•Solo por tí• ×Chaelisa×

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•Rosé• 

Estaba tranquila en casa recogiendo y cocinando para cuándo mi novia llegará. Cheque mi teléfono eran al rededor de las 4 de la tarde, pero ella no llego, lo cual se me hizo raro y decidí escribirle un mensaje para saber si vendría a casa a comer pero como no respondía decidí esperar un poco más y ella nunca respondió.
Ya pasaban más de las 6 de la tarde y no había rastro de ella, estuve viendo mi teléfono para ver si llegaba una notificación de mi preciada esposa pero no había rastro de ella.
Estuve viendo el televisor sentada en el sofá mientras mi amada llegaba pero se me hacía un poco raro que no hubiera señales de vida de ella, así que decidí llamarla para saber si estaba bien, pero no obtuve ninguna respuesta de ella así que espere más,  se dieron las 12 de la noche, ella llego tomada, con su pelo revuelto, labios hinchados, camisa casi desabrochada, algo que me molestó bastante.

Jennie: Ya volví -gritó- 

Rosé se levantó a ayudar a su novia, pues a su mal estado, no se podía sostener por ella misma. Posó una mano sobre la cintura de la pelinegra, e hizo que el brazo de esta quedará al rededor de su cuello, pero al voltear para que logrará está última acción noto algo no muy agradable, era una marca, una de esas que juraba que solo ella se las hacia pero, se dio cuenta que eso no pasa.  

Rosé: Jennie, ¿Qué es esto?  -dice intrigada mientras señala las marcas- 

Jennie: fueron solo golpes amor -dijó entre pequeñas risas- 

Rosé: ¿Crees que soy estúpida? -dijó con enojó- esas marcas no son golpes, esos son chupetones -afirmo mientras subía la voz- ¿Con quién fregados me engañas?

Jennie: Ahorita no estoy de humor para tus dramas Rosé -dijó volteando los ojos- 

Rosé: No entiendo para qué quieres estar conmigo si te largas a la cama de otras zorras -levanto su mano y la acercó con fuerza al rostro de la pelinegra provocando un golpe fuerte-

La pelinegra, al recibir la cachetada, ardió en enojó, obtuvo fuerzas de dónde no tenía para poder levantarse del sofá, dónde unos momentos antes la castaña la había colocado.

Jennie: Te dije que no empezarás con tus dramas.! 

La pelinegra comenzó a tratar de intimidar con la mirada a la castaña, lo cual lo obtuvo al instante, camino en dirección de la castaña, provocando que esta quedará arrinconada en la pared.

Jennie: Me cansé de tus malditos dramas -levanto la mano izquierda a la altura de su rostro- ¿A caso no te das cuenta de que yo me la paso trabajando para que tengamos nuestra casa ordenada? -la pelinegra impactó su mano izquierda en la cara de la castaña- Trato de darte todo -gritó irritada-

 Rosé: La verdad no se nota -señalo la marcas- si realmente me amarás no tendrías esas estúpidas marcas en tu cuerpo, es la primera vez que te descubro, pero realmente no se con cuántas más estado a parte de mi
-dijo empezando a llorar-

Jennie: No estuve con nadie -rio irónica- yo te amo, pero no puedo soportar esos teatritos de novela barata en mi casa, vete -señalo la puerta- no te quiero hoy en casa -gritó molesta-

Rosé: Me largo, pero luego no estés rogando que me necesitas en tu cama -gritó de igual manera mientras se acercaba a la salida y después de unos segundos la castaña ya se encontraba en la calle-

La castaña verifico si traía su celular y billetera lo cual supo al instante que estás dos pertenencias estaban con ella. Rodé comenzó a caminar sin rumbo, hasta que vio un bar y decidió adentrarse a el.
La castaña se dirigió a la barra y pidió una botella de whisky, saco su billetera pago lo que tenía que pagar y se fue a una mesa solitaria, pues en ese momento se sentía realmente mal.

