionar con él, al verla amarrada en la silla no van a sospechar de ella, le pide de nuevo perdón por todo, y por haberla atado de nuevo, pensó que si tal vez le decía lo que pensaba, lo que iba a hacer, ella no iba a estar de acuerdo. Le dice que no apretó mucho la cuerda, por si no aparece la policía, pueda desatarse.
Evans se despide, le dice que hubiera sido lindo haberla conocido en otras circunstancias, le agradece que le hubiera creído aún cuando no tenía manera de demostrar su versión, Jessika no sabe qué decirle, quiere ayudarle pero sabe que el tiene razón, le dice que espera que pueda llegar a donde él desea, cuando se va, ella se siente triste, sin entenderlo, en ella se despertó un sentimiento hacia él que era más que simple empatia, y evans mientras se está llendo parece sentir algo similar.
Jessika se queda pensando en todo lo que a pasado, y ni siquiera se fija en que ya se a hecho de noche, en ese momento llega la policía, su compañero al ver que no llegó a trabajar llamo a la policía y les menciono lo del hombre en su casa, y que le parecío algo sospechoso. Los policías al verla amarrada entran en la casa en busca del hombre, la desatan y se aseguran de que no hay nadie más en la casa.
Mientras la revisan para saber si está bien, llegan sus padres, se habían enterado por televisión todo lo que estaba pasando, Jessika no se había dado cuenta de que todos los medios de comunicación del pueblo estaban ahí, todos querían saber si ese hombre era el que se había escapado de prisión, si le había hecho algo, ella solo decía que no sabía quién era y que no quería hablar con nadie.
Al día siguiente la policía la visita en la casa de sus padres, necesitan que ella les dé alguna información para poder dar con este hombre, le enseñan el retrato del prófugo para ver si lo puede identificar, Jessika dice que él siempre estuvo con su rostro cubierto, al preguntarle si el menciono algo, si dijo por qué la secuestro, si le dio a entender quién era, ella solo decía que nunca supo quien era, y que él lo único que dijo fue que no le pensaba hacer daño.
Jessika, a petición se sus padres se mudo con ellos, pensaban que esta persona podria volver, aunque ella sabía que no corría peligro, accedió para no levantar sospechas. Así fue pasando el tiempo y ella lograba dejar de pensar en él, ¿estaría bien? ¿Logró llegar a donde quería?
Han pasado siete años, Jessika ya a dejado la casa de sus padres, y a decidido volver a la casa donde fue "secuestrada", muchos piensan que no debería hacer eso, pero para ella, ahí no hay malos recuerdos. Cierto día, cuando llega del trabajo, revisa el correo, y revisando las cartas, nota que hay una cuyo remitente es de una cárcel de un pueblo cercano, al abrirla, no da crédito a lo que sus ojos están leyendo, Es de evans, no dice mucho, sólo que si acaso llegara esa carta a sus manos, quería decirle que aún la recuerda y que si tal vez, algún día tiene tiempo, le encantaría que lo fuera a visitar.
Jessika no lo duda ni un instante, al llegar el fin de semana, viaja hasta ese pueblo para poder visitarlo, mientras espera en el lugar de visita, se siente un poco nerviosa, siempre quiso saber que fue de él, pensó que había logrado huir. Al verlo recuerda lo sucedido años atrás, él la saluda de un abrazo y le dice que se siente muy feliz de que haya ido.
Mientras hablan, ella le pregunta como termino preso, para su sorpresa él le cuenta que ese mismo día que se despidió de ella, tuvo la oportunidad de abordar el tren que lo llevaría lejos, pero decidió tomar el que lo llevaba al sitio donde pasó lo que le contó a ella, no quería esconderse toda su vida, y sentía que debía pagar lo que hizo. Le cuenta que aunque confesó todo lo que había hecho, su abogado logró que lo acusaran sólo del último hombre que asesinó, pues fue el único caso que tenía testigos.
Lo condenaron a 10 años, de los cuales ya había pagado 7, desde ese mismo día quiso hablar con ella, pero no quería causarle problemas, pero le dice que no a habido dia que no piense en ella, le reconoce que despertó en el un lindo sentimiento, le pregunta que a sido de su vida, Jessika le cuenta que todo es casi igual, terminó su carrera, le cuenta que aunque había vuelto a vivir con sus padres, regresó a esa casa porque, para ella, algo de él quedó ahí.
Tras una larga charla, llega el final de la visita, al despedirse él le agradece que lo haya visitado, que desea que todo le vaya bien en su vida y espera volver a verla algún día, ella dice que también le gustaría, camino a casa, ella siente lástima por evans, sabe que es un buen hombre, pero también sabe que no hay nada que pueda hacer por él.
Cierto día, mientras todos los demás reclusos están en el área de visita, evans esta como de costumbre leyendo un poco en la biblioteca, de repente un guardia se le acerca y le dice que tiene visita, notablemente sorprendido va para ver de quien se trata y a lo lejos ve a Jessika esperándolo con una sonrisa y un pequeño pastel que le preparo.
Fin.
