Antes de la venganza

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Está es la historia de Oli, un chico cuyo trasero siempre esta colgado del calzón, ya que es víctima frecuente de calzón chino.
Obvio era un chico bajito, nerd, usa lentes, le gusta leer mucho y es inteligente. Tiene 14 por lo que está en secundaria, pero en un internado. Los chicos de su edad y más grandes tienden a acercarse a el por detrás para agarrar su calzón y jalarlo.
Le pasa tan seguido que en el pasado intento dejar de usar calzones pero sus compañeros se las arreglaron para poder hacerle calzones chinos.

Como el día que le bajaron el pantalón sabiendo que no llevaba calzones, aun con eso Oli se las arreglo para que sus pantalones se quedarán atados a su camiseta y así no ser bajados.

En otra ocasión, siendo el cumpleaños de Oliver. Un chico de su edad llamado Liam le regaló un paquete entero de calzones blancos con el cual sus compañeros se dedicaron a hacerle calzón chino todo el día de su cumpleaños. Entre ellos se destacan Liam, Zed y Tim. Otros chicos como Archi, Javi y georgi sólo se reian de lo que le estaban haciendo. Ese día fue un festival de calzones chino rotos para el internado

Pero aún con esas cosas. Oli sabía que sus compañeros no le comprarían calzones todos los días sólo para estirarselos. Así que después de lo de su cumple, Oli aún no usaba calzones, Entonces fue cuando Jay, un chico de 14 años que nunca había participado en los calzones chinos de Oli dijo

-Oigan, hay chicos que dejan su ropa interior sucia abandonada en los vestidores, creo que son 3 chicos de nuestra edad pero no se sus nombres, en lugar de que los intendentes las tiren hay que ponérselas a Oliver para hacerle calzón chino-

A todos les fascinó la idea, así que llevaron a Oli a los vestidores. Ahí se encontro con el calzon más sucio que había visto en mucho tiempo. Era una trusa blanca con manchas amarillas en el frente y una gran raya café en la parte de atras.

-Por favor, No!- dijo Oli -Usare calzones otra vez, hagan me un calzón chino con mi short pero no con la trusa sucia de otro chico-

Después de pensarlo un poco, Zed dijo
- Bien, pero de esta no te libras-

Entonces le bajan el pantalón a Oli y le ponen la trusa sucia. Ahí es cuando sin pantalón le empiezan a jalar la trusa desde atrás enterrando el calzón poco a poco y lastimando su culo. Pronto sus bolas le empezarían a apretar contra la tela del calzón. Zed termina el calzón chino con un fuerte tiro desde atrás que raspa su trasero entero y le aprieta las bolas y el pene, haciéndole un calzón chino atomico que lo atora en la barbilla de Oli, provocando que Oli tuviera que oler la trusa sucia de algún otro niño. 《No huele tan mal, como a niño bañado》 pensó Oli.

Así fue como Oli volvió a usar ropa interior. El día de hoy, a hora real (lo que está pasando en este momento ) en el jardin del internado Oli esta colgando de unos boxers azul clarito enganchados a la rama de un arbol.

Oliver y su Calzón chinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora