Sin ti

Capitulo quince: Un Año nuevo tradicional poco tradicional

-Desde que Ren me beso en navidad, no e podido pensar en nada mas, mi mente repasa ese dulce momento una y otra vez pero hace casi una semana, no me llama, ni me escribe como antes, las pocas llamadas que e logrado tener con el, duran segundos, son respuestas muy cortas o solo "Hablaremos luego" pero igual deberé cumplir la promesa que nos hicimos por que estoy seguro de que el... Que el...

-"Estoy enamorado de tu hermana"... Ese es el mejor regalo de navidad que te daré en esta vida -Dice Megumi a modo de burla viendo a Keiko cocinando.

-Keiko y Megumi están en la cocina, toda llena de cup cakes, perfecta mente decorados y colocados de manera que el lugar parecía una tienda.

-Si, creo que fue muy bueno -Dice Keiko de un modo fría y distante.

-Hermanita, no imites a tu novio y dime que pasa -Dice Megumi recostándose en la mesa.

-No sucede nada, solo estoy algo... no se- Dice Keiko suspirando.

-Mira, acabas de hacer tres, docenas de cup cakes, algo pasa y debes hablar lo o ir con el -Dice Megumi tomando uno de los cup cakes.

-Ir con el... -Piensa Keiko al sacar los Cup cakes- Eso es lo que debo hacer, Ren me pidió hace una semana que fuera a su casa, el debe estar preparando algo para celebrar el año nuevo conmigo-Keiko dejo los Cup cakes en la mesa- ¡Eres una genio! -Grita Keiko muy feliz y volviendo a su modo de ser- Ahora solo debo cambiarme y esperar a que se haga de noche porque ir a celebrar año nuevo desde las seis de la mañana seria muy raro -Dice Keiko dejando su delantal en una mesa, la cocina algo desastrosa, sucia, al dirigirse a las escaleras, ve a sus padres apenas despertando, Keiko les da los buenos dias y regresa a su cuarto.

-¿Pero que paso aquí? -Pregunto el padre de Keiko.

-¿Keiko esta nerviosa? -Pregunto la madre de Keiko a Megumi.

-No, preocupada pero podríamos venderlos para pagar lo que uso -Dijo Megumi a modo de respuesta al darle un cup cake a su madre y subir a dormir.

-Al caer la tarde, las luces de la ciudad se encendían, a pesar de no estar tan decorada como en navidad, la alegría era notable, las familias juntas, Keiko llego a la casa de Ren, ella con un vestido que parecía de lana, este dejaba ver sus piernas preciosas, blancas y tersas, unos tacones negros bajos, un maquillaje muy simple pero tierno y su tierno peinado con sus dos rodetes, en sus manos una contenedor transparente con muchos cup cakes y una especie de mochila en su espalda, al Ren abrir la puerta Keiko cierra sus ojos y le sonríe, al abrirlos ve a Ren con una expresión aterradora-mente fría y de desprecio, un traje completamente negro, un ambiente lúgubre parecía emanar de la casa, Ren solo vio a Keiko, dirijo su mirada a la sala y salio con ella.

-Keiko creo que debería explicarte algo pero...-Dice Ren tomándola de los hombros y viendo sus ojos-...Debes irte a casa -Dice Ren sin darle una explicación de lo que sucede.

-¡¿Que?! -Dice Keiko en un tono de voz muy alto- Soy tu novia y lo que suceda podemos superarlo juntos -Dice Keiko estando por tomar la mano de Ren.

-La puerta se abre, Keiko ve a la mujer de entre ojo, esta sin sonreír le llama la atención a Keiko, esta nerviosa suelta la mano de Ren y la ve bien.

-¿Tu-tu-tu madre esta a-aquí? -Dice Keiko apuntando y viendo a ambos.

-al entrar a la casa de Ren, todo parece haber cambiado, las cortinas, la decoración, hasta los muebles y la computadora de la sala parecía haber desaparecido, todo remplazado por cojines y una mesa para el té, Keiko sentada frente a la mesa, veía a la madre de Ren, la mujer muy imponente, al igual que en la foto que Ren le había mostrado, ella llevaba su Quimono y su cabello perfectamente arreglado, Ren volvió a entrar a la sala con una bandeja de tazas tradicionales de cerámica, todas con té verde y los tallos perfectamente rectas en el agua.