¿A dónde vas?

2 • Su esencia

゜・。。・゜・。。・゜・。。・゜

— "¿Kah?"

— "¿No me dí a entender bien? Acabo de pedirle que diseñe un robot para mí". — Aquel demonio serpenteaba su lengua, como si pudiese oler el miedo del inexperto becario, y lo saboreaba. — "¿Qué parte no fue clara?"

— "L-lo entendí perfectamente, mi lord…" — El joven Flug no podía controlar el temblor de sus nerviosas manos, e inclusive se notaba como sudaba a chorros. — "Pero… ¿Está seguro? Apenas entré hace un par de meses y…"

— "Joven Flug, ¿Acaso desea ser un mentecato sin sueldo toda su vida? Si se lo estoy pidiendo, es para que me pruebe de lo que realmente es capaz".

Le sonrió con aquella sonrisa perversa tan suya. Esa sonrisa que ocultaba los planes siniestros que maquilaba su retorcida mente. Cuando Black Hat daba una orden es porque ya había calculado todos los posibles resultados, y cuando sonreía de esa manera era porque no importaba lo que pasara, al final todo estaría a su favor y a su gusto.

— "Pero mi adorado Lord…" — Interrumpió aquel científico de acento ruso, claramente molesto por la atención que estaba recibiendo el novato. — "El becario ya tiene muchas cosas que hacer en el laboratorio. Ponerlo a hacer otra cosa solo nos retrasaría con el itinerario".

— "Descuide, Profesor". — Contestó Flug, más con resignación que con seguridad, mientras checaba su lista de pendientes. Ya se había acostumbrado a trabajar bajo presión, y su naturaleza sicofante lo llevaba a aceptar con gusto cualquier cosa que se le pidiese. — "Puedo terminar mis pendientes y hacer el encargo de Lord Black Hat sin problemas ni retrasos".

— "Ya lo escuchó, Profesor". — Sonrío el demonio, mostrando sus afilados dientes verdosos, salivando de manera amenazante, como una advertencia de no volver a cuestionar sus órdenes. — "El joven puede con la carga de trabajo, y aunque no pudiese, simplemente lo despido y ya… Pero no hay necesidad de eso, ¿O si?"

Le dedicó la misma sonrisa a Flug, y este como respuesta tragó saliva, intentando de no demostrar el miedo que le provocaba la idea.

Verán, cuando Black Hat habla de "despedir", no se refiere a que empaques tus cosas y te vayas. No, si así fuese la organización tendría grandes fugas de información. Cuando Black Hat decía "despedirte", en realidad habla de asesinarte, eliminarte, borrar tu existencia de este mundo. Y Flug aún no tenía deseos de morir.

— "Ya que nos entendimos y que todos saben cuáles son sus tareas de la semana, larguense de mi oficina AHORA".

Sin decir nada más, todos los empleados se retiraron no sin antes dirigirle una mirada de desprecio al becario.

— "Joven Flugslys, usted se queda para hablar más sobre lo que quiero que diseñe para mí".

Flug esperó a que la oficina quedará vacía para acercarse tímidamente al escritorio de Lord Black Hat.

— "¿Para qué soy bueno, amo?"

— "Siéntese, joven. Yo no muerdo…" — Black Hat le hizo un ademán, señalando la silla frente a él, y sonrió nuevamente de manera amenazante. — "... A menos que me provoque…"

Flug apretó en un puño sus manos para evitar temblar de miedo y rápidamente se sentó frente al escritorio. Era la primera vez que estaba cerca de su jefe, sobraba decir que los sentimientos de miedo, ansiedad, nervios y curiosidad se mezclaban y revolvían dentro de su estómago.

— "Esto no lo saben más que muy pocas personas dentro de esta organización, pero hace un par de noches alguien intentó infiltrarse en mi mansión, y por poco lo logra, de no ser por el sistema de seguridad". — Explicó Black Hat con completa seriedad. Flug no pudo evitar mirarlo sorprendido ante tal confesión. — "Personalmente no me importa, meterse conmigo es como un acto suicida, una muerte segura; sin embargo, no podemos permitir que el personal de seguridad haga el ridículo de nuevo. Eso dejaría una mala imagen en la organización".