Rosé: por que carajos me tratas así.! Yo te doy todo y no me respondes con nada -tomó un trago bastante largo de la botella mientras lloraba recordando lo que había pasado hace unos momentos-

Una chica se percato de el mal estado de la castaña, así que se acercó a esta, pues algo en ella sentía que la castaña necesitaba ayuda y ella quería dársela.

°°]: Hola pequeña, ¿Está todo bien? 

La castaña levanto su mirada, seco sus lágrimas y negaba lentamente con la cabeza

°°]: ¿Te puedo ayudar en algo? -dijo con preocupación-

Rosé: ¿Qué harías? Si estás con una chica, dónde tú das todo de tu parte, pero ella solo te engaña y no la puedes dejar por miedo a lo que te lastime 

°°]: Primero que nada -se sentó al costado de la castaña- yo me alejaría sin importar el riesgo, conseguiría alguien que si me ame porque no soportaría estar con una persona que no me quiere -dijo sincera- por cierto mi nombre Lalisa Manoban pero dime Lisa. -estiro su mano en forma de saludo-

Rosé: Yo soy Roseanne Park pero dime Rosé. -sonrió amablemente-

Lisa: Esta bien Rosé -sonrió de igual manera-

Rosé: ¿Quieres? - extiende la botella - 

Lisa: Si, Claro - toma la botella y le da un trago- Así que viniste a este bar para desahogarte por problemas con tu novia. -sonríe cabizbaja-

Rosé: Algo así -toma de la botella- de hecho ella me corrió esta noche por haberle reclamado por una marca que le encontré en el cuello y al reclamarle me golpeó y por eso tengo esta herida. -dijo señalando su labio partido-

Lisa: ¿Y por que no la dejas? -pregunto interesada- 

Rosé: La amo -ríe leve- la verdad ya no se lo que siento por ella, he tratado de dejarla pero cuando le insinuó no muy directamente me golpea y me da miedo a que llegue a agredirme seriamente. 

Lisa: ¿En serio te trata tan mal?

Rosé:  Si, tan así me trata, muchas veces he tratado de huir de ella, pero siempre me descubre

Lisa: ¿Qué tal si te ayudo? -dijo sincera-

Rosé: No creo que puedas pero esta bien, acepto tu ayuda -sonríe amablemente-

Lisa: ¿Me prestas tu celular? - la castaña le acerca el aparto , la tailandesa lo recibe y acto seguido anota su número de teléfono- toma -estira su brazo con el teléfono-, escribí mi número de teléfono por cualquier cosa que necesites.! 

Rosé: Muchas gracias Lisa por todo esto -sonríe mientras ve a los ojos a la tailandesa- aún no nos conocemos tanto pero es muy lindo lo que haces por mí. -le da un abrazo a lisa-

Lisa: -corresponde el abrazo mientras sonríe- No me gusta ver personas así de mal, y haría todo por ayudarlos. -sonríe sincera-

Rosé: ¿Te podría pedir un favor? -la tailandesa asiente con la cabeza- ¡sabes donde hay un hotel cerca para poder dormir?

Lisa: No, la verdad no se donde hay un hotel cerca, pero puedes quedarte en mi casa -dice entusiasmada- 

Rosé: ¿No seria mucha molestia? -la tailandesa niega tierna- Acepto tu invitación Lisa -dijo de la misma manera 

Lisa: ¿Nos vamos? -la castaña asintió levemente- vayámonos entonces a descansar -sonrío-

Lisa le sostuvo la mano a Rosé para dirigirse a la salida de ese bar, se aproximaron a el auto de la tailandesa, por lo cual Lisa saco el seguro de este, y abrió la puerta donde iba a sentarse la castaña. Cerro cuidadosamente la puerta del vehículo y se aproximo a la puerta de el piloto para adentrarse a el y empezar a manejar por 10 minutos hasta llegar a el edificio donde la tailandesa vivía. Ambas salieron del vehículo, y empezaron a caminar juntas tomadas de la mano hacia el elevador para poder entrar al apartamento de la tailandesa. 

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