Capítulo 5: Para poder comer carne

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Para ganar dinero

Xu Yinrong puso las diez fotografías sobre la mesa y se quitó las gafas de presbicia para mirar a He Bai, preguntándole: "¿Cuál crees que es la mejor?".

Bai se frotó la cara para dejarse ver más animado a pesar del dolor de cabeza de su resaca. Miró las fotografías una por una, levantó la mano, dudó por un momento, antes de apuntar la foto en la esquina superior derecha del conductor del autobús, "Éste".

"¿Por qué crees que es eso?"

"Sólo un presentimiento".

"¿Qué clase de sentimiento?"

Tomó la foto con la mala iluminación y la composición sesgada, miró las finas arrugas en las esquinas de los ojos marrón oscuro del conductor en el espejo retrovisor, y le contestó recordando la sensación que tenía cuando tomó la foto, "Simplemente sentí... que la mirada en sus ojos era realmente buena. Después de tomar la foto, la sensación que tenía en mi corazón era sólo eso: que con esta mirada en sus ojos, toda la imagen se sentía como si hubiera cobrado vida. Me sentí muy satisfecha, muy feliz".

Los ojos de Xu Yinrong se movieron un poco, y continuaron preguntando, "¿Por qué estabas contento?"

"Porque grabé un momento que vale la pena recordar." La sensación de caos causada por su resaca desapareció gradualmente. Su boca apareció inconscientemente, con el hoyuelo en su mejilla izquierda, "Cuando vi esta fotografía, mi mente inconscientemente parpadea a través del tiempo en que este conductor estaba aliviado y a la vez disculpado por traer inconvenientes a sus pasajeros porque estaba tratando de evitar golpear a un cachorro. Sus ojos en ese momento... eran muy amables. Esta es la única fotografía de estas diez fotos que me da ganas de ponerla en un álbum y dejarla para que recuerde mis recuerdos cuando sea viejo".

"Uh-huh." Xu Yinrong, con una leve sonrisa en la cara, asintió, "No está mal. Puedes tomarte un descanso la semana que viene".

Él Bai no podía seguirle el ritmo al tren de pensamiento, "¿Tomar un descanso?"

Xu Yinrong asintió con la cabeza, inclinándose para sacar una lista de su cajón, pasando a la página que tenía el nombre de He Bai, y usando una pluma roja, tachó la puntuación de cero, la cambió a 95 puntos, cerró la lista y le hizo señas para que se fuera: "Te doy una semana de descanso. Ahora vete, toma un buen descanso. Es mejor que los jóvenes beban menos, es malo para el cuerpo".

Los ojos de Bai se iluminaron cuando miró la lista que tenía en las manos. Después de cambiar sus notas, se levantó excitado y le hizo una reverencia, y dijo sonriendo tontamente: "¡Gracias, profesor! ¡Profesor, usted es realmente el mejor!" Cuando terminó de decir eso, tomó la cámara para huir, asustado de que se arrepintiera de su decisión y volviera a cambiar sus notas.

"Esa pequeña mocosa..." Xu Yinrong agitó la cabeza, pero la sonrisa de su cara creció sin que se diera cuenta. Escogió su teléfono y llamó a su buen amigo: "Oye, Lao Jiang- ¿todavía recuerdas esa buena planta de la que te hablé la última vez? Ha hecho grandes progresos..."

Por primera vez, He Bai fue elogiado por el profesor Xu. Fue alegremente a la calle trasera a comer una comida de carne, y luego, con muy buen humor, trajo todas sus posesiones con él para ir a la famosa calle de fotografía de bodas en B City.

Lo pensó durante mucho tiempo, antes de decidirse finalmente por una forma rápida de ganar dinero que también tuviera en cuenta sus principales fotografías de edición.

Un fotógrafo que no podía editar bien sus fotos, no era un buen chef en la cocina. Una foto perfecta definitivamente tenía las sombras de la gente que la retocaba en las últimas etapas. Como fotógrafo que principalmente tomó fotos del paisaje, no se puede decir que sus habilidades con el photoshop estén a la altura, pero aún así eran bastante buenas. Esos cielos azules, el agua clara del océano, los colores hermosos del arco iris, los pájaros volando después de ser sorprendidos en el bosque... También podía elegir no editarlos, pero siempre y cuando los editara correctamente, una foto que tenía 80 puntos podía cambiar inmediatamente a una foto que valía 100 puntos! A pesar de que se inclinaba más hacia la fotografía de paisajes, y de que la cantidad de edición que hacía en los retratos no podía igualar la cantidad que hacía en los de paisajes, tenía más de una década de experiencia con todos los demás. Mientras estuviera dispuesto a aprender y practicar, sería más que suficiente para cubrir sus gastos de subsistencia.
Ajustó la cámara de nuevo a su lado, miró al estudio de fotografía elegantemente decorado frente a él, y entró en el estudio - este estudio dio la mejor paga, así que se decidió por esta tienda!

Un renacimiento sin sentidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora