Casate Conmigo | Luwoo

07

– Y es algo tonto porque un niño normal pelearía con el chico que gusta de la misma persona que él, pero nosotros eramos amigos y eramos tontos, o sea, teníamos trece años y lo que hicimos fue desquitarnos contigo, solo a nosotros se nos ocurre hacerlo así – Dijo negando y riendo, reí también, pero seguía sorprendido

– Wow, esto sí que no lo esperaba Lee, es decir...¡me hacían llorar! – Dije exaltado, golpeando su hombro

– Creí haber pedido disculpas por eso – Dijo, formando un puchero, haciendo que pusiera una cara de horror y golpeara de nuevo su hombro, haciéndolo reír

– Y estas disculpado, solo que me sorprende, vaya manera de cortejar tienen los dos, he – Le dije burlón, volando los ojos

– Con las chicas parece funcionar así, ¿no has visto "Boys over flowers"? – Dijo alzándose de hombros, haciendo que soltara una carcajada

– ¡Eso no es real! ¡Solo es actuación! Las cosas en vida son diferentes – Negué, haciendo un gesto de que era obvio

– Bien, ya cambiemos de tema que me siento aún culpable – Dijo, sentándose también en forma de indio, dándome la cara – ¿Qué haces aquí?

– Vivo por aquí, bueno, un poco retirado pero nada que haga que te canse caminar – Le dije, viendo que asentía y abría la boca, comprendiendo a lo que me refería – ¿y tú?

– Vine a la casa de un amigo, voy saliendo de hecho y me pareció verte, así que me acerqué, pero en verdad me dirigía a la parada de autobuses – Me explicó haciendo señas con sus manos, como para que entendiera mejor

– ¡Oh! Te acompaño si quieres – Dije, haciendo el intento de pararme, pero fui detenido por su mano en mi hombro, haciendo que me volviera a sentar

Raro, se me aceleró un poco el corazón por su tacto.

– ¿Ya quieres que me vaya o qué? – Me dijo riendo de nuevo, parece que no se cansa de hacerlo

– No, solo que no sé si tienes prisa, dijiste que ya te ibas – Le dije avergonzado, ignorando lo recién pasado con mi cuerpo

– Esta bien, prefiero quedarme a platicar contigo, digo, si tú no tienes algo que hacer

– No, tampoco planeaba nada especial – Le comenté, viendo la hora en mi celular, apenas eran las siete de la tarde, podía gastar tiempo, papá me dijo que me quería en la casa antes de las nueve y media

– ¿Entonces a qué viniste? – Dijo más extrañado que curioso

Mi animo bajó al recordar la razón por la que estaba aquí, Taeyong había hecho que me distrajera del motivo inicial gracias a su buena vibra y calidez, en serio que había cambiado, o eso me está demostrando.

Me perdí un poco en mis pensamientos, retomando las riendas de la situación y negando con la cabeza, tratando de olvidar lo que estaba pensando.

– Nada, solo...quería distraerme – Le dije, tratando de sonreír tranquilamente, pues había puesto una expresión preocupada

– ¿Seguro? – Volvió a preguntar

– No – Le dije riendo – Simplemente no quiero recordar la razón, cambiemos de tema otra vez – Dije bromista, tratando de quitar el ambiente tenso que se había comenzado a crear

– Bien – Dijo sin insistir, devolviéndome la sonrisa cálida – ¿quieres ir a cenar algo? Yo invito – Me dijo, mirándome ansioso

– Claro, algo mejor que la comida es que sea gratis – Le dije, guiñándole un ojo, haciendo que riera