*̣̩⋆̩PARTE 2*̣̩⋆̩
—Bebé, despierta —una voz susurró en mi oído dulcemente—. Ya hemos llegado.
Cuando abrí mis ojos y analicé la situación, sentí mi rostro enrojecer furiosamente.
¿Él me acaba de llamar bebé? Bien, creo que estoy a punto de gritar como quinceañero hormonal, que es lo que se supone que soy. El caso es... ¡JOOHEON ACABA DE LLAMARME BEBÉ SIN NINGÚN CONTEXTO!
Aunque pensando fríamente, quizás solo estaba burlándose porque soy menor, de baja estatura y posiblemente babeé su hombro mientras dormía.
Eso era lo más probable, Jooheon no podía tener sentimientos hacia mí. Él era como esos mejores amigos molestos que se la pasan avergonzándote mandándote besitos y coqueteando contigo para conseguir incomodarte, alguien así como Minhyuk.
Pero no se parecía a Minhyuk en lo absoluto, no había ni una pizca de burla en sus palabras. O estaba coqueteándome de verdad o sabía de mi flechazo por él y solo se burlaba de mí cruelmente.
Pero Jooheon nunca podría hacer tal cosa. La palabra "crueldad" no existía en él. Quizás solo es extremadamente dulce y cariñoso por naturaleza, quizás le dice así a todos sus amigos.
Sigo sin entender por qué me ilusiono a mí mismo para luego aplastar esas ilusiones sin piedad alguna. ¿Qué estás haciéndome, Jooheon? ¿Por qué logras confundirme de esta forma? A este punto acabaré enloqueciendo por tu culpa.
—¿Kkukkungie?
¡Diablos! He estado divagando todo este tiempo y ahora me mira como si estuviera loco.
—Sí, vamos —me apresuré a decir mientras me levantaba del asiento y salí del autobús sin mirar atrás. Cuando estuvimos fuera, me paré inmediatente y me giré para encararlo, aún con la vergüenza reflejada en mi rostro—. ¿A dónde vamos?
Jooheon rió y de nuevo tomó mi mano para salir de la estación. Los primeros quince minutos fueron en silencio, un silencio relajante y para nada incómodo, solo el sonido de las ojas secas crujiendo bajo nuestros pies. Ya no habían casas ni calles, solo un sendero y campo alrededor, completamente deshabitado.
—¿Vas a decirme ya a dónde estamos yendo?
—Nope —sonrió Jooheon, golpeando algunas plantas con una pequeña rama que había tomado al comienzo del camino.
—No hay ni un alma aquí, y hace mucho calor para pasar el día bajo este sol. Apuesto a que ni siquiera hay cobertura o señal. ¿Acaso planeas robar mi inocencia donde nadie nunca podría encontrarnos?
—¡Yah! Dices que soy el ser más bueno y bondadoso del planeta, pero me tienes como un violador. ¿Quién te entiende? —me miró y me golpeó levemente con la ramita en la cabeza.
—No sería violación, de todos modos —me encogí de hombros, diciendo aquello más alto de lo que pretendía.
—¿Me estás diciendo que estás pensando en hacer... eso conmigo?
—¡No estoy pensando nada! —grité, mis mejillas de nuevo ardían, todo era su culpa. Me crucé de brazos evitando el contacto visual con él—. Solo era una broma.
—Me sorprende la cantidad de veces que piensas en sexo al día, ¿y tienes el descaro de decir que no eres un niño precoz?
Lo miré con indignación y le arrebaté la rama para golpearlo repetidas veces con ella, mientras él intentaba huir de mí. Después de cinco minutos corriendo en círculos, decidimos detenernos y volver al camino. Yo sentía que mis pies iban a desplomarse en menos de diez segundos, habíamos caminado por media hora y aún no se veía absolutamente nada que no sea plantas, insectos y más plantas.
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the boy next door ❁۪۪ jookyun
FanficChangkyun tiene un nuevo vecino llamado Jooheon, el cual tiene su misma edad. Adorable, lindo y dulce. Ambos apenas son unos inocentes adolescentes que solo buscan tener la compañía de alguien en sus momentos más solitarios. Jooheon comienza a envia...