Capítulo XVII Intersección del destino

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Era fin de semana e incapaz de seguir conciliando el sueño, Kakashi se levantó de su cama aunque era muy temprano por la mañana, ese día no laboraba por lo que decidió tomárselo con calma. Se dirigió a la cocina para prender su cafetera y luego se metió al baño para darse una ducha mientras pensaba los acontecimientos del día anterior. Se había quedado hasta tarde calificando unos exámenes cuando recibió un mensaje de Obito donde le explicaba que se había quedado encerrado en el club de arte junto con Sasori. Sintió nervios al leer el nombre de este último en el mensaje y se preguntó si Obito y él se encontraban en malos términos, posteriormente, se enteró que Sasori era parte del club de arte al igual que Obito y eso le devolvió la tranquilidad. Abrió la puerta del club por fuera con la llave maestra de los profesores y espero a Obito abajo de la escalera para llevarlo a su casa, quería preguntarle por su repentino interés en Sasori.

—Quiero ayudarlo— había respondido Obito con la mirada fija en el exterior mientras viajaban en su automóvil.

Sabía que él tenía debilidad hacia las personas desvalidas, después de todo, durante mucho tiempo Obito fue objeto de burlas y comentarios crueles por la terrible cicatriz de su rostro; razón por la cual se aferraba aquella máscara naranja sobre su rostro. La memoria de Kakashi lo llevó a su época de practicante cuando conoció a Obito por Rin.

Todo comenzó con el suicidio de su madre o quizás antes, cuando su padrastro los abandonó

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Todo comenzó con el suicidio de su madre o quizás antes, cuando su padrastro los abandonó.

Su madre había tenido una vida desgraciada. En su primer matrimonio había perdido a su esposo, el padre de Kakashi, debido a una rara enfermedad que lo consumió por completo así como sus ahorros en un tratamiento que no pudo salvarle la vida. Después, en su segundo matrimonio, con la esperanza de ser tan feliz como lo fue en el primero, unió su vida con un hombre irascible con un problema grave de alcoholismo que obligó a Kakashi a salir de su casa a temprana edad y buscar su propia independencia. Fueron tiempos difíciles, tuvo que estudiar y trabajar para mantenerse y salir adelante. Él deseaba que su madre se alejara de ese mal hombre pero después del nacimiento de su hermana Rin, las cosas se tornaron mucho más difíciles. Intentó buscar en ese tiempo alguna solución para salvaguardar la integridad de las dos mujeres más importantes de su vida hasta que su padrastro se alejó por su propia cuenta. Desconocía los motivos que lo llevaron a abandonar a su madre y hermana pero le resto importancia, su madre era libre al fin y pensó que podría vivir tranquila el resto de sus días pero no pudo estar más equivocado.

Su madre comenzó a descuidarse, dejó de comer, dormía durante días y en otras no dormía nada. Rin que ya podía entender un poco más la situación, intentaba cuidar lo mejor posible a su madre pero tan solo era una joven estudiante de secundaria. Y él, que ya vivía de forma independiente las visitaba de vez en cuando por si necesitaban ayuda o para llevarles algo de comer. Había comenzado a trabajar como maestro en una primaria y el trabajo lo mantenía demasiado ocupado. Sin embargo, un día recibió una llamada que cambiaría su vida y la de su hermana. La policía se había comunicado con él para que fuera a recogerla en la estación, al parecer, ella había presenciado cuando su madre moría a manos de una horca improvisada con el cable de luz de su departamento.

Kimi ni aitakute (Quiero verte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora