Antonin Dolohov

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—Levántate—. Una mano le sacudió el hombro, Harry gimió y se sacó las mantas de la cabeza. Las mantas fueron retiradas, —Potter, despierta—. Abrió un ojo, Riddle. Draco seguía durmiendo, su brazo envuelto alrededor de la cintura de Harry. Los ojos carmesí de Voldemort brillaron en... ¿Celos?

—Draco, Muevete.— El rubio gruñó y se aferró aún más fuerte.

—Draco, quítate. Necesito despertarme.— Él siseó.

—Mm, pero eres tan cálido—.

—¡Dragón!— El rubio se incorporó frunciendo el ceño.

—Mi nombre es Draco—. Harry sonrió y levantó a Onyx de su pecho. Dejó al gato en el suelo.

—Finalmente. Vamos a desayunar con Antonin Dolohov en diez minutos, apúrate.— El chico maldijo.

—¡Podrías haberme dicho esto ayer!—. Encontró un buen par de túnicas.

—¿Quién más va?—

—Lucius, Severus, tú y yo—. El chico entró en el baño y se cambió. Salió con una túnica verde bosque. Riddle frunció el ceño.

—¿De dónde sacaste eso?—

—¿El qué?— Harry respondió con confusión.

—El relicario que llevas.—

—Oh, lo encontré en mi baúl. ¿Por qué?— Riddle avanzó unos pasos y sostuvo el relicario en la palma de su mano.

—No hay razón, no deberías usarlo—. Harry ladeó la cabeza.

—¿Por qué?—

—Es muy valioso—. El chico se lo quitó y lo puso en su baúl.

—¿Feliz?—

—Sí.—

—Bueno. ¿Puedo hablar frente a Dolohov?—

—No, él no lo sabe todavía. Planeo decirle al círculo interno pronto.—

—Está bien.— Riddle miró la hora.

—Debemos irnos—. Harry asintió y caminó hacia la puerta.

—Adiós, Draco—. Estaba a punto de irse cuando un par de garras afiladas se clavaron en su pierna. Harry miró hacia abajo, Onyx lo miró con ojos muy inocentes. Suspiró y recogió al gatito. Riddle rodó los ojos, comenzaron a caminar.

—Dolohov ama a los gatos, aunque no lo admita.— dijo Riddle, y el niño sonrió.

—Apuesto a que todos los mortífagos aman en secreto a los gatos—.

—Silencio, no puede oírte—. Entraron en el comedor, todos ya estaban sentados. Antonin Dolohov era un hombre guapo. Era alto y musculoso. El hombre sonrió mientras Harry entraba.

—Harry potter, nunca esperé verte en presencia del oscuro seño ... vivo—. Harry ignoró ese comentario y se sentó, inmediatamente se sirvió una taza de café, después de eso dejó a Onyx en el suelo y dio Él un tazón de leche. —Tom, ¿sabías que tu pequeña mascota bebe café? Eso realmente no es saludable para un niño en crecimiento—'. Tom sonrió.

—Soy consciente. Prácticamente vive de eso, una vez que Potter se quedó despierto por 57 horas. Y él no es mi "mascota", pronto lo aprenderás.— Dolohov se rió.

—¿Por qué?—

—Potter puede explicar eso—. Harry suspiró.

Fue por un hechizo.

—Sólo un hechizo? ¿Para qué?—

Para cubrir una marca oscura.

—¿Ya lo has marcado? ¿No crees que es un poco temprano?— Harry puso los ojos en blanco.

No tengo la marca.

—Entonces, ¿por qué te quedaste despierto durante 57 horas?—

—Harry me ayudó, se aseguró de que me mantuviera fuera de Azkaban. Ese chico debería estar honestamente en Ravenclaw—. Dolohov se volvió hacia el chico.

—Hm, pareces bastante oscuro, para ser tan joven—. Tom sonrió con satisfacción y puso una mano en el hombro de Harry.

—Harry es oscuro...— Una varita presionada contra su cuello lo interrumpió.

No tocar.

Riddle rió nerviosamente y le quitó la mano.

—Me disculpo, Antonin. Se pone un poco nervioso alrededor de extraños.— El hombre frunció el ceño.

—Ah. El señor Potter parece estar un poco más que nervioso, pero no creo que sea por mi presencia—. Harry bajó la varita y se sirvió otra taza de café.

—Tienes razón, Potter tiene una regla muy estricta de no tocar. De hecho, vi a Blaise Zabini abrazarlo una vez. El pobre chico terminó en el ala del hospital.— dijo Snape, sus labios se curvaron en una pequeña sonrisa.

—No estoy seguro si es tan estricto. Justo la otra noche encontré a mi hijo y a Harry durmiendo en la misma cama. Realmente me hace cuestionar el propósito de su relación—. Lucius agregó con una sonrisa, Dolohov se rió y tomó a Onyx, colocando al gatito en su regazo. Harry sonrió malvadamente.

Sigue hablando, Lucius. Voy a contarle a Abrax sobre nuestra conversación después del desayuno. No he tenido una charla con él en unos pocos días.

—¡No lo harías!— El rubio siseó, Harry se encogió de hombros.

Lo haré si es necesario.

El hombre suspiró y puso mala cara de una manera no-Malfoy-malvado. Severus y Antonin estaban divertidos, Tom todavía estaba un poco sorprendido. Harry continuó tomando café. El slytherin más joven levantó la vista cuando se abrió la puerta y entró Draco.

—¿Qué estás haciendo aquí?— Le preguntó su padre.

—Tengo hambre y estoy aburrido—. Se detuvo junto a Harry. —Encontré este libro en tu baúl, ¿puedo leerlo?— Levantó un gran tomo sobre la nigromancia.

No, definitivamente no puedes leer eso.

—¿Por qué no? Se ve tan genial—.

Draco, ¿sabes qué es la necromancia?

—No...— El mago de los ojos esmeralda suspiró con agitación.

Comunicarse con los muertos, a veces se usa para predecir el futuro.

—Ohhh... eso suena muy oscuro—. Harry tomó el libro.

¿Por qué estabas revisando mi baúl?

—Solo tenía curiosidad. Muévete.— El rubio se sentó junto a él, ambos chicos compartían la misma silla. —Zabini te envió una carta, él está enojado—. Draco le entregó la carta. El pergamino se incendió con un tirón de la muñeca de Harry. Draco miró la pila de cenizas y dijo: —Ok, ¿ya tomó café?— Severus asintió.

— Esta es su tercera copa.—

—Oh querido. Bebe más.— Harry puso los ojos en blanco y se puso de pie.

Estaré en la biblioteca.

Dicho esto (no realmente), se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia su lugar favorito en la Mansión Malfoy.




Nota de Traductora-

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The Locket  -Raven364Donde viven las historias. Descúbrelo ahora