~Capitulo #137~

159 15 0
                                    

La fiesta termino y todos quedamos exhaustos.

Llegamos a la que sería nuestra nueva casa de casados.

Mauricio y yo habíamos decidido dormir en habitaciones separadas.

–Me iré a dormir a mi habitación.-Dijo.

–No, quédate conmigo.

–¿En serio?

–Si.

–Pero creí que me odiabas por haber causado que encerraran a Benjamin.

–Mauricio tú no tienes la culpa de nada, Benjamin provoco su destino, quiero que olvidemos todo eso y que sigamos adelante.

–Anett, yo en serio te quiero, eres una excelente mujer, yo solo quiero hacerte feliz si tú me lo permites haré que olvides todo lo malo que te ha ocurrido.

–Es lo que quiero olvidarme de todo lo malo que ha ocurrido en mi vida, tú tienes mucha suerte Mau, tienes a tu mamá contigo, sabes que yo amaría tener a mi mamá conmigo, saber que ella está aquí para mi pero lo único que sé es que está en un hospital en coma y que lleva años así, aún no sé si algún día despertará.

–Veras que si Anett.

–Eso espero, bueno, vamos a dormir porque estoy exhausta.-Dije y ambos nos acostamos.

Tal vez le di una oportunidad a Mauricio pero mi corazón aún le pertenecía a Benjamin.

(...)

Pasó un mes desde la boda, todo iba muy bien, desde que Mauricio y yo nos casamos no ha pasado nada entre nosotros.

Decidimos salir a unas vacaciones a la playa junto a su familia.

Todos la pasamos muy bien, reímos hasta que nuestro estómago dolía.

Me detuve unos minutos y observé a Mauricio riendo, su sonrisa era muy hermosa.

Corrí a abrazarlo y lo besé.

–Te amo.-Le Susurré en el oído.

–Te amo más hermosa.-Susurró también en mi oído.

Yo sonreí.

El celular de la señora Selena sonó.

Su rostro se tornó pálido.

Le susurró algo a Mauricio en el oído.

–Vámonos ya.-Dijo mientras tomaba todas nuestras cosas.

–¿Qué? ¿Por qué?

–¡Solo sube al coche Anett!

–¡¿Mauricio que sucede?!

–¡Te dije que subas al coche! ¡¿Eres tonta?!

Solo lo mire, me subí al coche y azote la puerta lo más fuerte que pude.

Bajamos del coche a la casa.

–Anett.-Me habló.

Lo ignoré por completo y subí hasta la habitación.

Me tiré sobre la cama, comencé a llorar.

Toco la puerta pero no abrí.

–Amor abre.-Dijo.

No respondí.

Escuche que se retiró, a los minutos escuché que tocaba la guitarra. Me levante de la cama y me coloque en la puerta.

Comenzó a cantar.

Al terminar de cantar abrí la puerta.

Lo abrace y el hizo lo mismo.

–Perdón por haberte gritado.-Dijo.

–Solo quiero una explicación.

–Escucha Anett esto no es fácil, pero hay una mujer que hace tiempo fue mi amiga, salí con ella, pero ella se enamoró de mi y desde hace unos días mi madre recibe llamadas de números desconocidos y dicen que me van a matar a mi o a alguna persona que yo quiera, no sé cómo se entero de ti y ahora quiere hacerte daño.

–¿Es en serio?

–Si, pero yo no permitiré que nada malo te suceda.

–¿Sabe donde vivimos?

–No, solo conocía la dirección de donde antes vivíamos.

–Yo sé protegerme, no te preocupes, crecí rodeada de hermanos.

Él sonrió.

Nuestros labios se juntaron, nos entregamos en cuerpo y alma.

Era hermoso despertar y verlo a mi lado, ver su lindo rostro.

Es algo tan maravilloso como una simple persona te puede hacer tan feliz con tan solo sentir su presencia.

¡No Soy un Chico!©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora