Nunca me dejes sola

Capítulo 2 "Casualidad"

Refugio POV:
Estamos en el hospital,  Fer se desmayó y lo trajimos de  urgencia. Esperemos que solo sea un desmayó.

-¿Quieres que te traiga un café tio?- pregunto.
-¡Si por favor!- respondió mi tio Roberto.

Me dirigí al comedor del hospital y pedí dos cafés negros, bien calientes. La mujer me da los cafés, los tomó con mis manos y al girar chocó con alguien y lo quemó con café.

-¡Perdón, pero que estupida fui!- digo para luego levantar la cabeza y lo vi, era un chico como de unos 20 años, alto, ojos y cabello negro, con dos pincig, uno en la nariz y otro en una ceja.

-¡No importa!- responde con una sonrisa- parace que hubiera chocado con un angel.

Me sonrió...

Este también tenia una gorra.
-¡Gracias, igual lo lamento!- me disculpo de nuevo.

-¡Te perdono si me dices tu nombre bonita!- me sonrió.

-¡Mi nombre es Refugio, Refugio Sombra!- estiró mi mano y este la apretó.

-¡Iván Troncoso!- respondió-  ¡tu eres sobrina del empresario Roberto Sombra!, ¿verdad?.

-¡Si, es mi tío!- me sorprendió que me conociera a mi y a mi tio Roberto.
Charlamos un rato más y decidí volver con mi tío,  Fernando ya había despertado.

Paloma PVO
-¿como explicas que has encontrado a tu madre en el suelo de la Sala de tu casa y no las oído cuando caía por las escaleras? 
Mi padre ya se había ido a su trabajo y yo estaba en mi habitación la cual pareciera tener una pared anti sonido,  pues la verdad no la oí caer.

Cuando baje por un poco de agua la encontré en el suelo llorando del dolor,  mi primera reacción fue llamar a mi padre pues siempre me ha dicho que lo llame en caso de emergencia. 
Papa llegó minutos después mamá estaba dormida en el mismo sitio,  pues por más que insistí se negó a moverse el dolor no la dejó. 

-¡¿Mi amor que te pasado?! - pregunto papá algo alterado,  mamá lo miro Horrorizada pero respondió.

-Baje por una pastilla para el dolor y me caí por las escaleras- tartamudeo.  No sabía cómo interpretarlo pero veía miedo en los ojos de mi madre o ¿quizas fue dolor?. 

- papá le revisó y decidió que era mejor ir al hospital,  llama  una ambulancia y nos traladamos los tres allí.  El doctor lamentable nos informa que mamá estará hospitalizada.

Saber que mamá estaría hospitalizada por las diferentes fracturas en su cuerpo,  me preocupó,  pero también me siento culpable de no haberla oído....   En definitiva oírlo decir las diferentes fracturas que tiene mi madre por su cuerpo...  No puedo con ello salgo de su habitación y rompo a llorar....   Veo pasar un chico cada con alguien más,  y aunque no lo crean entre mi llanto se que es el chico más guapo que he visto en mi vida.

Fernando POV :

Poco a poco voy despertando y notó que estoy en una camilla de un hospital.
¿Que demonios hago en este hospital?.

La puerta se abre dejando ver a mi padre y a mi prima Refugio. A estos se les dibuja una leve sonrisa en la cara al verme.

-¿Que estoy haciendo en este hospital?- pregunto arqueando una ceja.

-¡Te desmayaste y con el tio te trajimos al hospital!- respondió Refugio.

-¡Yo tendría que estar en Brasil, no aqui!- bufo.

-¡Ya Fernando, tu primo Carlos viajó a cerrar ese negocio, tu deber es descansar!- dijo mi padre calmado.

¿Como puede estar tan calmado?

Carlos es nuestro enemigo,  el aspira a quedarse con todo...

¿A caso no lo ve mi padre ?

-¡No me gusta estar aqui!- dije serio.

-¡Es por tu bien primo!- Refugio me abraza, es tan cálida.

-¡Esta bien!

~ horas después ~

Estoy cansado, arto de estar aqui, ya quiero volver a mi casa.

-¡Todo va a salir bien!- dice Refugio.
-¡Si, tu tranquila!- le susurró.

El doctor se hace presente en el cuarto.
-¡Señor Fernando puede irse  ahora, pero antes me gustaría hacerle unos estudios de sangre!- dijo este serio.

-¡Si, esta bien doctor, mi hijo se hara esos exámenes!- respondió mi padre.

-¡Ok señor Sombra, voy a mandar una enfermera para que le tomé la muestra de sangre!- dijo el doctor- ¡Con permiso!

-¡Propio!- respondió Refugio y mi padre al unisonido.

-¿Tienen que sacarme sangre si o si?- pregunto de mal humor.

-¡Si y te harás esos exámenes Fernando!- ordeno mi padre.

No quiero hacerme nada, quiero estar en Brasil, si estoy totalmente sano.

Minutos después apareció una enfermera y me saco sangre. Luego de eso me dieron el alta, al salir al pasillo, había una chica que lloraba. Esta tenía unos 18 años, era muy bonita, lástima que sus ojos verdes estaban llenos de lágrimas.
Su cabello era negro, su piel blanca, muy palida. No había duda que era hermosa.

-¿Estas bien Fernando?- pregunto Refugio.

-¡Si, ya vallamonos de este lugar!