Eyes on you; Lee Jooheon.

S I E T E

Para ser sincera no había podido concentrarme en el caminó de regreso a casa que tanto me gustaba observar cuando regresaba solá o acompañada de Jay o mis amigas ¿Cómo podría ignorar a Jooheon? Si tenerlo a unos cuantos centímetros me ponía inquieta, si su brazo estaba rozando con el mío cuando tomamos asiento y en mis adentros no podía dejar de gritar, era una locura que tan solo ese hecho me emocionara tanto.

Cuándo tomamos asiento nos quedamos en silencio, Jooheon no dijo ni una sola palabra pero su miradita hacia el frente y sus gestos eran suficiente. Mientras yo me encontraba realmente frustrada, no sabía de que hablarle, ya me había sentído así cuando me encontraba con él, pero en ese entonces si que quería tener una conversación mucho mas profunda con él algo mas detallado, aunque me parecía absurdo si le preguntaba "¿Crees en el espacio exterior?" O ésas preguntas que alguna vez formule para tener de que hablar, esos temas que no podías sacar con cualquiera. Pero no teníamos esa confianza, o al menos él no la tenía hacia a mí.

— Eh Jihei — inmediatamente me hizo voltear, lo observé por unos segundos pero su mirada intimidante era tan fuerte que al instante me gire — Nunca te has preguntado ¿Porqué le pusieron silla a las sillas? ¿No te ha pasado que te preguntas porqué le dieron ese nombre a algun objeto? — aunque su apariencia de chico malo era tan sólo eso, apariencia. Jooheon era cómo un bebé inocente.

Sonreí inconsciente mientras miraba por la ventana — Es uno de mis temas favoritos con Jay, un conflicto constante. — respondí.

— ¿Entonces has encontrado una respuesta? — interrogó nuevamente obervandome.

Negué — No, en realidad siempre termino peleando...creó que sí les hubieran dado otro nombre sería normal y seguiriamos preguntandonos lo mismo. — reí.

El me devolvió el gesto con una risilla haciendo que sus hoyuelos se marcarán, y asintió — Cierto.

Yo sonreí, no supe si por sus gestos, si por la corta conversación o porque seguía sentada a un lado de Lee Jooheon.

Si de algo tenia que sentirme avergonzada no era precisamente porque Jooheon ya sabía que me gustaba, si no porque antes nadie tenia idea y ahora todo el Instituto se había enterado y no de la manera que a mí me hubiera gustado, de repente todo estaba cambiando.
Las miradas de aquellas dos chicas que subieron al bus me hicieron sentir incómoda, aún mas cuándo murmuraron, yo no escuché que habían dicho pero Jooheon al parecer sí.

— No hagas caso, limitate a ignorar a la gente entrometida.

Al instante las dos chicas se giraron en dirección contraria con gesto de ofendidas.

— Yo, no se porque estas haciendo esto Jooheon. — dije, y es que en realidad no tenía idea del porque de un día a otro quiso defenderme.

El me observó nuevamente y sonrió — Observa Jihei, el mundo es muy cruel aún con cosas insignificantes cómo está, a pesar de que no te conozco no quiero verte desprotegida.

No sabía como sentirme en ese momento, por minutos creía que en el fondo le gustaba a Jooheon, pero era patético el hecho de pensarlo porque era mas que obvio que no ¿O porque me evitaba tanto el tema? Aunque yo, no me iba a dar por vencida tan fácilmente.

— ¿Tenías pensado hablarme alguna vez? — interrogo Jooheon con la mirada hacía el frente de nuevo, luego empalmo los labios.

Solté una pequeña risa nerviosa pero logre contestar — Bueno, en realidad antes de que todo el mundo se enterara de mi diario, no, hasta ese momento no lo consideré si no después, pues ya no tenía casó.

— Ya veo, yo, Jihei eres una linda niña y me gustaria protegerte porque algo me dice que debo hacerlo...seamos amigos. — concluyó con una sonrisa algo ¿tímida?