Un lazo forjado por los traumas psicológicos de un asesino buscado por todas las naciones y una Kunoichi de elite llamada anko mitarashi, el cual, se ve fortalecido por situaciones enfermas y perturbadas pero enteramente mutuas.
La incertidumbre de...
Cuando le puse la marca de maldición a anko tenía dos objetivos. El primero: comprobar su resistencia y la mortalidad ese sello siendo una más de mis sujetos de prueba. Segundo: tener un control absoluto sobre ella para poder manipularla a mi antojo, y al parecer ha funcionado mejor de lo que esperaba.
Sus traumas, y los recuerdos que aún conserva de mí no la han dejado vivir en paz todos estos años, y eso, he de admitirlo, no fue ninguna casualidad.
Después de arrastrarla durante todos estos años hacia la incertidumbre de su pasado, y de revivir todos y cada uno de sus miedos a través de la marca de maldición, al final he conseguido que terminara viniendo hacia mi.
Como oveja al matadero.
Quien iba a pensar que volver a tenerla en mis manos sería tan sencillo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aunque es evidente que tomó una decisión precipitada...
Por más desesperada que estuviera, jamás creí que sería tan estúpida como para venir aquí ella sola.
¿Qué creía? ¿Qué la liberaría del sello y la dejaría ir tan fácilmente?
Yo no hago favores a cambio de nada.
Y mucho menos a quién es de mi propiedad.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Finalmente anko siempre ha sido mía... y así seguirá siendo... hasta el fin de sus días.
Aún cuando su mente no recuerde lo que sucedió, su cuerpo sabe perfectamente que es a mí a quien pertenece.
Así que su única utilidad en la vida siempre será la de servirme, obedecerme, y someterse a mí cada que se lo ordene.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
