Niall se posó cerca de mi panzita y comenzó a hablarle al bebé.
- Hola pequeña. –acarició mi estomago- ¿Cómo estás? Sé que no me conoces, y nunca has escuchado mi voz pero quiero presentarme. Me llamo Niall, aunque obviamente no me puedes ver, soy tu papá, quiero que salgas luego de ahí, para poder regalonearte darte miles de besitos y regalonearte aun mas, y que tu mamá se ponga celosa. –lo mire entre risas- espero ser un buen papá para ti, que me quieras mucho, que te sientes en mis piernas, que me pidas dulces, o que me esperes cuando llegue del trabajo cuando seas más grande… -yo sonreí y Niall puso su oído en mi estomago-
- ¿Esperas que ella te responda? –le pregunté a Niall entre risas-
- No –rio- pensaba que quizás se podía escuchar algo, y solo se escuchan líquidos… -rio-
- Obvio Mi amor ¿Qué otra cosa esperabas que se escuchara? –Comencé a reír-
- Esto parece mentira. –Niall se levantó y se puso a la alta de mi rostro- nunca pensé que te volvería a ver.
- ¿Tu crees que yo no pensé eso? Pero lo que no entiendo es cómo te llamaron.
- No sé, me llamaron desde tu celular, todas las veces que llame que créeme que fueron más de mil, salía apagado.
- Si, es que deje el celular apagado para siempre, ya que imagine que recibiría muchas llamadas y no me dignaría en contestarlas.
- Fuiste una tonta. –Me miro y yo lo mire enojada- pero oh por dios, te amo. –beso suavemente mis labios y luego volvía a bajar para hablar con la bebé-
- ¿Cómo te pondremos de nombre?
- Aun no lo sé, tenía ideas… pero no sé.
- Yo le pondría Zoey. –Me sonrió-
- ¿Te gusta ese nombre?
- Me encanta –sonrió-
- Entonces dile hola a la pequeña Zoey. –Le sonreí a Niall-
-
Hola pequeña Zoey…. –Dijo Niall acariciando la parte superior de mi estomago en forma de pelota de futbol
- Cuando te enteraste que serías papá ¿Qué pensaste?
- Que la mujer de mi vida, sería la madre de mi hija. –me sonrió y besó delicadamente mi frente- y bueno también estaba muy triste porque no podría vivir todo lo que viviste estos cinco meses y mírate, ya tienes seis meses. –me observo- pero ahora solo quiero estar contigo y regalonearte.
- Nunca logre olvidar lo tierno, dedicado, y hermoso que eras. –Le sonreí-
- Oye, tampoco fueron años. –Me miro chistoso- solo fueron cinco meses…. En realidad si, parecieron años. –rio-
-Amor… -le sonreí-
- Oh por dios, hace tanto tiempo que no me decías “amor” –pronunció con sus rosados labios- pero ahora hay un problema. –Pronunció-
- ¿Qué problema?
- Ya no te podré decir bebé –me miro preocupado- ahora tengo otra bebé. –Tocó mi vientre-
- Pero no. –Dije enojada- yo tengo que ser para siempre tu bebé.
- Ya ya –me miro- bueno… por siempre mi Bebé. –Besó tiernamente mis labios- oh seremos papis. –Río-
- Amor, tengo sueño. –Lo mire-
- Pues yo también pero no quiero dormir, porque tengo miedo de que esto sea un sueño.
- Pensaba lo mismo. –Sonreí tímida- pero ven… -abrí la cama y me acomodé en ella, Niall se recostó atrás mío y se posó junto a mi- ¿Me abrazas? –Sonreí- ¿Me haces cariño? E incluso ¿Me cantas una canción?
- ¿Algo más? –Rio entre risas- yo feliz hago todo eso. –Me abrazo por la espalda y posó su mano en mi abdomen acariciándolo, así me comenzó a cantar- te amo –susurró-
Me quedé dormida, y desperté en medio de la noche por una fuerte punzada en mi abdomen.
- Ah... –me quejé- me duele.
- ¿Qué pasó amor? –Prendía la luz rápidamente y se posó junto a mi muy asustado-
- No sé, me duele mucho. –Dije quejándome nuevamente-
- ¿Vamos al médico o algo?
- No amor –lo mire- hacerme cariño y se me pasa. –el se poso junto a mí, y con sus dos manos comenzó a acariciar mi vientre- ¿Por qué te dolerá?
- No sé, normalmente cuando me acuesto a dormir me duele. –Lo miré- pero tranquilo, el doctor dice que es por la posición del bebé –le sonreí- ¿me traes un vasito de agua?
- Obvio -altero. Se paró corriendo y yo reí ante eso, estaba tan asustado y además estuvo a punto de caerse con algo que había en el suelo, en unos segundos llegó a mi habitación con el vaso más grande de agua que encontró-
- ¿Por qué no me trajiste un balde de agua mejor? –
Dije molestándolo y tomé el gran vaso para bebérmelo entero-
- Si, creo que traerte el balde de agua ni hubiera sido mala idea. –nos miramos riendo y el se recostó nuevamente junto a mí y continuo con los cariños que me estaba haciendo anteriormente -
Así inesperadamente me quedé dormida, al otro día desperté, Niall aún dormía, yo lo observe creo que la sonrisa tonta de mi rostro no me la quitaba nadie, era lindo despertar junto al amor de mi vida nuevamente.-
Acaricié su hermoso cabello rubio y luego besé la fisura de sus labio, el no sintió nada y luego me levante, me dirigí a la cocina ya que desde que estoy embarazada tengo hambre a cada rato, al mirar habían muchas cajas, y no había casi nada en el departamento, así note que las chicas ya se estaban preparando para la mudanza, había una nota pegada en la congeladora al verla decía
“Salimos a entregar la casa, hoy mismo nos vamos a tu ciudad, espérenos para el almuerzo” –yo sonreí para mí misma y saque tocino y huevos del refrigerador para prepararme, pero unas manos se enredaron alrededor de mi cintura, y un mentón se acomodó en mi hombro…
- Yo también quiero eso. –musitó Niall y yo me voltio para ver su bello rostro mañanero -
- Bueno amor. –Le di un pequeño besito en sus labios- yo te preparo un poquito.
- Yo te ayudo, no tienes porque trabajar o hacer cosas, si estás embarazada.
- Exagerado. –Dije entre risas- si puedo preparar un desayuno, tú espérame en la camita –reí- para que comamos ahí.
- Está bien bebé. –dijo entre risas y se fue corriendo hasta la habitación, yo me quedé preparando otros huevos y otro poco de tocino. Y al terminar con una bandeja me dirigí a la habitación, y puse la comida sobre la cama-
- Eso se ve rico. –Contesto- ¿al bebé le gustara?
- Supongo, por algo desperté con ganas de comer eso. –Dije entre risas-
- ¿Un antojo?
- Puede ser sonreí-
- Oh yo no he podido satisfacer tus antojos. –Dijo Niall triste-
- No he tenido algún antojo loco. –le dije sonriente-
- Oh menos mal, siempre pensaba. “Oh pobrecita, no tendrá quien vaya a comprar a las 5 de la mañana algo que se le antoje de comer”
- Que eres tierno. –besé la punta de su nariz- ahora a comer bebé…
Comimos mucho, en realidad había hecho como 5 huevos y mucho tocino, y en eso llegaron las chicas
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Quiero que ya llegue Zoey *o*
