Capítulo 2

155 18 6
                                    

Cuando abrió los ojos, lo primero que vió fue la almohada. ¿En que momento se había puesto boca abajo? Se removió lentamente, sin querer levantarse aún, cuando sintió algo cálido en la piel de su espalda. Soltó un suspiro y sonrió levemente, aquellos besos en su piel se sentían muy bien. Jonghyun se encontraba adormilado aún y no se daba cuenta que Minho recorría cada centimetro de su piel con sus labios.

Suspiró nuevamente en cuanto el cuerpo del alto se pegó al suyo, aún con los ojos cerrados, disfrutando del calor ajeno y las atenciones que recibía. Pero, al sentir algo duro contra su muslo interno, algo dentro de su cabeza hizo ''click'' y abrió los ojos, impactado. ¿Acaso... eso era lo que él creía que era?

- M-Minho... espera... - Tragó saliva con nerviosismo. Sintió la suave risa de su ''marido'' en su oido y esto le hizo estremecer, más no dejó de insistir en quitarse al menor de encima. - Minho, en serio... aún no me siento muy bien. - Insistió, hasta que finalmente Minho se quitó de encima suyo y soltó un suspiro de resignación.

- Esta bien... Estaré abajo. - Dijo el menor en voz baja, mientras se levantaba de la cama y se vestía rapidamente, dirigiendose a la puerta y cerrandola con un suave movimiento. Jonghyun suspiró y revolvió sus propios cabellos, dandose cuenta de que no iba a ser nada facil estar un año con Minho. Probablemente acabaría dejandolo y luego Choi Jonghyun le mataría y lo peor de todo, no le daría ''la recompensa''.

Tragó saliva con un poco de nerviosismo y se levantó, colocandose nuevamente la camiseta del pijama (¿Se la había quitado él mismo o había sido Minho?) y saliendo de la habitación que compartía con el menor. Algunas de las personas que trabajaban allí se extrañaron de ver a Jonghyun en pijama, puesto que él solía vestirse bien incluso para ir a desayunar. Jonghyun solo les ignoró y bajó las escaleras, escuchando otras voces además de la voz de Minho que provenían de la cocina. Se asomó un poco y vió una chica que era bastante parecida a él, por lo que supuso que era ''su hermana''. También vió a quienes se suponían eran sus padres y... Oh, ese hombre era como Minho pero con un par de años más.

De repente, sintió muchas miradas encima suyo, y la risa incomoda de Minho, quien rapidamente se levantó de la mesa y le jaló bruscamente del brazo, haciendole subir las escaleras mientras le susurraba entre dientes que era un idiota, que por qué no se había vestido y qué demonios tenía en la cabeza. Jonghyun solo se dejó llevar, sin comprender del todo su reacción. Hace un rato se lo había querido ''violar'' -según él- y ahora lo maltrataba. ¿Tendría doble personalidad?

En poco tiempo se vió metido en una habitación llena de ropa, probablemente un walking closet o algo así. Sintió las grandes manos despojarle de su ropa y dejarle solo en ropa interior, cosa que le hizo sonrojar, sin embargo ni una sola queja salió de sus labios. Jonghyun clavó la mirada en el suelo mientras notaba que Minho se había quedado totalmente quieto. ¿Y ahora que demonios le pasaba?

Con algo de miedo levantó la cabeza y le observó. ''Oh... mierda.'' ¿Por qué le miraba como si estuviese a punto de comerselo? Jonghyun parpadeó un par de veces, mientras el menor dejaba caer la camiseta del pijama al suelo y le tomaba rapidamente de la cintura, pegandole a su propio cuerpo casi con desesperación.
Y lo que pasó a continuación... Jonghyun no tuvo tiempo de reaccionar. De alejarse, o de empujar al menor. Todo pasó tan rápido que no se dió cuenta en que momento los labios abultados de Minho estaban sobre los suyos, besandolo de una forma tan desesperada que el mayor solo atinó a aferrar sus manos en los hombros del más alto. Cuando por fin reaccionó, intentó alejar a Minho, pero finalmente terminó rindiendose ante él y correspondiendo aquel beso casi con la misma desesperación.

''¿Qué demonios me pasa?'' se preguntó a si mismo mientras sentía como Minho mordía y succionaba la piel de su cuello, seguramente dejándole marcas que tardarían un buen tiempo en borrarse. Cerró los ojos y subió sus manos a la cabeza del contrario, comenzando a acariciar sus cabellos con lentitud, ya sin intentar alejarlo. Las grandes manos de Minho se aferraban a su cintura, acariciando su piel con suavidad, cosa que le hacía desesperar un poco.

