Perfectos Derechos

SOLO VIVIRÉ PARA AMARTE

AÑOS ATRÁS

La friolenta noche llegó con un aire infernal, fuertes ráfagas estremecían sin parar toda la arboleda. T/N se apartó de la ventana, caminó hasta su clóset y tomó el suéter más grueso que encontró. Mientras se vestía, sus pensamientos se trasladaron al día que recibió tal obsequio de Taehyung; aquel abrigo fue unos de los muchos regalos que él compró para ella cuando su relación estaba bien. Con el tiempo las circunstancias cambiaron, y aquellos regalos se convirtieron en penosos recuerdos. Recuerdos que provocaban mil lágrimas. Pero ella no perdía la esperanza. Aguardaba con anhelo el día en que Taehyung la volviera a amar como antes.

Secó su rostro y subió a la cama. Ahora le quedaba esperar con paciencia a que su esposo llegase. Al ir abrigándose entre los cobertores, una que otra lágrima emergía de sus ojos; ella dejó de limpiarlas permitiendo que estas cayeran. Ya se había vuelto una costumbre ir a dormir llorando; los recuerdos del pasado escapaban, sólo salían a causar daño interior.

Es así que conforme las horas iban pasando, el sueño se apoderaba más de ella. T/N parpadeaba fuerte para quitar el molesto cansancio de sus ojos; no se dejaría vencer.

De repente, en la entrada principal se escucha un violento estruendo. De inmediato, los nervios de T/N se disparan. Habiéndole dado un vistazo a su celular (3:25 a. m.), se cubrió por completo bajo los cálidas mantas.

El pánico se adentraba más en ella cada que los horrendos ruidos iban acercándose. Las pisadas que se escuchaban por las escaleras se volvían más sonoras.

Taehyung: ¡T/N!

Ella empezó a sollozar; su mente suplicaba sin parar y su corazón latía a prisa. La puerta se abrió. T/N tapó su boca para callar sus sollozos, sabía cuán peligroso era si él llegaba a escucharla. Sin embargo, el miedo que sentía era inmanejable; sollozó leve. Rápidamente Taehyung se avalanzó sobre la cama; T/N pegó un grito. Lentamente, ella descubrió su rostro y, vio a su esposo derribado por el sueño. Al instante, su olfato percibió un olor característico: Licor. Así dedujo la embriaguez de este. T/N respiró aliviada.

T/N: ¿Taehyung?

Intentaba quitarlo de su encima, él era muy pesado. En los intentos por acomodarlo a un costado, Taehyung despertó plantando su mirada directo en ella.

T/N: Hola, mi amor.

Él la observaba en silencio. La belleza de T/N siempre lo hipnotizaba: sus ojos color miel se convertían en un hechizo silencioso, y su boca en una adictiva tentación. Taehyung no hallaba palabras para responder. Una agradable sonrisa fue a lo que atinó.

T/N: ¿Por qué has llegado a esta hora? Es muy tarde. ¿En dónde estabas?

Aquellas preguntas estaban llenas de ternura; él rió leve, amaba cuando ella lo controlaba.

Taehyung: Estuve con Jin, no pasa nada...

T/N: Le llamaré para confirmar tu historia, ¿eh?

Taehyung: Lindura...

T/N: Nada de lindura; a dormir.

Taehyung: No quiero dormir.

T/N: ¿Tienes hambre?

Taehyung: Ajá...

T/N: Bajaré a prepararte comida.

Taehyung: No tengo hambre de eso. "Estoy hambriento de ti"...

En seguida, él se apresuró a besarla. T/N correspondía cada beso que recibía, no le importaba el sabor amargo que probaba en los labios de Taehyung. Ella adoraba saber que su esposo la tocaría nuevamente.