Primer encuentro...

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Itachi:

Desde que dejé la aldea he vivido con el único propósito de esperar el momento que Sasuke venga reclamando venganza y acercarme lo suficiente para darle todo mi poder, sólo para eso me he mantenido vivo, realmente no tengo otra cosa por la cuál vivir... No tengo nada... Sólo Akatsuki...

Hace unas semanas supe que Sasuke presentaría los exámenes chunnin, me las arreglé para vigilarlo durante ese proceso, conocí a su equipo, uno resultó ser el jinchuriki del Kyuubi y... Una niña de cabello rosa... Llamó mi atención inmediatamente después de verla, no sé en qué estaba pensando realmente, ella es una niña y yo... Yo ya estoy en edad para buscar una compañera... No, no! Debo relajarme, pensar fríamente, concentrarme en Sasuke.

Gracias a mis distracciones por pensar en esa niña, Orochimaru implantó un sello de maldición en Sasuke, si tan solo hubiera puesto atención esto no habría pasado, aquel sello comenzaba a hacerle efecto y yo no me podía acercar para ayudarlo, no, no podría arruinar el plan de vida.

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Una mañana sorprendieron al equipo de mi hermano, para su mala suerte solo la pelirrosa estaba despierta, quería intervenir pero si lo hacía... Cabía la posibilidad de que empeorara las cosas.
No aguanté más, ví como la golpeaban, me dio un coraje terrible, ¿Cómo podría ayudarla sin que los demás se percaten de mi presencia?
Ví como ella fue lanzada hacia la dirección donde yo me encontraba, la tomé entre mis brazos, estaba muy débil, asustada... Ella temblaba al verme... Sentí mi corazón latir mas fuerte y rápido, me acerqué a su cuello para sentir su aroma, su piel... Su cabello recién cortado... La pelirrosa seguía temblando, asustada por verme, yo solo disfrutaba su embriagador aroma.
Sentí que venían a buscarla, me alejé de ella un poco para verla a los ojos, le sonreí para calmarla un poco pero creo que solo logré asustarla más, le dí un suave toque en su frente con mis dedos a fin de pasarle gran cantidad de mi chakra, ella lo sintió, su miedo se fué, ahora me veía asombrada.

- vé, protege a tu equipo... - dije animándola.

Ella me dedicó una pequeña sonrisa y regresó a la pelea, para su suerte Sasuke acababa de despertar, noté como hablaba de ella, como si la quisiera, hablaba sobre que era muy importante para él y no permitiría que nadie la dañara, me alegré por ellos pero a la vez sentí una pequeña punzada en el pecho, no tenía idea de porque me había sentido así, pero ese sentimiento sí que me confundía...

Pasaron los días, los exámenes terminaron, yo por mi parte recibí información sobre que algunos peones de Orochimaru irían a convencer a Sasuke para unirse a él... Yo sabía que sólo lo quería para ser utilizado como su nuevo cuerpo ya que hace unos años él tenía las mismas intensiones conmigo, era claro que si yo no cedía, trataría de hacer caer a mi hermano...
Al anochecer fuí a asegurarme que no lo hiciera, lo ví cerca de la entrada de la aldea, me las arreglé para acercarme más a él, noté como aquella niña de ojos jade trataba de detenerlo, se notaba que lo quería... Otra vez sentí una punzada en mi pecho, aún más fuerte que la última vez... La veía llorando... Sufriendo por Sasuke... Mi hermano al final solo se limitó a posicionarse detrás de ella, para poder así noquearla de un golpe, apreté mis dientes con fuerza, ¿Cómo es posible que esa delicada niña esté enamorada de un patán que solo la rechaza?... Me dí cuenta que esa fue la primera vez que no ví a Sasuke como un hermano, en vez de detenerlo corrí hacia donde se encontraba la pelirrosa, la había dejado ahí en el suelo, a su suerte...

La tomé entre mis brazos y me la llevé hasta la banca que se encontraba cerca, la abracé, le dí un beso en la mejilla, decidí que a partir de ese momento yo iba a cuidar de ella.

No entendía esta necesidad de estar a su lado, no quise dejarla sola, en toda la noche no dejé de abrazarla, de tenerla cerca de mí, me quité la capa para protegerla del frío. Al verla con la capa puesta supe que era lo que tenía que hacer... La llevaré conmigo... Pero antes... Debo planearlo bien...

Estocolmo (ItaSaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora