Corto #OO4.

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En su rostro existía sudor hecho en diminutas gotas que cubría sutilmente parte de su frente y, para volver a quitarse aquel barnizado que parecía lluvia caer en días nublados, alza un poco el brazo y sin dudarlo ningún segundo más posiciona su mano por encima de su piel, retirando los residuos húmedos que yacían ahí. Se sentía exhausto. Cada vez que experimentaba movimientos bruscos podía oír sus huesos rechinar levemente, como si crearan fricción entre si o un choque bastante áspero para hacerle aullar silenciosamente de dolor.

Suspira hastiado y una vez más escucha los lápices moverse sobre el papel a una velocidad apresurada, o algunos siendo mordidos ante un aumento de nervisismo por falta de conocimiento y plena ignorancia. A el castaño no le gusta eso, tiene que incrementar el doble de su concentración y es el momento exacto donde Billy no se encuentra, pero de cierta forma ya no le importa púes todo lo que había estudiado junto al fantasma lo ha dejado en la hoja prensada, es información que estaba totalmente lista para ser entregada y ser vista de los grandes conocimientos que manejaba el castaño.

— El tiempo se acabó, Wright. — sentenció, arrebantándole con velocidad el papel de las manos para que el castaño no pudiese objetar nada. Alza la cabeza con rapidez, exaltado. — Se acabó, y si no pudiste terminar el examen ya no es mi problema. 

— Y Beverly Heights jamás será la mejor en un rango académico si usted permite que le entreguen exámenes incompletos en un poco de tiempo, director Ponzi. 

Se dirige a la puerta para egresar, aún confundido de sí por responderle de esa manera al hombre de peluca castaña, como si le faltase el aire junto al pecho constantemente oprimido. Mientras vive aquel proceso biológico de su cuerpo, el fanstama le observa sonriendo desde la puerta, no puede evitar estar alegre por las palabras que se le fueron dirigidas a Ponzi, pero no fue más que ignorado cuando el castaño pasa por la puerta para estar en los pasillos.

Eso le hace sentirse extrañado pero sabe por qué el castaño está actuando así, está estresado por la cantidad exagerada de exámenes y presentaciones durante la semana, luego el breve discurso que le dio a Ponzi por ser un cretino.

Billy sabía que su Spencer estaba cansado a más no poder.

Luego de haber completado el examen de Spencer y quitarle la peluca al hombre, encuentra al castaño sentado en la cafetería completamente solo. Rajeev y Shanilla deben terminar sus exámenes en horarios distintos a los de su humano.

— ¡Hey, bro! — rápidamente se encuentra emocionado porque sabe que es ese momento en el cual podrá estar con Spencer luego de haber estado toda la mañana lejos de él. Ante el arranque de alegría se acerca a él envolviendo su cuerpo en un cálido abrazo.

Spencer simplemente ladea un poco el rostro, sonriéndole. — ¿Dónde has estado toda la mañana?

— Quizás terminando tu examen, tenías una incompleta. — dice, mientras trazaba pequeñas líneas de inicio y llegada con su dedo índice en la quijada del castaño. Con aquella acción percibe el nerviosismo del humano, alteración que le es carcomida cada centímetro de su piel porque sabe que en el público es peligroso. Billy es peligroso cuando quiere atención del castaño.

— ¿Qué hiciste que?

El fantasma no dice nada y simplemente se dedica a esconder su rostro en el pecho del aspirante con el único anhelo de oírle el órgano palpitante de Spencer. Le encanta hacer eso, escuchar ello y las calmadas respiraciones del castaño.

Wright aprovecha el ambiente íntimo que ambos logran crear para tender su cabeza por encima de su codo y tener acceso libre a la vista del suelo, y obviamente al rostro del cantante, quien ya se encuentra recostado en la banca con su cabeza fantasmal en el regazo de Spencer. Profundamente sabe que no es tan íntimo como se dijo a plenitud mental porque están rodeados de personas, pero no son las suficiente para hacerle sentir incomodo, además de estar a una considerable lejanía.

Acarició el cabello ectoplasmatico de Joe, y siente como éste se derrite, no literalmente. — No pierdes el tiempo, ¿verdad?

— Si la vida te da Spencer's, has Billy's para ellos. — el aspirante carcajeó por el comentario tonto y eleva el rostro para tomar un respiro. Cobra aprovecha aquello para besar castamente el cuello del humano y volver a la posición en la cual está, no sin antes atraer a Wright por el cuello para que volviera a como estaba.

— ¿Te parece si vamos a quitarle la peluca al director Ponzi?

Propone Spencer, mirándole con complicidad. Pronto recibe la misma respuesta señaletica de su rostro.

Quitarle la peluca a Ponzi, misión en proceso.

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〔escrito: 3O | O7 | 19.
palabras: 794.
publicado: O3 | O8 | 19.〕

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