Llevo tu nombre

UN TE AMO INFINITO

No preguntaste el porqué de mis cicatrices, sino, más bien, también te desnudaste las tuyas, y yo, que le he temido al amor, las bese y las hice mías. ¡Y maldije las palabras que las hicieron y bendecí la mano que las curo!

Eres la chica con la que uno quisiera tropezar muchas veces en la vida, porque haces girar todo tu mundo en un eje precioso y tus pasos son coordenadas, y son el epicentro de todos tus terremotos.

Llevas pájaros enredados en el pelo, hueles a girasoles en pleno invierno, padezco el síndrome de manos gélidas y espero por los días para vernos y me hagas una entropía con las tuyas.

Si supieras lo importante que son los besos que me das cuando nadie mira, cuando todo calla, incluso aquellos autos y luces que vieron darnos nuestro primer beso, fue una luna llena.

Asciendes en la vida a ser una partitura,

Un verso,

Una revolución,

Un fragmento,

Una pieza de arte.

Y si supieras que el arte te envidia, y si supieras que un suvenir son todas las coordenadas de este mundo geográfico.

Y es que esta vida no te cabe en las manos bailar con las mías en la curva de tu espalda.

Y el descender de tu espalda besa el cielo, de ese cielo que encierra el paraíso.

En este mundo donde todo es relativo te amo por ser la más absoluta.

Te amo misteriosa porque solo en el misterio se encuentran verdades.

Te amo con luz y a oscuras, cuando eres invierno y verano, cuando la luna se va y solo quedan estrellas.

Te amo cuando estas caída y cuando eres imperio,

Por encima de cualquier sonrisa descompuesta.

Te amo sin cerrar los ojos y seguir viéndote en mis sueños, en tus sueños y en tus pesadillas ante todo.

Te amo, ¡Joder!

Te amo descalza,

Denuda,

Vulnerable,

Rota,

Dañina.

Te amo ante las aves que pronostican la lluvia y entre la nostalgia y la melancolía por la puerta,

Recordándote que lo "eterno" puede terminar en una sonrisa, en una lagrima, en un suspiro, en un segundo.

Te amo como Sabines ama a su Chepita.

Como Frida a su Diego.

Como Fella a su rap.

Te amo como Einstein a la ciencia.

Como Bukowski a sus semanas enteras ebrio en poesía.

Como Pink a su queridísima y odiada amarilla.

Te amo así, en defectos y en virtudes, por encima de tus tormentas, tornados y torbellinos.

Esto viene desde hace vario tiempo atrás, ojos bonitos, no lo olvides.