𝚃𝚞𝚜 𝚜𝚞𝚜𝚞𝚛𝚛𝚘𝚜 𝚜𝚘𝚗 𝚖𝚒 𝚟𝚒𝚍𝚊 || [En Pausa]

- ¿Podré hoy? -

— ¡Jack! ¡A desayunar! – gritó desde la cocina.

Había pasado apenas dos días desde que ambos están en esa cabaña, Jack se estaba desesperando cada momento más, sus pensamientos los carcomian por dentro. Algo dentro de su mente le decía que tenía que hacerlo lo antes posible, no porque alguien le pudiera ganar... Por dios, ¿Ganar? Nadie es un premio que se gana o se pierde, lo que quería decir es "perder", posiblemente alguien más se le declararía si él no lo hacía.

Se removió en la cama, su cara estaba siendo restregada contra una almohada, le era imposible en estos momentos pararse, aquel chico apenas y podía moverse, sus pensamientos al parecer eran demasiado pesados como para negarle el levantarse.

— ¡Jack! ¡No te hagas el dormido! – volvió a gritar ahora un poco más alto.

Volvió a removerse en la cama, con demasiado esfuerzo y una mueca en su rostro se levantó de la cama. Con un andar flojo se dirigió a la puerta que se encontraba abierta para salir de la habitación, bajo de las escaleras igual de aquella manera. Al estar en la planta baja pudo percibir un olor que de inmediato lo cautivo, se dirigió a la cocina ahora con un andar más calmado, entro encontrándose con un plato en una mesa de madera, al ver el contenido del plato pudo notar que era páncreas ¡Y cosido! Sonrió ante tal comida, hace tiempo no comía algo cosido y no era porque no me gustase, era simplemente que cuando tenía hambre no esperaba a coserlo y se lo comía crudo.

— ¿De dónde lo sacaste? – se sentó en una silla que estaba enfrente de su plato.

— ¿Tengo que decírtelo? – arqueo una de sus cejas con una sonrisa divertida.

— Tengo curiosidad – tomo con una de sus manos su comida y le pego un gran mordisco.

— Pues te quedarás con la duda – dejo todo lo que estaba haciendo y puso los platos y trastes que había utilizado en el fregadero, se recargo en el mismo teniendo cuidado de no golpearse en la cabeza con la estantería, posó su mirada en Jack quien comía de una manera algo graciosa a su parecer y, algo tierna – ¿Te gustó? – asintió a su pregunta, al parecer no hablaría hasta terminar de comer.

Laughing estaba comiendo algo de chocolate mientras esperaba a que Jack terminará su desayuno, era algo gracioso verlo de esa forma, normalmente tomaba su comida y se iba a su cuarto pero estas últimas semanas había estado comiendo con los demás o se iba a la sala en compañía de otros y mientras comían hablaban un poco.

Ambos estaban en un silencio bastante agradable, aunque de vez en cuando era interrumpido por las mordidas que daba Jack o al momento de masticar y degustar. No le molestaba en lo absoluto a Laughing, de hecho el también lo hacía para lograr molestarlo de alguna forma.

— Nunca había escuchado a alguien hacer tanto ruido por comer chocolate – comento en burla Jack, ya había acabado hace unos instantes de comer.

— Solo me gusta hacer ruido de vez en cuando – contesto con una sonrisa dejando notar sus afiliados dientes.

Los chicos rieron una última vez para después Jack dejará su plato en el fregadero y saliera de la cocina en dirección a la habitación, Laughing aprovecharía el día para descansar un poco para en la noche salir o entretenerse en alguna estupidez que luego se le ocurriría.

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Jack estaba otra vez tirado en la cama, su máscara por un lado de el y su cara en una almohada, se quería ahogar en ella, pero ya estaba muerto así que aquello no serviría de nada.

— ¿Qué debo hacer? – se removía incómodo, parecía algún problema amoroso de un típico adolescente que no aceptaba sus sentimientos hacia otra persona... Rayos, sí que le afectaba ver cosas con Sally – jeje... Es todo o nada, ¿No? – se dijo así mismo intentando darse ánimos.