Capítulo 8.

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Dolor intenso de cabeza. Es lo único que siento ahora mismo. Abro los ojos y lo único que veo es una pequeña habitación verde con un pequeño escritorio, giro mi cabeza hacia arriba y veo que estoy tumbada en la litera de abajo, ¿Literas? ¿Dónde estoy? Desde luego esta no era mi habitación. Si algo me definía era ponerme siempre en la peor situación... Grito a ver si alguien me escucha. Sí, soy la reina del drama.

-¡AAAAAAAAAAAH! ¡SOCORRO!- Y empiezo a aporrear la puerta de la habitación. Seré idiota , si está abierta. La abrí y me condujo a un largo y estrecho pasillo. El cuál me llevó a una pequeña cocina. Entré con disimulo y vi a una mujer de unos cuarenta y pocos haciendo lo que pensé que era el desayuno.

-Esto... eh... buenas. -La mujer se sobresaltó. Pobrecilla, la habré asustado, debo de llevar unas pintas...

-Buenos días bonita. -Y me puso una sonrisa. Esa sonrisa falsa que le pones a tus padres cuándo sabes que has hecho algo mal pero que quieres dar la impresión de que no ha sido tan malo.

-¿Dónde estoy? -Me limité a decir en voz baja.

-Pregúntaselo a mi hijo. Por lo que me ha contado anoche no te encontrabas muy bien para volver a tu casa y el te trajo aquí. -¿Su hijo? Idara, ¿Pero qué has hecho? Pensé.

-¿Y dónde está... su hijo?

-En el salón, la tercera puerta a la derecha.

-Vale, gracias. -Y sonreí levemente, para ocultar el pequeño disgusto que llevaba encima. Algo me decía que lo que iba a ver ahora no me iba a gustar.

Me dirigí hacia el salón con desgana. Abrí la puerta y allí estaba. Lo que me temía.

-Buenos días dormilona.

-Idiota, ¿Por qué me trajiste a tu casa anoche?

-Ahhh, socorro.- Comenzó a imitarme con una voz ridícula.

-Idiota, yo no tengo esa voz.

-Idiota, yo no tengo esa voz.- Me imitó.

-Mira, déjalo. -Y me dispuse a salir del salón, cuando mi peor pesadilla, digo ese estúpido de Aarón me cogió del brazo.

-Shhhh, siéntate y te lo explico todo.- Y me puso una sonrisa cómplice. Giré la cara y me senté en un sofá.

-Venga, escupe. -Le dije totalmente borde.

-Pues mira todo empezó cuándo te bebiste... no sé, perdí la cuenta de los cubatas de garrafón que tomaste, que por lo visto te sentaron fatal y fuiste al aseo, allí te vi tambaleándote cuando te caíste al suelo dormida. Aunque creas que no, pasaba de dejarte allí con semejante pedo y con medio culo al aire. Sí, a causa de la caída se te levantó... el vestido. Y eso es todo, solo intenté ayudarte.- Asique me estaba observando, ¿Eh? , pensé.

-Ajá.

-¿Ajá? ¿No me das ni un besito por haberte sacado de tal apuro?

-¿Un besito? ¡Ni en sueños te beso yo a ti chaval!

-Venga... si lo estás deseando.- Y se colocó a mi lado en el sofá poniendo morritos y acercándose más y más a mí. Le empujé con todas mis fuerzas hacia el otro lado.

-¡Quita bicho!- Le solté en toda la cara.

-Seré un bicho, pero te mueres por besarme.

-¡Que dices! ¡No flipes! -Y rodé los ojos.

-Venga solo un besito.

-Mira, paso de...

-¡Chicos a desayunar! -Nos cortó su madre. Menos mal, si no Aarón se hubiera llevado una buena leche.

Nos dirigimos hacia la cocina y nos sentamos cada uno en una silla una enfrente de otra.

-Os he preparado tortitas, espero que os gusten.- Me asombraba que su madre tomara tan normal que una chica que no conocía de nada durmiera en su casa, por lo que algo me decía que Aarón solía hacerlo habitualmente. 

-Me encantan. -Intenté sonar lo más simpática posible que en ese momento, con el repelente de Aarón delante, me pude mostrar.

-Entonces, me alegro.-Y la señora me sonrió. Me pregunto como una mujer tan simpática como ella, había podido tener a tal idiota.

Comencé a comer mientras Aarón me observaba sin probar bocado.

-¿Qué pasa? ¿Tu ego no deja paso a la comida? -Le pregunté.

-No, lo que pasa es que le he puesto polvos urticantes a las tortitas mientras no mirabas.

De repente comencé a notar un picor irritable en la lengua.

-¡Que dices!- Es lo único que pude decir. Tuve que correr hacia el grifo más próximo y beber a trago limpio agua. ¡Me las iba a pagar! 

Quizás nada era lo que parecía...Where stories live. Discover now