Mi bello secreto

4

Pov.Silver

- ¿¡Que!? -exclame sorprendido.

- El Papá de Nashi es un demonio -repitió la tía Lucy con tranquilidad.

- ... ¿Es verdad? -dije mirando a Nashi aun sorprendido.

- ¿Quieres pruebas? - me pregunto seria.

Sólo atine a asentir con la cabeza varias veces como un idiota.

Nashi se levantó del sillón y se puso en el centro de la sala, en eso siento como un poder mágico va en aumento, este provenía de Nashi.

A Nashi le comienzan a salir tatuajes de color negro en ambos brazos, estos cubrían sus manos y dedos, le llegaban hasta ambos costados de la cara, sus ojos cambiaron de color, ahora eran de un rojo intenso y su cabello se había oscurecido un poco pasando de un rosa fuerte a magenta; lo que me impresionó mucho fue ver que le aparecieron cuernos a ambos lados de la cabeza.

Estaba impresionado, se veía como alguien diferente pero a la vez no, era extraño, ni siquiera sé que estoy pensando, yo seguía observándola cuando de repente me comenzó a doler la cabeza y tenía una puntada muy fuerte en el estómago.

Se des trasforma - ¿Silver que te sucede? -me pregunto preocupada.

No podía decir nada, cerré los ojos y caí de rodillas en el suelo. Rápidamente supe que tenía un "ataque de hambre", pero mierda...este ataque es más fuerte que otros.

- ¡Silver! -me hablaba Nashi asustada.

- Silver ¿qué tienes? -me pregunto la tía Lucy.

- C-cabe-za y h-hambre -dije a duras penas.

Sin saber porque, entre en modo Devil slayer a la vez que me tome la cabeza con fuerza por el dolor - ¡Ahg! ¡Maldición! -me quejaba.

- Hija aléjate un poco -le escuche decir a la tía Lucy.

- P-pero... -

- Sólo quédate quieta -ordeno.

Sentí que alguien me hacía levantar la cabeza con mucha fuerza.

Silver, abre la boca -me ordenó y no le hice caso debido al dolor- Por favor, estoy segura que esto te ayudara -me dijo la tía Lucy.

La obedecí inmediatamente, al abrir mi boca sentí como entraba algo líquido que comencé a beber inconscientemente, en un principio me sentí raro pero luego de unos segundos lo sentí...delicioso.

Ni idea de cuánto estuve tomando aquel manjar, pero el ataque se detuvo y pude desactivar mi magia, me sentía mejor que nunca, abrí los ojos y encontré a la tía Lucy hincada frente a mí; en su mano derecha sostenía un frasco de cristal rojo oscuro.

- ¿Mejor? -me pregunto ella mientras dejaba el frasco a un lado.

- Si... -dije un poco aturdido.

- Que bueno - se levanta- Hija ya puedes moverte -dijo como si nada hubiera pasado.

Yo seguía en el piso, busque a Nashi con la mirada y al verla me encontré con una curiosa imagen, Nashi tenía los ojos como platos la boca un poco abierta y algo pálida, su mirada de impacto se turnaba entre yo y su madre.

- Parece que viste un fantasma - le dije con burla, con la intención de que reaccionara.

- Nashi, cierra la boca que te entrarán moscas -le dijo mientras ella misma se la cerraba.

Parpadeo un par de veces- ¿Mamá?... -

- ¿Sí? -

- ¡¿Porque demonios le diste "eso"?! -dijo ¿asustada?