Capítulo 5.

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Narra Ochoa:

Hoy me desperté muy desmotivado porque ayer perdí una partida al Fornite, la ventana estaba entre abierta y entraban los rayos de sol delicadamente entre las cortinas haciendo que la habitación tuviese diferentes tonalidades. Justo cuando estaba por levantarme y erguirme en la cama mi mami entró por la puerta.

-Mami de Ochoa: ¡Cariñooo despiertaa! Uy perdón pensé que estabas dormido aún- Me dijo con una sonrisa en su cara recién pintada.

-Ochoa: Mamá no hacía falta entrar pegando gritos como una energúmena- Dije tapandome los oídos con cara de disgusto

En cuánto menos me lo esperé recibí un fuerte golpe en mi cabeza,cuando quise abrir los ojos, un poco mareado, me di cuenta que ese fuerte golpe era proveniente de la chancla de mi madre la cual me miraba muy furiosa, supongo que por haberla llamado así.

-Mami de Ochoa: ¡No debes llamarme asi o te llevarás otro golpe!-Me dijo con cara de enfadada y cerró la puerta de un fuerte golpe.

Resoplando me levanté de la cama y sentí el frío suelo en mis pies, me gustaba muchísimo esa sensación.

Me senté en la silla del escritorio y encendí la torre del ordenador.
Casi al instante apareció en la pantalla una foto de una chica casi en pelotas lo cual hizo que mi pene se levantase sin ningún miedo.

Abrí el cajón de la mesilla de noche y saqué un paquete de clinex, seguidamente me dispuse abrir una página porno en el ordenador y me bajé los pantalones del pijama.

Puse el primer video que me salía en recomendados de la sección sobre personajes de videojuegos y empecé a observar el vídeo. Cogí mi pene y empecé a mover mi mano sobre él lentamente y a la vez constante,sentí una sensación de placer inexplicable mientras me pajeaba, después de unos minutos sentí una grata oleada de placer sobre mi cuerpo mientras temblaba sobre la silla del escritorio,mi cuerpo se tensó y sentí como me corría en mi mano.

Rápidamente cogí un clinex y me limpié la mano a la vez que el pantalón ya que algunas gotas habían caído sobre él.

Bajé velozmente las escaleras y me dispuse a desayunar un tazón de cereales y un café para tener energía en todo el día.

la cosa está muy dura. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora