𝚃𝚞𝚜 𝚜𝚞𝚜𝚞𝚛𝚛𝚘𝚜 𝚜𝚘𝚗 𝚖𝚒 𝚟𝚒𝚍𝚊 || [En Pausa]

- Feliz Navidad -

— ¡Ben! – llamó la niña emocionada, entrando sin avisar a la habitación del mencionado quien se alarmo dando un brinco en su cama, estaba jugando al Xbox – ¿Ya le hiciste tu carta a Santa? – pregunto con una sonrisa radiante.

El chico de cabellos rubios no sabía cómo responder a eso, claro que le gustaba creer en la magia pero no es como si no supiera que Santa no existe y son realmente los padres o en este caso los mayores de la casa que compran todos los presentes.

— Eh... Bueno Sally, este año no me porte del todo bien – dijo intentando crear una excusa lo suficientemente creíble – y no creo que Santa quiera traerme regalos – su vista se dirigió de nuevo a su videojuego que, para su sorpresa ya lo habían matado, soltó un bufido ante esto, ahora tendría que repetir toda la misión que con mil sacrificios había logrado pasar hasta este bendito punto.

— No seas bobo – dijo acercándose a él y subiéndose a su cama para quedar sentada a su lado – no hiciste nada malo este año – le sonrió.

*Quitando el hecho que algunos adolescentes quedaron con traumas, otros con heridas graves y unos cuantos muertos por mi culpa... Seh, no hice nada malo* pensó divertido sin apartar su vista del juego que había reiniciado, un "lo siento" salió de la boca de Ben pues en estos momentos el estaba ocupado en sus asuntos, la niña infló sus mejillas con enfado e intentando no hacer una escena sale de la habitación cerrando la puerta detrás de ella.

— Aunque, tampoco creo que Laughing o Slenderman quieran regalarme algo, no me conocen tan bien – se dijo a si mismo comenzando a quedarse serio y concentrando toda su atención al videojuego.

La niña bajo las escaleras claramente molesta, caminando desde la sala hasta la cocina donde se encontró con ClockWork cocinando, cosa que rara vez la veía hacer, tomo la silla más cercana que tuvo al alcance y se sentó en ella dejando caer un poco fuerte su cara contra la mesa llamando la atención de la mayor.

— Wow, ¿Estás bien pequeña? – preguntó sin soltar el tazón y la cuchara que traía en sus manos, parece que los está mezclando.

— Mmmmgggrr – se quejó bajito, levantó su mirada dejando su barbilla recargada en la mesa — Ben no quiere escribirle a Santa – hablo con un tono de tristeza, no podía creer que su amigo cambiara tanto de un año a otro.

— Déjalo, el se lo pierde – le contesto simple para volver a girarse y continuar cocinando lo... lo que sea que esté haciendo.

— ¿Tu pediste algo? – se enderezó en su lugar algo curiosa por la respuesta de la contraria.

— Tal vez libros, o que la persona que me gusta se de cuenta de mis sentimientos – soltó una risa burlona de sus propias palabras – nah, creo que me traerá un montón de libros porque la segunda es imposible – volvió a reír, pero su voz se escuchó algo desanimada al decirlo.

Sally al escucharla decir eso se le iluminaron sus brillantes ojos, *¡La ayudaré!* Se dijo a si misma para salir corriendo en dirección a su cuarto, tropezandose un momento con Jack quien casi cae por no haberla notado, "¡lo siento Jack!" Dijo antes de subir las escaleras.
*Bueno, al menos no me dijo nada por estar aquí* pensó, el llegar así sin avisar aún cuando su reto no terminaba era algo que pensó que molestaría a los de la casa, pero parece que a nadie le importa el hecho de que esté ahí, mejor dicho que estén ahí.

— Vaya... Tendré trabajo que hacer – dijo Laughing viendo las cartas que estaban en el árbol de color negro decorado con cuchillos y demás cosas.

— ¿Slenderman no te ayudará este año? – le pregunto acercándose a él desde atrás dándole un abrazo tierno y pegando su cabeza a la espalda del contrario.