Si el hijo de satanás hubiese nacido en la tierra, ese lugar sería Afiresien. Las personas de allí son violentas, y su rey no es la excepción. Afiresien en su momento llegó a ser temida, todo lo que no podía tener lo dejaba hecho cenizas, su rey Nye, es uraño y de mal humor, y odia perder y, su heredero, Ael, se dice que asesinó a su madre al encontrarla acostada con su tío. Y desde ese entonces fue el terror de todo Afiresien. El símbolo es un Dragón, y su lema es "Que lo que no se arrodille ante la solemne Afiresien, las cenizas serán pisadas por el rey."
Y si Artemis no soltaba uno de los bosques productores de madera de Ravenwood, entonces Ael se lo arrebatará.
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El general de combate, el general Aran, y demás miembros de la armada de Sirona, entran alarmados a la sala del rey.
-Mi rey, por el norte se acerca Afiresien con Ael liderandolos.-Habla el general Aran angustiado y sofocado por lo que se aproxima derrepente.
El rey se levanta del trono.
-Solicita una reunión con el Consejo.-Habla el rey dirigiéndose a la puerta.
-No hay tiempo. Ya elevaron la antorcha de humo. Vienen directamente a batalla.-Habla Aran
-Alguien nos ha traicionado...-Dice el General de combate.
-SI SABEN QUIEN ES EL TRAIDOR QUE SU CABEZA RUEDE. PERO ESE NO ES EL PROBLEMA AHORA MISMO.-El rey está alterado. Se quita su corona y su manto y se la entrega a uno de sus súbitos.-Entregasela al Jefe de Iglesia. El rey de Sirona... Va a pelear.
Sirona completa se estremece al escuchar la noticia, sabían que el rey un día dejaría el trono pero no en estas circunstancias. Pero lo que todos se preguntan es ¿está Artemis lista para asumir el trono?
-Padre. Iré a pelear contigo.-Habla la joven mientras su padre se viste con la armadura.
-No. Tu te quedas a asumir tu papel como reina.-Habla Astor.
-Ravenwood es mi territorio, el territorio de mi madre. Debo de ir a dar la cara. Quien se debe de quedar en Sirona eres tú.
-NO IRAS.-Grita el rey.
-¿POR QUÉ?-Responde Artemis alterada mientras que las damas de Artemis y los súbitos del rey se miran incómodos.
-PORQUE ERES UNA MUJER. Y ERES LA REINA. NO PUEDES ABANDONAR A TU PUEBLO.
-¿Que no? Mírame hacerlo. Rey.-Hace una reverencia y se va de la recamara del rey.
Artemis se viste con su armadura y toma su espada, arco y flechas envenenadas. Se sostiene su largo pelo en dos trenzas y sale del palacio.
-Quiero a Alejandro Magno.-Habla Artemis llegando al establo.
Alejandro Magno es un caballo negro, alto y fuerte, es veloz y audaz. Es el caballo que le regaló su padre cuando cumplió diez. Artemis le llamó Alejandro Magno en honor al conquistador Macedonio Alejandro Magno, rey griego que conquistó a Egipto y más territorios, creando incluso el Helenismo. Al ser un gran conquistador, Artemis pensó que llamarlo igual sería un honor.