Nuevamente los abultados labios se encontraban sobre los suyos, iniciando un nuevo beso desesperado, mientras Jonghyun aferraba sus manos en los hombros de Minho y este bajaba sus manos a los muslos del mayor, levantandolo y provocando que rodeara su cintura con sus piernas. El gemido que escapó de los labios de Jonghyun sin su permiso, provocó que Minho le apoyara bruscamente (por no decir que le estrelló) contra el espejo del walking closet, mientras jalaba su labio inferior y le lastimaba un poco.

Minho alejó sus manos de los muslos ajenos, quitandose con un rapido movimiento su camiseta y... mierda. La mirada de Jonghyun se clavó en el abdomen de su ''marido''. ¿Acaso eso era normal? ¡Por el amor de dios, era imposible tener ese cuerpo! Minho sonrió al notar la mirada de Jonghyun sobre él. Era como si nunca le hubiese visto antes, y aunque le resultaba un poco extraño, en cierto modo le agradaba.

Una de las manos de Jonghyun bajó y acarició con lentitud el pecho de Minho, tomandose su tiempo para recorrer aquella suave piel con la punta de sus dedos, llegando a su abdomen y delineando con suavidad y paciencia cada uno de los ''cuadraditos'' tan notoriamente marcados. En cierto modo, envidiaba su cuerpo. Mientras Minho parecía un Adonis, él no tenía ni un poco de músculo.

Detuvo sus caricias al sentir nuevamente los abultados labios recorriendo su piel, haciendole soltar varios jadeos que salian de su boca sin su permiso. Sus manos nuevamente volvieron a los anchos hombros, arañando la piel con suavidad, mientras la boca de Minho continuaba marcando su piel. Pero de repente, Jonghyun volvió a la realidad.

Gracias a los golpes en su puerta, Jonghyun se dió cuenta de la situación en la que estaban y de algún modo logró alejar a Minho de su cuerpo, tomar un pantalón, una camiseta y un par de zapatillas y encerrarse rapidamente en el baño, dejando a Minho totalmente en shock, con un serio problema entre sus piernas.

Dentro del baño, Jonghyun se lavó la cara con agua helada varias veces. ¿¡Que demonios!? ¿Acaso iba a dejarse violar por ese tipo? Sus mejillas estaban rojas por el calor que sentía en ese momento y podía apreciar como lentamente aparecían marcas allí donde Minho había posado sus labios. Enredó sus dedos en su propio cabello y lo jaló un poco, tratando de asimilar lo que había sucedido. Alrededor de diez minutos después logró calmar tanto sus nervios como otra cosa que había ''despertado'' y se vistió, maldiciendo nuevamente aquellos pantalones apretados que usaba Choi Jonghyun. ¿Es que este hombre no conocía la palabra ''comodidad''? Porque aquella tela se pegaba en sus piernas como si fuese una goma, y mientras se miraba al espejo pudo notar como incluso le levantaban un poco el trasero. ''¿Por qué...?'' No pudo evitar reir al notarlo. Quizá Minho le obligaba a usar esos pantalones.

Se colocó la camisa y las zapatillas, para finalmente salir del baño -no sin antes entreabrir la puerta y fijarse si Minho seguía ahí-. Dejó su pijama sobre la cama y nuevamente recorrió el mismo camino hacia el comedor, donde le esperaban ''sus padres'', ''su hermana'' y ''su marido''. Entró a la sala con algo de nerviosismo, sintiendo aquellas miradas clavadas en su persona otra vez. Se sentó al lado de Minho y susurró un suave ''Buenos días'' que fue respondido por sus padres y su hermana.

Se acomodó en la silla, haciendo una mueca y escuchó una suave risa femenina. Levantó la mirada y aquella que se suponía era su hermana, tapaba su boca con su mano y reía suavemente.

- ¿Que pasa Jjong? ¿Tuviste una noche interesante? - La chica continuó riendo, mientras Minho quería que la tierra se lo tragase y Jjong... Bueno, él estaba en shock. Sus labios estaban entreabiertos y lo único que hacía era balbucear, cosa típica de él cuando se ponía nervioso.

- ¡C-CLARO QUE NO! - El grito resonó en todo el lugar. Minho se volteó algo asustado a observarle, puesto que Jonghyun nunca levantaba la voz, ni a sus padres, ni a su hermana. La chica inmediatamente dejó de reirse y le miró algo impresionada, mientras Jonghyun tragaba saliva y agachaba un poco la cabeza, tomando su taza de café y comenzando a beber lentamente su contenido. Observó a un par de centimetros de su mano una porción de tarta de fresa y... dios, era su favorita. La tomó sin preguntar y sin pedir permiso y rapidamente comenzó a comer, sin notar las miradas incredulas de su familia puestas en él.

