El Poder Elemental

Artemisa 3/3

Ella se acerca a Éteryl y le susurra algo al oído, ella asiente, agarra un cuchillo, saca un anillo que no logro ver bien y se acerca a Max. Intento hablar y moverme, pero es inútil.

-Tranquila, no le hará nada. –dice Artemisa. Éteryl corta un mechón de su cabello y lo deja caer al suelo envuelto al anillo, lo miro bien y es de Mike. ¿Qué intenta hacer? Pienso. Se corta un poco la mano y deja caer sangre en los objetos. Lo está trayendo a la vida, si eso sucede... debe haber un equilibrio, una vida por una vida. Intento controlar el agua, pero no puedo, cierro los ojos y me concentro. - ¿Qué demonios...? –abro los ojos y el anillo junto al mechón de cabello están lejos de Éteryl por un tentáculo de agua, sonrío. Artemisa me mira enojada. –Detente. –niego. –Como quieras. –se acerca a Melissa y me intento soltar, ella me mira y chasquea sus dedos, ahora puedo hablar.

-No le hagas nada.

-Deja de hacer lo que estás haciendo. –hago que el agua baje y Éteryl se acerca a los objetos.

-Éteryl...-digo. –No lo hagas, sabes que... sabes que traerías un desequilibrio y...

-Mejor cállate. –comienza a hacer el conjuro, Artemisa agarra a Tobías del cuello y lo acerca a donde está Éteryl, Melissa se acerca y la detiene con un chasquido.

-Si entregas su vida desequilibrarás el balance del universo. –Artemisa sonríe triunfante.

-¿A quién crees que le daré su poder? –me intento soltar desesperadamente.

-No lo hagas...

-Guarda silencio y observa. –me calla. Deja caer a Tobías a un lado, Éteryl vuelve su mano negruzca sin dejar de pronunciar el conjuro e introduce su mano en el pecho de Tobías sacando su poder, la tierra comienza a temblar y Tobías se queda inmóvil, poco a poco Mike va volviendo. En el momento en que su cuerpo está a un lado del de Tobías, Éteryl introduce el poder de Tobías en el de Mike y la tierra deja de temblar, Michael se sienta bruscamente tosiendo y Éteryl cae al suelo inconsciente, niego sollozando. No, no... no Tobi...

-¿Dónde...? ¿Dónde estoy? –mira a Artemisa y luego me mira a mí, se levanta y se acerca a mí. –Yo te conozco. –coloca su mano en mi mejilla y se siente cálido. Me limpia las lágrimas. - ¿Por qué lloras? –al traer a alguien de la muerte, fragmentos de su memoria se borran, ni la misma Éteryl puede predecir como volverán, a veces vuelven sin memoria como en el caso de Michael.

-Solo está sentimental. –dice Artemisa, un huracán se aproxima y miramos a Melissa que tiene los ojos blancos y su pelo comienza a levitar, la mitad de su cuerpo es transparente y en vez de pies, solo es un remolino de aire.

-Pagarás por lo que le hiciste a Tobías. –dice enojada.

-Solo es un pequeño sacrificio para algo más grande. –dice tranquilamente Artemisa.

-Yo lo amaba. –dice Melissa entre llanto.

-Cálmate. –ella chasquea los dedos pero nada sucede.

-Pagarás por lo que le hiciste. –Melissa se acerca a ella.

-Mi problema no es contigo. –dice y me mira. –Esta vez nos verás a nosotros amarnos. –se abre un portal y Max desaparece, me puedo mover y corro hacia ella. –Adiós. –desaparece con Éteryl.

-No. –digo enojada, Melissa se acerca a Tobías y lo abraza. –Maldición.

-¿Qué sucedió? –dice Michael y agarra mi mano, la quito.

-Tenemos que traer a Éteryl y hacer que traiga a Tobías de vuelta. –digo secamente.

-Pero...

-No, tú quédate alejado de esto. –digo y él asiente tristemente. –Mel...-me acerco y ella niega.

-No te acerques. –dice enojada y dolida.

-Está bien, pero tenemos que buscar a Éteryl y...

-¡No! ¡Ya no hay un "tenemos", Alexandra...! –solloza.

-Mel...

-¡Aléjate de nosotros! –me detengo. - ¡Está muerto por tú culpa!

-Yo no hice...

-¡Artemisa trajo a tú novio de regreso, bien, disfrútalo, yo me encargaré de buscar la forma de traerlo de vuelta, pero no te quiero ver a ti cerca, vete!

-Lo siento. –digo y salgo de ahí, comienzo a llorar mientras camino. –Hubiese... hubiese podido hacer algo más...

-Oye...oye...-me dice Michael. –Tranquila. –dice colocando sus manos en mis hombros. –Todo estará bien. –niego.

-Todo está mal, Tobías está muerto, Artemisa se llevó a Max y Mel... ella me odia. –digo sollozando y me abraza.

-Tranquila, prometo que todo estará bien, pero tenemos que salir de aquí ¿no? –asiento y lo miro.

-Sí.

-¿Cómo salimos de aquí? –me limpia las lágrimas.

-Llamando a Sandra. –me mira confundido y saco una carta de mi bolsillo, dejo caer una gota de agua y Sandra aparece.

-¿Qué sucedió? –mira a Michael. –Alexa... dime ¿qué sucedió?

-Te lo diré, pero necesito que me lleves a Uisce.

-Está bien. –chasquea ambos dedos y estamos fuera de Uisce. –Ahora dime que sucedió.

-Espera aquí. –le digo a Michael y él asiente, Sandra y yo nos alejamos un poco y comienzo a contarle todo.

-¿Tobi? –dice con lágrimas en los ojos y asiento tristemente.

-Por eso necesito que cuides a Melissa, ella debe estar por llamarte. –asiente.

-¿Tú que harás?

-Buscaré unas cosas, pero tengo que hacerlo sola.

-Alexa...-niego. –Bien ¿qué cosas?

-Es... es algo que se me vino a la mente mientras Artemisa estaba en nuestras cabezas.

-¿Cuáles? –dice curiosa.

-¿Para qué quieres saber?

-Para corroborar algo. –suspiro.

-Son unas... creo que son unos anillos, sé que es algo circular. –ella sonríe. - ¿Qué?

-Los anillos de tus antepasados.

-Ya veo.

-¿Los tienes?

-Solo uno, está guardado en las cosas de mi madre.

-¿Y el otro?

-En Frait. –asiente. –Ahora...

-Me llaman. –asiento.

-Cuídala.

-Tranquila. –sonríe y desaparece. Me volteo y Michael está observando Uisce.

-¿Por qué tuvo que suceder? –suspiro y camino. –Vamos.

-Bien. –camina tras de mí.