Te Perdí (ZIAM)

03

Ese mismo día en la noche...

El moreno se encontraba en su habitación arreglándose. Estaba nervioso, esa noche cenaria con Liam, no sabia como sentirse, ya que no había una certeza de que todo saliera bien.

Luego de 3 horas se vistió, se arreglo, y espero a que Liam llegara.

5 minutos después escucho como tocaban la puerta.

Rápidamente se levanto y salio de su habitación para abrir la puerta.

Ahí estaba el, su Liam. Puntual como siempre.

—Hola.— Dijo el moreno.

—Hola, mi amor.— Respondió Liam.—¿Estas listo?.

—Y-yo s- si s-si es- toy listo.—Respondió nervioso el moreno por como le llamo Liam, al principio.

—Entonces vámonos.— Por cierto, te ves hermoso.–Dijo Liam.

Y era verdad su moreno se veía deslumbrante.

—Gracias. —Respondió sonrojado el moreno.—Tu también te ves muy bien.

—Vamos bebe. —Dijo Liam agarrándole su mano para entrelazarla con la de el. Había extrañado eso, sentir a Zayn.

Lo condujo a su coche. Y partieron al lugar. Iban en silencio, no uno incómodo al contrario se sentía bien.

*****

Minutos después llegaron al departamento de Liam.

—¿Vives aquí?–Pregunto el moreno confundido.—¿Que paso con la casa?

El castaño avergonzado respondió.

—No podía seguir viviendo en esa casa.

—¿Porque?

—Porque cada rincón me recordaba a ti, en especial ciertos lugares en donde hacíamos el amor.

El moreno se sonrojo ante lo dicho por Liam.

—Eres un tonto, Liam.

—Asi me quieres, bebe.

Entraron al lugar y el moreno se sorprendió por lo que vio, el espacio estaba decorado con rosas rojas por todos lados, sus favoritas.

Le encantaba.

—¿Tu hiciste esto, Liam?

—Si, bebe yo decore el lugar, ¿te gusta? – Preguntó el castaño.

—Si, es muy hermoso.

—Hay que tomar asiento, prepare tu comida favorita.

—¿Cocinaste para mi?
Pregunto el moreno feliz.

—Si, espero no haber perdido mi toque.

Media hora después ambos habían terminado de cenar y se venia lo mas importante.

—Liam...

—Zayn...

Hablaron los dos al mismo tiempo.

—Lo siento, tu primero bebe, es que estoy muy nervioso.
Dijo Liam.

—Yoo... No... Se por donde empezar.

—Antes que nada, te quiero pedir perdón.

—¿Porque?
Pregunto el moreno.

—Por todo, por ser un tonto, por dejarte ir, por no haber sido lo suficientemente valiente y aceptar lo que nos separo hace 4 años. Tenía miedo, de no ser un buen esposo para ti, me prometí cuidarte y aun así deje que mi madre no te respetara, no te di tu lugar, te merecias todo aun cuando tu nunca me pedias nada.Y el día que lo hiciste te dije que no y te perdí. Por mi culpa deje ir a lo mejor que me ha pasado en la vida, al que le daba luz a mis días, aquel chico con el que siempre soñaba encontrar, a mi alma gemela, aquel que cuando se fue se llevó mi corazon. Porque mi corazón fue tuyo desde el primer momento en que nos conocimos y cuando te fuiste me senti perdido.
Dijo el castaño.