- Cariño... - La voz de Minho le hizo detenerse y observarlo, con restos de pastel alrededor de sus labios. El menor levantó su mano, sosteniendo una servilleta de papel en ella y comenzando a limpiar los labios de Jonghyun, quien se dejó hacer tranquilamente. En cierto modo, a Minho le había causado ternura ver a Jonghyun así. Lo que notó tiempo después fueron las miradas impactadas de sus suegros y su cuñada, que parecían haber visto un fantasma.

Minho solo sonrió y cuando Jonghyun estuvo totalmente limpio -y presentable- se inclinó y le dió un suave beso en sus labios, que rapidamente fue correspondido por el mayor. Luego de aquellas demostraciones de ''amor'' terminaron su desayuno en silencio.

Minho anunció que se iba a la empresa y Jonghyun prefirió quedarse en la casa, excusandose con su familia de que no se sentía muy bien e iba a recostarse un rato en su habitación. Salió rapidamente de allí, subiendo casi con desesperación las escaleras que conducían al segundo piso y entró en su cuarto, sin darse cuenta de que la puerta no se había cerrado cuando él la empujo. Suspiró un par de veces y sonrió levemente al verse por fin tranquilo. Sonrisa que desapareció en cuanto escuchó aquella voz que desde ese día quizá comenzaría a odiar.

- Yo se que tu no eres mi hermano.- Dijo la joven, apoyada en el marco de la puerta, con una suave e inocente sonrisa en su rostro. Jonghyun se giró lentamente y de un momento a otro, se puso totalmente pálido.

''Bueno, fue lindo mientras duró.''


~*~

La noche en la que todo comenzó, Choi Jonghyun por primera vez en su vida, sintió miedo. Se estaba escapando de todo, estaba dejando todo atrás. ¿Y que si descubrían a Kim Jonghyun? ¿Que serían capaces de hacer sus padres si se enteraban que él no era el ''verdadero'' Jonghyun? Sabía que a Minho no le iba a importar mucho, pero a sus padres si.

Caminó rapidamente bajo la lluvia, mientras observaba las casas hasta finalmente dar con su nuevo hogar. Era una casa tan... normal. Él estaba acostumbrado al lujo, a llegar en su auto de lujo y ser recibido por varios empleados que le tendrían miedo, porque él se había encargado de eso. Pero al entrar a su casa, lo único que se encontró fue un silencio escalofriante y una oscuridad tremenda. Encendió la luz de la sala y dejó su abrigo mojado encima de una silla, porque de algún modo tenía que secarse.

Recorrió la planta baja de la casa, notando que solo estaban la cocina, un baño y la sala. Supuso que las habitaciones se encontraban en el piso superior, por lo que rapidamente subió las escaleras, tratando de entrar un poco en calor porque debido a la fría lluvia, todo su cuerpo se había enfriado. Le costaba mover los dedos y eso era mala señal. Al llegar al segundo piso, observó que había tres puertas. Bien, una de esas era su habitación.

Abrió la primera, y... era un baño. La cerró con lentitud, sabiendo que no estaba solo en la casa, para luego abrir la segunda puerta. Esa era la habitación de su ''madre''. Sonrió con suavidad y lentamente se metió en la habitación, tratando de no hacer ruido y acercandose para observar a la mujer, quedandose sorprendido al notar el gran parecido que tenía con él mismo. Era extraño... la forma de sus ojos era casi la misma, también la forma de su cara y sus labios. Supuso que como él era tan parecido a su hijo, también se parecería a ella en cierto modo.

Salió de la habitación con el mismo cuidado con el que había entrado, finalmente dirigiendose a su propia habitación. Entró e inmediatamente encendió la luz, dejando su teléfono conectado al cargador. Pero algo que se movió en medio de su cama, le asustó. Se giró inmediatamente y destapó a ese algo que resultó ser un perro. Un bonito perro que ni bien le vió, se paró en sus dos patitas traseras y apoyó las delanteras en su abdomen, moviendo su cola. Bien, Jonghyun tenía un corazón de piedra pero era realmente débil ante los animales. En especial los perros.

Y en especial, un perro tan bonito como ese. Acarició su cabecita con lentitud y sonrió mientras tomaba la plaquita que había en su cuello y leía con atención lo que decía.

- ¿Roo? Que nombre tan original... - Susurró al aire, para finalmente apartarse con cuidado y quitarse la ropa húmeda, dejandola en el suelo. Se vistió rapidamente y se metió en la cama, sintiendo como esa pequeña perrita se acurrucaba a su lado. No puedo evitar abrazarla y luego de unos minutos caer totalmente dormido. Había sido un largo día y estaba seguro, de que el día siguiente lo sería aún más.

El Usurpador {HoHyun}Where stories live. Discover now